Los Oscar cargan contra Trump, pero solo un poquito
El actor mexicano Gael Garc¨ªa Bernal y el director iran¨ª Asghar Farhadi han puesto el acento pol¨ªtico, y el presentador, Jimmy Kimmel, el ir¨®nico
Siempre se podr¨¢ arg¨¹ir que no le cuesta nada a un grupo de triunfadores, muchos millonarios, ponerse solidarios una noche con los emigrantes y refugiados y meter ca?a a Donald Trump. Pero el asunto no est¨¢ para bromas y las decisiones adoptadas contra los expatriados y contra la libertad de expresi¨®n y de prensa del nuevo presidente de los EE UU han encendido todas las luces de alarma, incluidas las que refulgen entre las estrellas del cine. La pol¨ªtica ha estado presente en la gala de los Oscar, pero tal vez con m¨¢s contenci¨®n de la que se pod¨ªa prever, a tenor de los pronunciamientos previos. El espect¨¢culo debe continuar.
Los protagonistas no han seguido apenas la proclama que lanz¨® el pasado viernes Jodie Foster, cuando la ganadora de dos Oscar sali¨® del armario del activismo para gritar ¡°es hora de actuar¡±. Pero s¨ª ha habido varias referencias y dos intervenciones incisivas y directas, la del cineasta iran¨ª Asghar Farhadi y la del actor mexicano Gael Garc¨ªa Bernal. Tambi¨¦n una ir¨®nica y sostenida intervenci¨®n del presentador de la gala, Jimmy Kimmel, que ha llegado a enviar un tuit a Trump, extra?ado de que ¨¦ste no hubiera enviado ninguno a las dos horas y media de la ceremonia. Y un colof¨®n de Warren Beatty.?
Antes, en la alfombra roja, algunos invitados, como la actriz Ruth Negga (nominada al premio a la Mejor Actriz Secundaria por Loving), la modelo Karlie Kloss y el compositor y actor Lin-Manuel Miranda (nominado a Mejor Canci¨®n por un tema de la pel¨ªcula Vaiana) han lucido el lazo azul por los derechos civiles que propon¨ªa la Uni¨®n Americana de Libertades Civiles como protesta por las pol¨ªticas gubernamentales.
Nada m¨¢s empezar la gala, Kimmel, ha sorprendido con una broma se?alando que los Oscar menos racistas (hab¨ªa una gran presencia de nominados negros, a diferencia del pasado a?o) han coincidido con la llegada del empresario al poder. Y despu¨¦s ha hecho levantar de sus asientos al p¨²blico rindiendo un homenaje a la ¡°sobrevalorada¡± Meryl Streep. As¨ª la calific¨® el presidente estadounidense en uno de sus tuits, tras el incisivo y cr¨ªtico discurso de la actriz en los ¨²ltimos Globos de Oro, en el que glosaba la naturaleza multicultural de Hollywood y la necesidad de combatir las falsedades.
Con este principio, ha dado la sensaci¨®n de que la gala se convertir¨ªa en un prolongado acto de protesta, pero los primeros premios han ido cayendo y los ganadores no han hecho ninguna referencia a la coyuntura pol¨ªtica. Solo la presidenta de la Academia de cine de EE UU, Cheryl Boone, ha vuelto al tema, si bien su alusi¨®n ha sido gen¨¦rica, para interpretar: "Pertenecemos a una comunidad cada vez m¨¢s incluyente. El arte no tiene fronteras y no pertenece a una sola fe. Hay una conexi¨®n poderosa y permanente¡±.
Hasta que no ha llegado el Oscar a la mejor pel¨ªcula de Habla no inglesa no se ha entrado de lleno en la pol¨¦mica pol¨ªtica. El director iran¨ª Asghar Farhadi se ha llevado el premio con su pel¨ªcula El viajante. Y tambi¨¦n se ha llevado una buena ovaci¨®n con la carta que ha le¨ªdo una ingeniera de la NASA de origen iran¨ª, porque el cineasta se neg¨® a viajar a EE UU ante la decisi¨®n del Gobierno estadounidense de limitar la entrada a las personas procedentes de siete pa¨ªses de mayor¨ªa musulmana. "Mi ausencia tiene que ver con el respeto que siento por la gente de mi pa¨ªs y por la de los otros seis que han sido v¨ªctimas de una falta de respeto. As¨ª se divide el mundo. Los directores de cine crean empat¨ªa y unen", dec¨ªa la carta. Casi 10.000 personas se reunieron en Londres este domingo para ver all¨ª su pel¨ªcula y solidarizarse con ¨¦l
Le ha tomado el relevo el presentador del Oscar al Mejor Dise?o de Producci¨®n, que ha reca¨ªdo en La la land, Gael Garc¨ªa Bernal, que ha lanzado una de las frases m¨¢s reivindicativas de la noche: ¡°Como mexicano, como inmigrante, como trabajador, estoy en contra de cualquier muro". El p¨²blico ha roto a aplaudir y algunos asistentes se han puesto en pie unos instantes.
La gala ha continuado sin menciones a Trump de los ganadores, salvo las iron¨ªas de Kimmel, alguna de ellas relativa a la predisposici¨®n presidencial por extender noticias falsas. Incluso dos actores tan combativos e implicados como la propia Meryl Streep y Javier Bardem han optado esta vez por un perfil bajo, pol¨ªticamente hablando, cuando han entregado el Oscar a la Mejor Fotograf¨ªa.
Una de las alusiones pol¨ªticas de la noche ha habido que buscarla fuera de la gala. En uno de sus intermedios, el peri¨®dico?The New York Times, una de las dianas de Trump en los medios de comunicaci¨®n, ha aprovechado para lanzar un anuncio: ¡°La verdad es dif¨ªcil. Dif¨ªcil de encontrar. Dif¨ªcil de conocer. La verdad es m¨¢s importante ahora que nunca¡±.
La verdad de la ceremonia ha llegado a su fin con los principales premios en juego. Y ha sido otro activista de siempre, el actor Warren Beatty, acompa?ado de Faye Dunaway (los inmortales Bonnie and Clyde), al entregar el Oscar a la Mejor Pel¨ªcula, el que ha puesto el punto final pol¨ªtico a una gala cr¨ªtica con Trump, pero menos de lo esperado. Tras ensalzar los valores de la diversidad y del respeto, ha afirmado: ¡°En la pol¨ªtica como en las artes, el objetivo tiene que ser la verdad¡±.
Luego, se ha producido el tremendo error, del que se hablar¨¢ hasta el hartazgo. Beatty ha abierto el sobre, ha dudado un instante y se lo ha ense?ado a Dunaway, que anunci¨® La La Land como Mejor Pel¨ªcula. Cuando el equipo del musical ha subido al escenario y ha empezado a dar las gracias, la organizaci¨®n se ha percatado del fallo y ha entregado el sobre correcto. La verdadera vencedora es Moonlight. Al menos, Beatty y Kimmel han pedido disculpas.
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