Aquella distorsi¨®n hist¨®rica contra la moda del ¡®brit-pop¡¯
El grupo brit¨¢nico Placebo celebra con ¨¦xito 20 a?os de carrera con una gran gira
Huele a carne a la brasa mientras Brian Molko (Bruselas, B¨¦lgica, 1972), sentado en un taburete, se enciende un cigarrillo con un movimiento certero y desliza una t¨ªmida sonrisa. Sus ojos marinos, maquillados con una sugerente raya negra, adquieren un tono gris en la penumbra del backstage del Mallorca Live Festival, donde un cocinero prepara hamburguesas y vuelan las cervezas para los m¨²sicos y el personal de asistencia. Faltan apenas 45 minutos para que Placebo salte al escenario principal y, aunque suenan a todo trapo las canciones de La Mala Rodr¨ªguez, se oye bien al cantante y guitarrista de esta banda que celebra sus 20 a?os de existencia con una gira mundial que ha pasado por Madrid, Barcelona, Granada y Mallorca. Durante la entrevista, sus palabras son concisas, como sus gestos y los riffs incendiarios de Placebo.
¡°Nos sentimos en una posici¨®n muy privilegiada. Hay otras bandas con la misma historia que nosotros que nunca m¨¢s han vuelto a girar. Estamos muy agradecidos¡±, afirma Molko despu¨¦s de dar la primera calada al cigarro y reconocer que nunca pensaron en celebrar este aniversario si no fuera porque ¨¦l y Stefan Olsdal, bajista del grupo, fueron convencidos por la compa?¨ªa y su manager. ¡°Stefan y yo pensamos siempre en el futuro y esto de volver a mirar atr¨¢s no nos convenc¨ªa del todo, pero ahora vemos que ha sido un acierto¡±, apunta. Ambos son la columna vertebral de Placebo y los ¨²nicos integrantes originales que formaron el grupo en Londres cuando los dos se conocieron en una estaci¨®n de tren y charlaron de sus ¨ªdolos musicales. ¡°Recuerdo que no ten¨ªamos nada de experiencia y que ¨¦ramos un poco arrogantes, aunque no ten¨ªamos ninguna expectativa de ¨¦xito. Y, sin embargo, nos lleg¨® muy r¨¢pido. Tan r¨¢pido como han pasado los ¨²ltimos 20 a?os¡±, rememora. ¡°Siempre quisimos tener ideas, hacer ¨¢lbumes y seguir adelante. No tenemos ninguna intenci¨®n de parar¡±, a?ade.
Titularon su primer disco como el nombre de la banda. Era 1996 y Placebo pronto se convirti¨® en un referente para la escena indie brit¨¢nica. Con su ritmo acelerado, sus guitarras distorsionadas, sus letras desoladoras con referencias a las drogas y su potente est¨¦tica andr¨®gina, el grupo represent¨® una v¨ªa alternativa en pleno orgullo del brit-pop. Eran los chicos avant garde que daban la espalda a la lucha de gallos de Blur y Oasis. ¡°Ten¨ªamos una personalidad muy fuerte cuando aparecimos en Reino Unido. Nuestra intenci¨®n era atraer a todas las personas que no se sent¨ªan atra¨ªdos por el brit-pop¡±, recuerda Molko, que sabe que algunos les incluyeron en esa escena en una reduccionista forma de etiquetar. ¡°?ramos lo contrario al brit-pop. Yo no era nada fan. Encontraba en esa m¨²sica una preponderancia del macho brit¨¢nico y mucho nacionalismo. Adem¨¢s era muy homog¨¦neo sonoramente. No me interesaba nada¡±.
Aunque sus ¨¢lbumes hablaban por s¨ª solos, con esa tensi¨®n instrumental nada deudora del patrimonio del pop cl¨¢sico brit¨¢nico, se concienciaron a base de experimentaci¨®n de salir de cualquier etiqueta estil¨ªstica. ¡°?ramos una banda de rock¡¯n¡¯roll. Simplemente¡±, se?ala. ¡°Nuestras mayores influencias ven¨ªan de la new wave. Especialmente nos atra¨ªan Sonic Youth y sus guitarras experimentales. Fueron nuestra mayor influencia. Era el rock de los ¨²ltimos ochenta, con esa actitud cruda ante los rom¨¢nticos. Tambi¨¦n gente como Depeche Mode, The Cure o el primer trabajo de los Pixies. Ellos s¨ª eran verdaderos iconoclastas, mucho m¨¢s que la sobrevalorada escena del brit-pop¡±.
Para ello, contaron con un padrino de lujo: David Bowie, el mayor iconoclasta, el camale¨®n por excelencia, quien qued¨® prendado de ellos a trav¨¦s de unas demos y les invit¨® a ser sus teloneros. ¡°Fuimos muy afortunados de tenerle como mentor. Fue ¨²nico poder disfrutar de su sabidur¨ªa. Era extremadamente generoso¡±, cuenta Molko, que no olvida que les invit¨® a su concierto de 50 a?os de carrera en el Madison Square Garden, donde compartieron escenario con Bowie, Lou Reed, Billy Corgan de The Smashing Pumpkins y Robert Smith de The Cure. ¡°Todos nuestros h¨¦roes¡±, sentencia. ?Conf¨ªas en que podr¨¢ haber m¨¢s h¨¦roes como Bowie? ¡°No tengo ni idea de si podr¨¢ salir alguien como ¨¦l en el futuro. Para ser sincero, no es algo en lo que piense mucho. Hay mucha gente haciendo m¨²sica actualmente, pero eso no quiere decir que sea mejor que la de antes, ni siquiera que sea buena¡±, dice entre risas.
Molko ya se ha fumado el cigarrillo y no muestra ning¨²n inter¨¦s por las hamburguesas reci¨¦n hechas. Le apremian para que vuelva a su camerino. Como ciudadano de Londres desde hace 27 a?os y sabiendo que en Mallorca le espera un p¨²blico formado por mucho turista brit¨¢nico, no quiere irse sin dejar una reflexi¨®n sobre el Brexit. ¡°Estoy furioso. Boris Johnson y Neil Farage son dos hijos de puta que me han robado mi ciudadan¨ªa europea a trav¨¦s de la mentira. Es lo peor que nos ha pasado en los ¨²ltimos 50 a?os. Siempre fue una idea travestida, la disfrazaron de otra cosa. En mi mente, el Brexit es ilegal. Creo que va a tener un efecto hist¨®rico a nivel econ¨®mico pero tambi¨¦n cultural. Han fomentado y dado la llave a una generaci¨®n que apuesta por la xenofobia. Es un mal de nuestra ¨¦poca¡±.
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