Los m¨²sicos espa?oles se rebelan y piden otra SGAE
Kiko Veneno, Leiva, Fito, Quique Gonz¨¢lez, Vetusta Morla, Iv¨¢n Ferreiro, Coque Malla, Izal, Tote King, Vega¡ Decenas de artistas denuncian en EL PA?S la corrupci¨®n de ¡®la rueda¡¯ que dinamita el sector
Los m¨²sicos espa?oles gritan basta a los actuales gestores de la Sociedad General de Autores y Editores (SGAE). La gota que ha colmado el vaso ha sido la operaci¨®n policial contra el presunto fraude de la rueda, una trama por la que varios miembros de la sociedad -algunos de ellos pertenecientes a la junta directiva- aliados con las cadenas de televisi¨®n ingresan millones de euros por los derechos de autor de canciones con falsos arreglos emitidos en programas nocturnos. Decenas de artistas consultados por este peri¨®dico rompen su silencio y piden una refundaci¨®n de la SGAE, con la intervenci¨®n, si fuera necesaria, del Ministerio de Cultura, que tutela la sociedad. De lo contrario, se plantean crear otra entidad que les ampare.
Es todo un desaf¨ªo de los m¨²sicos, que constituyen el 82,3% de los 120.842 socios de la SGAE y generan al menos un 70% de sus ingresos. ¡°Est¨¢ totalmente corrompida por la rueda. Hay problemas muy grandes de legitimidad, representaci¨®n y credibilidad. O la SGAE se refunda, o habr¨¢ que crear una nueva¡±, se?ala Kiko Veneno. ¡°Somos marcianos para ellos. No pintamos nada all¨ª¡±, a?ade Fito Cabrales, de Fito & Los Fitipaldis.
La rueda ha incendiado la m¨²sica espa?ola. La palabra que m¨¢s repiten todos para referirse a la junta directiva, presidida por Jos¨¦ Miguel Fern¨¢ndez Sastr¨®n, es la de ¡°mafia¡±. Pero hay m¨¢s calificaciones en el intenso fuego de rabia de los compositores, que han sido apartados de las parrillas televisivas al no participar en el m¨¦todo de la trama: ceder los derechos de canciones nunca antes editadas o tocar otras de dominio p¨²blico alteradas irregularmente con el ¨²nico fin de recaudar cifras millonarias para los cabecillas. De hecho, esta m¨²sica, que no tiene p¨²blico real ni forma parte de la banda sonora social, genera mucho m¨¢s dinero que la de los autores que llenan salas de conciertos y festivales y cuyas recaudaciones han descendido ¡°una barbaridad¡±, seg¨²n Iv¨¢n Ferreiro. ¡°Hay que dejar muy claro a la sociedad que las primeras v¨ªctimas somos nosotros. Esta corrupci¨®n nos perjudica directamente¡±, dice Carlos Tarque de M-Clan.
Seg¨²n el auto del juez Ismael Moreno, la trama gener¨® un fraude de m¨¢s de 100 millones de euros entre 2006 y 2011. Esto en un contexto en el que los ingresos de la sociedad no han parado de bajar desde 2012, situando la recaudaci¨®n en 239 millones en 2016. La situaci¨®n afecta a¨²n m¨¢s a los autores de la clase media y baja del negocio, que pelean cada mes por vivir de sus canciones. ¡°Es indignante este mamoneo¡±, afirma el rapero Tote King. ¡°Es terrible¡±, indica Coque Malla. ¡°Es un corralito. La SGAE ha perdido su esp¨ªritu¡±, sostiene Mikel Izal. ¡°Nuestra situaci¨®n es denigrante¡±, arguye Jairo Zavala, conocido como Depedro.
