El triunfo del artista

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Tzvetan Todorov : ¡°La resistencia es fundamental en democracia¡±

Hace apenas unos d¨ªas, recib¨ª de manos de Susanna Lea, amiga y agente de Tzvetan Todorov, el que desafortunadamente ser¨¢ su ¨²ltimo libro. Tanto por el tema como por el t¨ªtulo, Todorov no nos podr¨ªa haber dejado mejor testamento de su obra y su posicionamiento como ciudadano comprometido con su tiempo. El libro trata de la relaci¨®n de los creadores y los artistas con la Revoluci¨®n Rusa y el poder que emana de ella. Significativamente, lo ha titulado El triunfo del artista.

Al cerrar la obra de Todorov, este ¨²ltimo libro se convierte en una afirmaci¨®n rotunda de lo que dicha obra ha venido siendo sobre todo desde la publicaci¨®n en 1981 de La conquista de Am¨¦rica, la cuesti¨®n del otro: una obra centrada en el ser humano, su relaci¨®n con la historia y su inserci¨®n en la comunidad en la que vive. Y, dentro de esta l¨ªnea, han ocupado especialmente la atenci¨®n de Todorov los totalitarismos del siglo XX.

El autor ha querido analizar hasta el final la relaci¨®n del individuo con el poder pol¨ªtico e ideol¨®gico, a trav¨¦s de unos de los episodios m¨¢s cruciales de la historia reciente, la Revoluci¨®n Rusa de 1917 que dio origen al primer estado totalitario de la historia. En El triunfo del artista, se fija en una serie de creadores y analiza su posici¨®n frente a la revoluci¨®n en dos momentos: en primer lugar la actitud que adoptan en relaci¨®n con la idea misma de revoluci¨®n antes de que se convierta en realidad. Y en segundo lugar la relaci¨®n que se establece, una vez producida la revoluci¨®n, entre el arte y el poder, entre los creadores y los dirigentes pol¨ªticos.

Ilumina Todorov una de las principales caracter¨ªsticas de la experiencia totalitaria a la vez que describe el car¨¢cter dram¨¢tico ¡ªy casi siempre, tr¨¢gico¡ª de la vida de los creadores. Es inevitable reconocer el paralelismo vital con la propia experiencia de Todorov, nacido en la Bulgaria comunista. A trav¨¦s de los casos de Bulgakov, Gorki, Meyerhold, Maiakovski, Blok, Pasternak, Tsviet¨¢ieva, Pilniak, ?sip Mandelstam, Zami¨¢tin, Babel, Shostakovitch o Eisenstein traza en una especie de retrato colectivo la relaci¨®n de los artistas y el poder sovi¨¦tico. Pero sobre todo estudia en profundidad la figura de Mal¨¦vich.

Ya en su libro Memoria del mal, tentaci¨®n del bien, Todorov hab¨ªa expuesto el conflicto entre totalitarismo y democracia como el acontecimiento m¨¢s decisivo del siglo XX. Y por lo que podemos ver en estos ¨²ltimos tiempos, sigue plenamente vigente. De ah¨ª que Todorov haya querido cerrar su libro con una reflexi¨®n que acerca el retrato hist¨®rico al presente. Y, en nuestros d¨ªas, en que una vez m¨¢s parece que el individuo tan poco puede hacer ante las fuerzas de la historia, ?qu¨¦ puede significar un t¨ªtulo como El triunfo del artista? Tambi¨¦n hoy, viene a decirnos, si se quiere defender al ser humano contra las fuerzas sociales que lo destruyen para convertirlo en un ser reproducible en cadena, sometido estrictamente a las normas y formateado a voluntad, hay que revivir los valores est¨¦ticos, ¨¦ticos, espirituales que subyacen en las obras producidas por los artistas que estudia en su libro, sin los cuales la humanidad no sobrevivir¨ªa. Unas obras y unos valores que ni los peores totalitarismos pudieron destruir. Como ning¨²n poder podr¨¢ acallar jam¨¢s la obra y el ejemplo que nos ha dejado Tzvetan Todorov.

Joan Tarrida es editor de Tzvetan Todorov en Galaxia Gutenberg.