¡°La novela negra es el bistur¨ª de nuestro tiempo¡±

El expolic¨ªa y detective Santiago Blanco se encuentra en la baranda del puente Topater mirando el turbi¨®n en el r¨ªo Rocha, en medio de la llovizna que cae sin tregua en la ciudad de Cochabamba. En medio de la neblina surge una figura. Se trata un mozo del famoso bar Am¨¦ricas. Es El Abrelatas ¡ªas¨ª lo llaman¡ª, su amigo exdelincuente. Se dirige al investigador y le cuenta que han robado el cad¨¢ver de su hijo. As¨ª comienza la obra Que te vaya como mereces, la nueva producci¨®n literaria del escritor boliviano Gonzalo Lema (Tarija, 1959), la misma que el pasado viernes fue anunciada como la ganadora de la XI edici¨®n del Premio Internacional de Novela Negra L¡¯H Confidencial.

El galard¨®n, promovido por la Biblioteca la B¨°bila desde hace 18 a?os, es convocado por el Ayuntamiento del municipio catal¨¢n de L¡¯Hospitalet de Llobregat. Lema recibir¨¢ una dotaci¨®n de m¨¢s de 12.000 euros, adem¨¢s de la publicaci¨®n de la novela bajo el sello de Roca Editorial. La novela ha sido la m¨¢s destacada entre las 52 presentadas a concurso y el jurado ha valorado el ¡°reflejo que el autor hace de la realidad sociopol¨ªtica boliviana, que sumerge al lector en la dura realidad cotidiana de Cochabamba mediante una amalgama de personajes exc¨¦ntricos y perdedores¡±.

Lema, Premio Nacional de Novela en 1998 y finalista del certamen Casa de las Am¨¦ricas en 1993, cree que la importancia de la novela negra como testimonio de las sociedades hispanoamericanas es capital. ¡°La narrativa policial es un documento de primer orden, para entender nuestro tiempo, la forma c¨®mo vivimos. La novela negra es un verdadero bistur¨ª¡±, asegura. Lema admite, desde la comodidad de su hogar, que cuando recibi¨® el anuncio, hace casi una semana, se encontraba con cierto des¨¢nimo. Solo d¨ªas antes su novela se hab¨ªa ca¨ªdo en la votaci¨®n final de la 73 edici¨®n del Premio Nadal, que cay¨® en las manos de la escritora Care Santos. La noticia sobre el L¡¯H Confidencial lo reconstituy¨®. ¡°Lo estoy disfrutando¡±, dice sin poder contener la sonrisa.

Lema se encuentra en la comodidad de la sala de su hogar. Viste unas pantuflas de lana y un conjunto deportivo de algod¨®n. Recuerda sus primeras incursiones como lector en el g¨¦nero. Fue el intelectual boliviano Luis H. Antezana quien le dio su primera pila de libros de novela negra, que inclu¨ªan t¨ªtulos como Los mares del sur, del escritor espa?ol Manuel V¨¢zquez Montalb¨¢n, hasta llegar a Un ciego con una pistola, de Chester Himes, ¡°que ya es m¨¢s complicada y densa en narrativa¡±, explica.

La saga de su personaje cuenta con cuatro libros anteriores que, al igual que su nueva entrega, reflejan desconfianza y hartazgo hacia un sistema judicial que no funciona en Latinoam¨¦rica. Advierte que cuando las instituciones como la polic¨ªa est¨¢n confundidas y mezcladas con la delincuencia, algo est¨¢ fallando con la ¨¦tica. Para Lema, la profesionalidad sin ese sentido mencionado solo genera des¨¢nimo, como el que se siente frente a la actividad pol¨ªtica en el continente: ¡°Lejos de constituir un Estado institucionalizado, que trascienda a las generaciones de representantes, m¨¢s bien se empe?an en desinstitucionalizarlo, en desagregar el cuerpo social, en aprovecharse a nombre de la izquierda y a nombre de la derecha, a perpetuarse¡±.

Afirma que Am¨¦rica Latina es un escenario propicio para el g¨¦nero negro por su ¡°manera afiebrada de ver la realidad, casi delirante¡±. A?ade que el crimen est¨¢ ah¨ª, solo que a diferencia de Europa y otros continentes el delito se muestra con la picard¨ªa del realismo m¨¢gico. En muchos c¨ªrculos se describe a Lema como un hombre serio y muy formal, seg¨²n cuenta. Sin embargo, considera que el g¨¦nero negro le permite ejercitar el sarcasmo y la iron¨ªa, y que incluso le sacan lo socarr¨®n y la desfachatez. ¡°La escritura policial me pone a mis anchas, porque es una mirada desde la cloaca de la sociedad, desde la mugre o pestilencia¡±, afirma.

Algunos colegas del personaje creado por Lema, otros investigadores como Philip Marlow y Mario Conde parecen un alter ego de sus creadores, Raymond Chandler y Leonardo Padura, respectivamente. Pero, ?hay algo de Santiago Blanco en Gonzalo Lema? ¡°Quisiera creer que el sentido ¨¦tico¡±, manifiesta. Dice que el detective, oriundo del municipio de Punata, lo remite a su ¡°feliz relaci¨®n¡± con lo nacional-popular. ¡°Es p¨ªcaro, es un cholo punate?o, comel¨®n de comida criolla, le gusta transpirar. Es un gran cervecero y un hombre sentimental, pero que tambi¨¦n es duro, sabe aguantar. ?l es el ventr¨ªlocuo, yo soy el mu?eco que escribe, eso es todo, esa es la relaci¨®n que tengo con ¨¦l¡±.