Una lista que representa un gremio
Adri¨¢n Costa
Burning
C¨¦sar Pop
Coque Malla
Depedro
El Drogas
Fernando Pardo
Fito Cabrales
Iv¨¢n Ferreiro
Izal
Kiko Veneno
Leiva
Le¨®n Benavente
Lichis
M-Clan
Miss Caffeina
Nacho Vegas
Ni?os Mutantes
Novedades Carminha
Quique Gonz¨¢lez
Rayden
Sabino M¨¦ndez
Soledad V¨¦lez
Tote King
Vega
Vetusta Morla
Zahara
Con canciones inaudibles en residuales programas de tarot emitidos de madrugada o la existencia de autores irreales entre familiares y testaferros, la perversi¨®n del sistema es total. Como se?ala Leiva, no es una cuesti¨®n simplemente econ¨®mica, es un ¡°da?o moral¡±. ¡°Es una trampa muy fea que falta al respeto a la canci¨®n, que es algo sagrado. Es cutre. Un tipo, que no se dedica a la m¨²sica, registrando miles de temas en un a?o y recaudando m¨¢s que Mick Jagger. Es asqueroso¡±, comenta. Quique Gonz¨¢lez recuerda que esto no pasa en ning¨²n otro pa¨ªs: ¡°Los guiris deben alucinar. Canciones basura para los minutos de la basura haciendo millonarios. Me dan ganas de vomitar¡±. Para Lichis, al que le ofrecieron entrar en la rueda y se neg¨®, es ¡°m¨²sica de desecho¡±. En palabras de Alberto Jim¨¦nez de Miss Caffeina: ¡°No hacen canciones. Hacen tomates, pero tomates que no existen ni est¨¢n en el imaginario de la gente¡±. ¡°Este entramado aniquila la cultura¡±, afirma Zahara. Un veterano como El Drogas, fundador de Barricada, dice que ¡°est¨¢ muy quemado¡±. ¡°Me siento muy culpable de haber animado a los grupos que empezaban a participar en la SGAE¡±, a?ade.
Es una indignaci¨®n sin apenas precedentes. Habr¨ªa que remontarse a 1977 cuando sucedi¨® otra rueda, la de los tupamaros, en la que m¨²sicos militares alteraban las hojas de declaraci¨®n de los repertorios que tocaban orquestas de baile y verbena registrando canciones que no exist¨ªan en ning¨²n lado, tal y como recuerda Johnny Cifuentes, l¨ªder de Burning, socio de la entidad desde principios de los setenta: ¡°Estoy muy cabreado. Volvemos a tener la misma cara de gilipollas con los mafiosos¡±. La rueda de los tupamaros llev¨® ese a?o a la destituci¨®n de la secci¨®n musical de la SGAE, la convocatoria urgente de elecciones y la aprobaci¨®n de nuevos estatutos. Ahora los m¨²sicos espa?oles han decidido salir de su letargo ¨Cmuchos comentaban con impotencia esta trama en privado- y mostrar p¨²blicamente su rechazo frontal al Gobierno de la entidad. De los m¨¢s de 25 artistas consultados por este diario, todos se?alan con el dedo a los actuales gestores.
Los m¨²sicos siempre han sido un gremio muy desorganizado y entonan el mea culpa, pero ahora est¨¢n decididos a cambiar el escenario. Sin embargo, saben que tienen casi imposible cualquier maniobra por culpa del voto ponderado, que permite que cuanto m¨¢s dinero recaude un autor, m¨¢s votos acumula. ¡°Una cosa totalmente absurda que fomenta el entramado¡±, dice Abraham Boba de Le¨®n Benavente. Los socios m¨²sicos implicados en la rueda condicionan las decisiones y los gobiernos de la entidad gracias a sus recaudaciones millonarias y su tr¨¢fico de influencias. En palabras del rapero Rayden, est¨¢n ¡°desprotegidos¡±. Vega hace una comparaci¨®n: ¡°La SGAE es como un banco que ha defraudado a sus clientes pero con el agravante que son sus compa?eros¡±. ¡°Con el voto ponderado, la c¨²pula est¨¢ blindada y hace a su antojo¡±, explica Nacho Vegas, que pide ¡°una reforma integral o una nueva sociedad¡±. ¡°La SGAE deber¨ªa romperse y hacerse de nuevo¡±, se?ala Guille Galv¨¢n de Vetusta Morla. Su compa?ero Juanma Latorre a?ade: ¡°Si la SGAE no tiene capacidad de sacar a los autores de la rueda ni capacidad de regeneraci¨®n interna, habr¨¢ que atacarla desde fuera¡±. Muchos apuntan al Ministerio de Cultura como ¨®rgano de socorro, tal y como tambi¨¦n se?ala Fernando Pardo, de Corizonas y Sex Museum, socio en la entidad desde los ochenta: ¡°El Ministerio de Cultura deber¨ªa intervenir absolutamente. No se puede permitir m¨¢s esta corrupci¨®n¡±. Algo que tambi¨¦n apoya Sabino M¨¦ndez, autor y exportavoz de la Junta de la SGAE entre 2011 y 2012. ¡°Probablemente, un arbitraje externo acompa?ado de las medidas correspondientes de reglamentaci¨®n legislativa pudiera ser la soluci¨®n, pero se necesita voluntad pol¨ªtica¡±.
