Un puesto de trabajo y unas ca?as
?Pueden 22.000 v¨ªdeos caseros acabar representando el ser y el estar de los espa?oles?
?Pueden 22.000 v¨ªdeos caseros acabar representando el ser y el estar de los espa?oles? En principio, aventuras cinematogr¨¢ficas como las de Spain in a day, heredera de un formato original producido en 2011 por la compa?¨ªa Scott Free, y que ya ha tenido ramificaciones en otros pa¨ªses, est¨¢n condenadas al fracaso. El objetivo es demasiado grande como para dejarlo en manos de aficionados, la gente, que con su particular modo de entender sus propias existencias, deben resumirlas en apenas un momento. Pero, ?y si la suma de esos instantes, bien estructurada y, sobre todo, cribada, con verdaderos estallidos de gusto e ingenio, de espontaneidad y desmesura, de vidas calmas y agitadas, acabara conformando no una idea tan trascendente como el ser y el estar, sino al menos un bello reflejo de c¨®mo somos y c¨®mo estamos?
SPAIN IN A DAY
Direcci¨®n: Isabel Coixet.
G¨¦nero: documental. Espa?a, 2016.
Duraci¨®n: 90 minutos
Y justo eso es lo que ha conseguido Isabel Coixet en Spain in a day: ordenar tanto en orden cronol¨®gico (desde la noche y el despertar hasta el nuevo sue?o) como tem¨¢tico la ingente cantidad de v¨ªdeos recibidos, y acompa?arlos de una excelente banda sonora de Alberto Iglesias que huye del subrayado emocional y melodioso para encontrar el contraste y la armon¨ªa inteligente. Y aunque se prefiera lo id¨ªlico a lo problem¨¢tico, por aqu¨ª circulan la Espa?a del paro y la de la inmigraci¨®n juvenil en Alemania o Inglaterra, la Espa?a que lucha contra una enfermedad terminal y que espera que ese d¨ªa no sea el ¨²ltimo. El trabajo de Coixet, con gusto para el montaje y la imagen publicitaria, es mejor cuanto m¨¢s se acerca a lo espont¨¢neo y lo fortuito, mientras que la alegr¨ªa provocada y sin sorpresas (las peticiones p¨²blicas de matrimonio, las ca¨ªdas en paraca¨ªdas), genera los ¨²nicos bajones: si al menos alguna dijera que no o se desmayara en pleno vuelo...
La pel¨ªcula genera sonrisas y emociones, otro de sus objetivos, y, aunque haya v¨ªdeos espectaculares visualmente (el beb¨¦ que intenta atrapar con las manos los primeros rayos de sol que entran por su ventana), hay dos que quiz¨¢ resuman lo que es Espa?a: el de la anciana de 100 a?os que ya no se acuerda de cu¨¢ntos a?os tiene ni cu¨¢ntos hijos tuvo, pero que recuerda c¨®mo se pelan las patatas para la comida familiar; y el de ese hombre sencillo que afirma haber tenido un d¨ªa buen¨ªsimo: "He dado mi pase¨ªto, he trabajado y me he tomado unas ca?as". Espa?a.
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