La editorial en la que los lectores deciden qu¨¦ se publica

Que nadie lee es un mantra cargado de verdad: casi un cuarenta por ciento no abre ni un libro al a?o en Espa?a. Los escritores consagrados venden en torno a una d¨¦cima parte de lo que vend¨ªan hace 15 a?os (Rosa Montero dixit). ?Por qu¨¦ tendr¨ªa alguien inter¨¦s entonces en leer a in¨¦ditos? ?Y en editar a noveles? Jean-Laurent Poitevin dio hace una d¨¦cada respuesta a esa duda:?¡°Los lectores quieren saberse jefes de la editorial, decidir qu¨¦ va a acabar en una librer¨ªa¡±; y de su convencimiento hizo negocio: Nouveaux Auteurs publica entre 15 y 20 t¨ªtulos anuales en Francia seleccionados por su comunidad de 10.000 lectores. Y vende m¨¢s de 10.000 ejemplares de media de cada novela entre tapa dura, r¨²stica y bolsillo. "Todos me dijeron que estaba loco, me creen porque los n¨²meros no mienten". Ahora desembarca en Espa?a replicando el sistema con la editorial Nuevos Talentos, que para abrirse camino en el mercado en castellano ha lanzado un premio a la mejor primera novela dotado con 12.000 euros y auspiciado por el autor de Historias del Kronen, Jos¨¦ ?ngel Ma?as.

Nuevos Talentos funciona m¨¢s o menos as¨ª: Un escritor, normalmente uno de esos que tratando con editoriales tradicionales se ha dado contra un muro una y cien veces, cuelga un manuscrito en la plataforma en l¨ªnea (Poitevin asegura que hay millares inmerecidamente ocultos por el mundo). Si pasa un primer filtro que llevan a cabo un par de cr¨ªticos ¡ªque no emiten juicios sobre la calidad del texto, solo comprueban que sea legible y que responda a lo que el autor manifest¨® que era su obra¡ª, se somete durante dos meses a examen de la comunidad de lectores. Cualquiera puede registrarse y analizar una o varias novelas, para lo que tendr¨¢ que contestar a un cuestionario exhaustivo del que extraer¨¢ la nota de uno a diez con que valora el texto. Esa nota ser¨¢, al principio, secreta. Solo pasada la validaci¨®n sabr¨¢ el autor qu¨¦ opinaron sus lectores y podr¨¢ adem¨¢s mantener un canal abierto para charlar con ellos sobre las impresiones que les caus¨®, sobre qu¨¦ estiman mejorable o qu¨¦ detalle les entusiasm¨®. "?Cu¨¢ntas veces te habr¨ªa gustado poder influir para que el escritor cambie el final de un libro que hasta ese punto te hab¨ªa encantado?", inquiere Poitevin. En los menos de dos meses de vida de Nuevos Talentos ya tienen 220 usuarios participando, cifra que en Francia casi tard¨® un a?o en alcanzarse. Han recibido en el mismo periodo unos 250 manuscritos (200 candidatos al premio literario y 50 que no concurren). Entre ellos, el editor est¨¢ convencido de que se esconde un ¨¦xito. Al menos uno. "Ya he colocado a varios de mis autores entre los m¨¢s vendidos de Francia en una d¨¦cada, en diez a?os m¨¢s alguna de mis firmas estar¨¢ entre los m¨¢ximos superventas mundiales."

Jos¨¦ ?ngel Ma?as y las novelas plebiscitarias

"Los premios sol¨ªan servir para descubrir autores con potencial, talento en crudo. Yo soy fruto del ep¨ªtome de esos galardones, que era el Nadal. Luego se desvirtuaron, se convirtieron en otra cosa". Jos¨¦ ?ngel Ma?as est¨¢ convencido de que fue el p¨²blico quien impuso Historias del Kronen, quien le brind¨® un ¨¦xito que de haber dependido de la industria del libro como tal no habr¨ªa llegado. "Quiero devolver la oportunidad de que yo dispuse", confiesa. En Nuevos Talentos, dice, buscan historias "buenas y plebiscitarias". Priorizan que haya un consenso: si dos notas se?alan que un mismo libro es una maravilla, seg¨²n una, y porquer¨ªa seg¨²n otra, y ambas est¨¢n bien argumentadas, dif¨ªcilmente esa novela se llevar¨¢ a estampa. Que haya opiniones coincidentes es una garant¨ªa, un test poco falible ¡ªestiman¡ª de que esa novela funcionar¨ªa en el mercado. Con el manuscrito que se lleve los 12.000 euros del primer premio Jos¨¦ ?ngel Ma?as tienen la sensaci¨®n de que se juegan el todo por el todo: "Necesitamos que sea realmente bueno para que Nuevos Talentos arranque, es nuestra presentaci¨®n". La cuant¨ªa que otorgan creen que demuestra per se el inter¨¦s con que seguir¨¢n y tratar¨¢n de aupar las carreras de los noveles que publiquen con ellos.

En Francia, Agnes Ledig comenz¨® con ellos y cuando vend¨ªa m¨¢s de 300.000 ejemplares de cada t¨ªtulo que sacaba se termin¨® marchando a una grande. Igual ocurri¨® con Valentin Musso, hermano de Guillaume (que vendi¨® 1.833.300 ejemplares en 2016). Cuando pareci¨® que la carrera de Valentin podr¨ªa correr la misma fortuna que la de su hermano otra editorial le ofreci¨® un adelanto de 100.000 euros y dej¨® Nouveaux Auteurs. "En Espa?a ocurrir¨¢ parecido pero, adem¨¢s de formar cantera, estaremos ah¨ª para pelear", profiere seguro?Poitevin.