?Para cu¨¢ndo una gala de los toros como la de los premios Goya?

Que levante la mano aquel taurino o aficionado que el pasado s¨¢bado no sintiera un ramalazo de sana envidia al ver la gala anual de los Premios Goya del cine espa?ol.

Un marco incomparable; las mujeres, bell¨ªsimas todas, de tiros largos; los hombres, de pajarita, un pedazo de orquesta, un presentador (antitaurino, eso s¨ª) divertido, el ministro de Cultura all¨ª presente, las c¨¢maras de TVE y tres horas en directo en prime time. M¨¢s no se puede pedir.

Bueno¡­ La gente del cine pide y no para. Es reivindicativa, cr¨ªtica y exigente con el Gobierno de turno. Y hace bien.

He aqu¨ª algunas de las perlas que se escucharon:

Mientras la gente del cine es reivindicativa y cr¨ªtica, los taurinos son medrosos y callados

- ¡°Salud y trabajo para esta profesi¨®n que no se merece tanto desprecio de sus gobernantes¡± (Ana Bel¨¦n).

- ¡°Que el Gobierno no denigre el cine¡± (Pedro Almod¨®var en este peri¨®dico).

- ¡°El cine no vive del estado; genera riqueza para el estado¡±, Mariano Barroso, quien a?adi¨®: ¡°Ser¨ªa de agradecer una nueva actitud de las autoridades hacia el cine¡±, y pidi¨®, finalmente, ¡°un pacto de estado por el cine de todas las fuerzas pol¨ªticas¡±.

Y el vicepresidente de la Academia (Barroso) ofreci¨® unos datos esclarecedores: el cine espa?ol gener¨® el a?o pasado 133 millones de euros de recaudaci¨®n, lo que supuso unos ingresos por IVA de 28 millones. Y el presupuesto del estado para el sector alcanza la cifra de 77 millones de euros.

La cantidad de dinero p¨²blico que revierte al mundo de los toros de los Presupuestos Generales es insultante

Horas antes de la gala, Mariano Rajoy hab¨ªa dicho que no hab¨ªa visto las pel¨ªculas nominadas porque no va al cine. Y Almod¨®var le respondi¨® que ¡°un gobernante deber¨ªa ver el cine que se hace en su pa¨ªs porque las pel¨ªculas son un reflejo de la realidad social¡±.

A pesar del chaparr¨®n, el ministro de Cultura sonre¨ªa y aplaud¨ªa, como todos, cuando Mariano Barroso ped¨ªa mayor atenci¨®n para el sector.

Y mientras se suced¨ªan los premios y los galardonados se acordaban de sus familias, surgi¨® la envidia, primero, y, despu¨¦s, la desaz¨®n, la contrariedad, la resignaci¨®n¡­

?Por qu¨¦ no se celebra en Madrid, con TVE presente, una gala taurina en la que se reconozcan los m¨¦ritos de toreros, ganaderos y empresarios, la pintura de los carteles, las ferias m¨¢s innovadoras, las fotos m¨¢s destacadas¡­? ?Por qu¨¦ a los toros se les niega visibilidad?

Razones no faltan.

La fiesta sigue interesando a una inmensa minor¨ªa de espa?oles.

En 2013, el estado ingres¨® por los festejos taurinos 43,86 millones de euros en concepto de IVA, seg¨²n los datos aportados por Juan Medina, profesor de Teor¨ªa Econ¨®mica de la Universidad de Extremadura. Se supone que cantidades similares se habr¨¢n ingresado en los a?os siguientes porque el n¨²mero de espect¨¢culos ha variado poco.

Y se ha mantenido inamovible la cantidad que los Presupuestos Generales del Estado dedica a la fiesta: 30.000 (treinta mil) euros.

Parece una broma, pero no lo es: los toros ingresan 43 millones y reciben 30.000 euros. Y no se olvide: el cine ingresa 28 millones y percibe 77 millones.

Un detalle m¨¢s: Mariano Rajoy solo visita las plazas para dar m¨ªtines. No ve cine, pero tampoco toros.

Y otro apunte importante: mientras la gente del cine es reivindicativa, combativa y exigente con el Gobierno de turno, los taurinos son medrosos, asustadizos y apocados. Critican en la barra del bar o en la reuni¨®n interna de la asociaci¨®n correspondiente, pero prefieren no se?alarse, guardar las formas y callar ante la sociedad.

Por eso, quiz¨¢ solo por eso, porque el mundo del toro es incapaz de poner al Gobierno de turno entre la espada y la pared, la cantidad de dinero p¨²blico que revierte a los toros es insultante; quiz¨¢, por eso, los toros est¨¢n pr¨¢cticamente desaparecidos de TVE, (629 pel¨ªculas espa?olas emiti¨® la televis¨®n p¨²blica el a?o pasado) y, quiz¨¢ tambi¨¦n por eso, a nadie se le ha ocurrido imaginar que la tauromaquia merece una gala por todo lo alto y televisada en horario de prime time.

Alguien puede pensar que c¨®mo se le ocurre a usted comparar el cine con los toros, por Dios. Pues, s¨ª, porque del mismo modo que se acepta que el estado subvencione la cultura cinematogr¨¢fica (28 pel¨ªculas de 2016 no llegaron a los cien espectadores en sala), los dem¨®cratas deben apoyar que un espect¨¢culo que apasiona a millones de espa?oles reciba dinero p¨²blico al igual que otras actividades culturales.

?Y qu¨¦ le decimos a los antitaurinos? Pues ah¨ª va una buena respuesta:

"Tambi¨¦n hay que agradecer a quienes no comparten nuestros sue?os, porque nos obligan a no renunciar nunca a una lucha que nos permita vivir con dignidad".

Su autora es la actriz Enma Su¨¢rez, que recibi¨® dos premios Goya. No se refer¨ªa a los toros, l¨®gicamente, pero como si as¨ª fuera¡­