Amenaza de derribo para una obra madrile?a de Coderch
El Colegio de Arquitectos de Madrid se moviliza para salvar la primera casa que Jos¨¦ Antonio Coderch y Manuel Valls levantaron en Madrid
![Anatxu Zabalbeascoa](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/https%3A%2F%2Fs3.amazonaws.com%2Farc-authors%2Fprisa%2F087827a1-7c90-4254-a86d-d76a3e52a1b5.png?auth=eb58012f6c9a39dedc7006a221cdef2c2519375fd84d3f216c158c08d5e0c1f5&width=100&height=100&smart=true)
![Casa del arquitecto Coderch en Ciudad Lineal (Madrid).](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/25VEYQU73K5XN7DCGHDZGW2VFU.jpg?auth=b40fa6bf1f67b5c6fbcbf31f8eaadd0ccac5ea0ce9a3c098cb93e4a3a27a285a&width=414)
El Colegio de Arquitectos de Madrid (COAM) recibi¨® esta semana la solicitud de expediente de demolici¨®n para la casa Vallet de Goytisolo, una de las tres obras que Jos¨¦ Antonio Coderch (1913-1984) levant¨® en la capital con su socio Manuel Valls. A diferencia de lo sucedido con la llorada Casa Guzm¨¢n de Alejandro de la Sota ¡ªcuya demolici¨®n fue descubierta casualmente, cuando una torpe construcci¨®n ya ocupaba su lugar¡ª el Colegio ha iniciado gestiones con el Ayuntamiento y la Comunidad de Madrid para tratar de evitar el derribo de una obra incluida en el DOCOMOMO Ib¨¦rico y en la Gu¨ªa de Arquitectura Madrile?a comisionada por el propio Colegio.
Que Coderch es uno de los arquitectos m¨¢s universales del siglo XX espa?ol lo ha demostrado el paso del tiempo. Tras la tabula rasa que supuso la modernidad ¡ªy tras la reserva con la que se ha juzgado la obra de autores relacionados con el franquismo¡ª la relaci¨®n de honestidad con el contexto (genius loci) que ¨¦l defendi¨® siempre est¨¢ presente en las 296 obras que componen su legado.
¡°Los arquitectos deber¨ªan trabajar con una cuerda atada al pie que no les permitiese alejarse de la tierra en la que tienen ra¨ªces¡±, escribi¨®. Su alegato del lugar inclu¨ªa una puesta en valor de la cultura y las tradiciones y una relaci¨®n sensata con los medios materiales disponibles en cada momento de la que hoy contin¨²an bebiendo los proyectistas m¨¢s s¨®lidos. Su actualizaci¨®n de la tradici¨®n mediterr¨¢nea es ahora juzgada como sostenible ¡ªy pionera de la sostenibilidad¡ª, por eso no es exagerado afirmar que el tiempo ha hecho que los valores defendidos por los edificios de Coderch sean considerados determinantes para juzgar la calidad de la arquitectura.
Pocos proyectistas, y definitivamente ninguno en el terreno dom¨¦stico, han dejado en Espa?a una huella como Coderch que, ya en vida, goz¨® del reconocimiento de los numerosos clientes que le encargaron un patrimonio de viviendas unifamiliares burguesas -varios repitiendo encargo- en las que el lujo del bienestar se sent¨ªa pero apenas se ve¨ªa.
Sus mejores casas las construy¨® en la d¨¦cada de los a?os cincuenta, tras finalizar en Caldetas (Barcelona) la del ingeniero Eustaquio Ugalde en 1953. A esa d¨¦cada pertenece la primera vivienda que Coderch y Manuel Valls levantaron en Madrid. Corr¨ªa el a?o 1956 cuando el jurista Juan Vallet de Goytisolo les hizo el encargo. Dos a?os despu¨¦s se instalaba a vivir en un edificio de car¨¢cter mediterr¨¢neo cercano a la Avenida Arturo Soria. Ese es uno de los valores de esta vivienda: m¨¢s compacta y vertical que su coet¨¢nea Casa Catas¨²s, representa la adaptaci¨®n de la tradici¨®n mediterr¨¢nea al clima continental y al urbanismo madrile?o.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.