El activismo de Harry Belafonte
El comprometido artista neoyorquino cumple 90 a?os
A mediados de los cincuenta, la cantante Miriam Makeba dej¨® atr¨¢s el apartheid de Sud¨¢frica y se encontr¨® con la segregaci¨®n racial en el sur de Estados Unidos. En restaurantes con mesas libres ten¨ªa que o¨ªr c¨®mo le dec¨ªan que estaban completos. Tampoco pod¨ªa alojarse en algunos grandes hoteles de Alabama o Tennessee. Por ser negra. Y eso que viajaba en compa?¨ªa de Harry Belafonte, que era ya una estrella. En un lujoso hotel de Atlanta en el que se hospedaban ¡ªpor primera vez un grupo de afroamericanos pod¨ªa pasar all¨ª la noche¡ª el ma?tre dijo que no les estaba permitido entrar en el comedor. Belafonte, sin perder los papeles, asegur¨® que volver¨ªa. Y lo hizo: con reporteros de peri¨®dicos y c¨¢maras de televisi¨®n.
Harry Belafonte, m¨²sico c¨¦lebre por su compromiso pol¨ªtico que hoy cumple 90 a?os,?igual protagonizaba un especial de Navidad para la BBC en Londres que actuaba en The Steve Allen Show de la NBC, programa que segu¨ªan 60 millones de espectadores. Grababa discos de ¨¦xito y hab¨ªa participado en pel¨ªculas como Carmen Jones de Otto Preminger. Harold George Belanfanti naci¨® en Harlem, hijo de inmigrantes antillanos, y de ni?o vio c¨®mo sus padres se las ingeniaban para poder esquivar a los oficiales de inmigraci¨®n. Decidi¨® involucrarse plenamente en el movimiento por los derechos civiles: apoyaba al comunista Paul Robeson, hac¨ªa campa?a por Kennedy y cantaba en mitines de Martin Luther King. Ni sus opiniones radicales ni su rebeld¨ªa contra el sistema le impidieron triunfar. Tiene tres premios Grammy, un Emmy y un Tony. Tambi¨¦n la Medalla de las Artes del Congreso y el Premio Humanitario Jean Hersholt, estatuilla con forma de Oscar.
Un papel de teatro ¡ªdebut¨® junto a Sidney Poitier y estudi¨® con Marlon Brando y Tony Curtis¡ª, en el que hab¨ªa que cantar, le llev¨® a la m¨²sica. Cuando se present¨® en el Village Vanguard, con el guitarrista Millard Thomas, ya hab¨ªa reunido un repertorio de temas de folk estadounidense. Y de m¨²sica caribe?a angl¨®fona, que ¨¦l iba a popularizar en su pa¨ªs. En 1956, Calypso se convirti¨® en el primer LP que vend¨ªa m¨¢s de un mill¨®n de ejemplares en un a?o. Conten¨ªa la canci¨®n jamaicana Day-O (The Banana Boat), que ¨¦l hab¨ªa adaptado con Irving Burgie ¡ªconocido como Lord Burgess¡ª y banda sonora posterior de una secuencia de Beetlejuice de Tim Burton. Con Burgie escribi¨® tambi¨¦n Island In The Sun, que dio t¨ªtulo a una pol¨¦mica pel¨ªcula sobre parejas mixtas con James Mason, Joan Fontaine y el propio Belafonte. Una curiosidad: en su LP de 1962, Midnight Special, se incluye la primera grabaci¨®n oficial de Bob Dylan, que toca la arm¨®nica.
Aunque hace un mes su estado de salud desaconsej¨® que viajara a Washington, fue copresidente de honor de la Marcha de las Mujeres. En 1963, Harry Belafonte hab¨ªa sido uno de los promotores de la que llev¨® hasta la capital al reverendo King. Qui¨¦n iba a decirle, a punto de cumplir los noventa, y tras m¨¢s de medio siglo de luchas por los derechos civiles, la justicia social y las causas humanitarias, que tendr¨ªa que ver un regreso virulento del racismo y a alguien como Trump en la Casa Blanca.
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