La Unesco consagra a Le Corbusier
La organizaci¨®n de la ONU declara Patrimonio Mundial 17 obras en siete pa¨ªses del suizo, gran maestro de la arquitectura moderna
Nada menos que 17 obras de Le Corbusier han sido declaradas hoy, domingo, Patrimonio Mundial por la Unesco en la 40? reuni¨®n, celebrada desde el pasado 10 de julio en Estambul y que fue suspendida el s¨¢bado por el intento de golpe de Estado en Turqu¨ªa. Que sean tantos edificios, en lugares tan distantes como B¨¦lgica y Jap¨®n, que sean algunas de las obras m¨¢s famosas, pero tambi¨¦n varias de las menos conocidas las que hayan sido consideradas protot¨ªpicas de su trabajo y seminales de la nueva arquitectura sit¨²a al suizo a la cabeza de la modernidad. Abre tambi¨¦n una v¨ªa de protecci¨®n para la arquitectura moderna que la organizaci¨®n internacional que defiende la documentaci¨®n y conservaci¨®n del Movimiento Moderno (DOCOMOMO) lleva a?os reclamando con sus programas para denunciar la desprotecci¨®n de ese patrimonio.
Charles ?douard Jeanneret (La Chaux-de-Fonds, Suiza, 1887- Roquebrune-Cap-Martin, Francia, 1965) ¡ªun Picasso de la arquitectura por los diversos idearios e idiomas pl¨¢sticos que logr¨® construir¡ª ha sido resumido en 17 inmuebles clave por el comit¨¦ internacional de expertos que ha firmado su candidatura. Que de Frank Lloyd Wright s¨®lo se sopesara un par de trabajos y que del brasile?o Oscar Niemeyer se contemplara s¨®lo Pampulha, da cuenta del valor pionero que la Unesco atribuye a Le Corbusier.
Lo ic¨®nico y lo cotidiano, la densidad urbana y las nuevas t¨¦cnicas constructivas, la ciudad y la caba?a, lo sagrado y lo mundano, todo cupo en la obra de este pintor hijo de un relojero suizo que, tras construir la casa de sus padres, dedic¨® una d¨¦cada de su vida a viajar por culturas ajenas a la suya. Con la digesti¨®n de ese bagaje, un singular don pl¨¢stico y una enorme capacidad de riesgo se convirti¨® en el gran maestro de la arquitectura moderna. No ha habido nadie tan libre ni tan seguido. Tambi¨¦n es dif¨ªcil dar con alguien m¨¢s pol¨¦mico. Sus monumentales edificios en Chandigarh (India) son una meca arquitect¨®nica que recibe hordas de visitantes, pero en su momento fueron criticados por estar ideados de espaldas a las necesidades de la gran mayor¨ªa de los ciudadanos.
Desde que, en 1994, la Unesco constatara que deb¨ªa corregir la preferencia por la arquitectura hist¨®rica, cristiana, elitista y occidental, la organizaci¨®n ha tratado de abrir sus puertas a otro tipo de patrimonio. De los casi ocho centenares de edificios protegidos, apenas 20 eran modernos ¡ªde Gaud¨ª, a la Casa de Luis Barrag¨¢n, en M¨¦xico, pasando por Brasilia¡ª. La llegada a ese podio de las principales tipolog¨ªas ideadas por Le Corbusier supone concederle el cetro de la arquitectura moderna a un arquitecto del que han aprendido, bien y mal, tantos proyectistas. Su huella excede los libros de historia. Sigue alimentando a los mejores, pero tambi¨¦n impuls¨® la configuraci¨®n de bloques de apartamentos que desvirt¨²an nuestras densas ciudades.
La candidatura de Le Corbusier hab¨ªa intentado sin ¨¦xito conseguir la protecci¨®n de la Unesco en dos ocasiones. Sin embargo, como sucede con Picasso, ordenado cronol¨®gica o tipol¨®gicamente, su legado resume la arquitectura del siglo XX. Desde la casa que levant¨® para sus padres, en 1924, hasta El Cabanon, de apenas 12 metros cuadrados, en Cap Martin, junto a la que se ahog¨® en 1965. Entre medias: sublimes edificios religiosos ¡ªRonchamp y La Tourette¡ª, propuestas de convivencia urbana ¡ªL¡¯Unit¨¦ de Habitation, en Marsella, apoyado en pilotes, con jard¨ªn en la azotea y una planta de comercios internos¡ª, o la normalidad de la casa del m¨¦dico Pedro Curutchet, en La Plata, a las afueras de Buenos Aires. El reconocimiento de la Unesco sit¨²a por fin la modernidad a la altura del mejor g¨®tico. Ayuda a equiparar su fuerza al poso de lo antiguo.
Reconocimiento para Antigua y Barbuda, Brasil, India y M¨¦xico
El Comit¨¦ del Patrimonio Mundial de la Unesco, en su 40? reuni¨®n, tambi¨¦n ha inscrito hoy, domingo, otros cinco sitios en la Lista del Patrimonio Mundial:
El astillero de Antigua y sitios arqueol¨®gicos conexos (Antigua y Barbuda). Este espacio comprende un recinto fortificado con instalaciones y edificios portuarios. Las bah¨ªas profundas, rodeadas de terrenos elevados, de este lugar de la isla de Antigua ofrec¨ªa un refugio seguro contra los huracanes, propiciando as¨ª el mantenimiento y reparaci¨®n de los nav¨ªos, se?ala la Unesco. Construido por los ingleses a finales del XVIII gracias a la mano de obra esclava africana, el astillero de Antigua ten¨ªa por objeto proteger los intereses de los due?os de las plantaciones de ca?a de az¨²car. Es el primer nombre de Antigua y Barbuda en la Lista del Patrimonio Mundial.
Conjunto arquitect¨®nico moderno de Pampulha (Brasil). Fue el centro de un proyecto urban¨ªstico visionario de ciudad-jard¨ªn realizado en 1940 en la ciudad de Belo Horizonte, capital del Estado brasile?o de Minas Gerais. Planeado en torno a un lago artificial, el centro, de car¨¢cter cultural y recreativo comprend¨ªa un casino, una sala de baile y la iglesia de San Francisco de As¨ªs. Todos sus edificios fueron dise?ados por el arquitecto Oscar Niemeyer. La explotaci¨®n de las propiedades pl¨¢sticas del hormig¨®n dio lugar a formas audaces. El sitio constituye adem¨¢s un testimonio de la influencia del clima y las tradiciones de Brasil en la arquitectura moderna.
Parque Nacional de Khangchendzonga (India). Situado en el Estado de Sikkim, al norte del pa¨ªs, este parque nacional se extiende por una parte de la cordillera del Himalaya y alberga un paisaje excepcional de planicies, valles, lagos, glaciares y monta?as cubiertas de bosques arcaicos y rematadas por casquetes de nieve, entre las que figura el tercer pico m¨¢s alto del planeta: el monte Khangchendzonga. Las poblaciones aut¨®ctonas de Sikkim profesan devoci¨®n a este monte.
Por ¨²ltimo, el archipi¨¦lago de Revillagigedo, en la costa mexicana del Pac¨ªfico, un ecosistema de cuatro islas volc¨¢nicas deshabitadas. El conjunto de peque?as islas tiene una importante fauna end¨¦mica y es un lugar donde las aves migratorias tienen un punto de recalada en su trayecto americano.
Babelia
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.