Tradicionalmente las disputas de poder en la SGAE son como un cap¨ªtulo de Juego de Tronos, pero bajo el desesperante mantra burocr¨¢tico de la instituci¨®n. Ya en 2013 Ant¨®n Reixa fue cesado como presidente al intentar hacer frente a la rueda. Fuentes internas de la sociedad afirman que actualmente una batalla campal se libra en el interior del Palacio de Longoria, sede principal de la SGAE, con los cabecillas de esta trama pensando en deshacerse del presidente Sastr¨®n, auspiciado por ellos y al que ahora ya no ven como un aliado. Pero nadie en la Junta ni el Consejo de Direcci¨®n esperaba el levantamiento del mayor de los ej¨¦rcitos: los m¨²sicos, cuyo Colegio, el de Peque?o Derecho, es el que m¨¢s peso tiene en la sociedad con 16 representantes frente a los seis del Gran Derecho (los dramaturgos), los nueve de Audiovisual y los ocho de los Editores Musicales.
¡°Nos tenemos que unir. Creo que un sindicato que incluya a m¨²sicos y autores, y por qu¨¦ no, a t¨¦cnicos y todo tipo de trabajadores del espect¨¢culo musical, ser¨ªa muy necesario¡±, sostiene Veneno. En la misma l¨ªnea opina Carlangas de Novedades Carminha: ¡°Me gustar¨ªa poder elegir. Solo hay una opci¨®n y est¨¢ dirigida por golfos que nos dan migas. Ser¨ªa muy sano contar con otra entidad¡±. Como explica Adri¨¢n Costa de The Criers y Los Reyes del K.O. tras vivir en Estados Unidos y Alemania: ¡°En el resto de pa¨ªses hay m¨¢s de una sociedad de gesti¨®n y est¨¢n reguladas por el mercado que somos los m¨²sicos. Si pasase un esc¨¢ndalo as¨ª, se ir¨ªan a la competencia¡±. Si los m¨²sicos se fueran en masa de la SGAE, ser¨ªa virtualmente el final de la sociedad. ¡°A diferencia de ellos, nosotros no tenemos nada que esconder¡±, apunta Ferreiro. ¡°Si nada se puede hacer, habr¨¢ que poner un pepino dentro, y tras reventarla, empezar de cero¡±, concluye El Drogas.
La rebeli¨®n de los m¨²sicos no ha hecho m¨¢s que comenzar.
Asociaciones y sindicatos de autores buscan alternativas
"Antes la SGAE era como una casa que nos representaba y ayudaba, pero ahora funciona como una mafia. Es una gran maldad y juegan con la ventaja de que los m¨²sicos hemos ido a nuestra bola". Esta reflexi¨®n de Fito Cabrales es compartida por todos los protagonistas de este reportaje, pero las cosas est¨¢n cambiando. Seg¨²n ha sabido EL PA?S, la Coalici¨®n Autoral, la asociaci¨®n creada para proteger a los autores ante la falta de transparencia de la SGAE, se va a personar esta semana en la Audiencia Nacional como afectada por el caso de la rueda. En su denuncia invitar¨¢n a asociaciones y autores a sumarse a la causa.
Tambi¨¦n la Uni¨®n Estatal de Sindicatos de M¨²sicos, Int¨¦rpretes y Compositoras, de reciente creaci¨®n, empezar¨¢ a buscar afiliados despu¨¦s del verano. "Plantearemos un debate con dos opciones: crear una candidatura que sea una alternativa a los actuales gestores o montar una entidad propia. Esta segunda opci¨®n no es descabellada tras los casos de AISGE, la sociedad que surgi¨® para gestionar los derechos de los actores, dobladores, bailarines y directores de escena, y DAMA, que gestiona los derechos de obras audiovisuales y cinematogr¨¢ficas", explica David Garc¨ªa Aristegui, uno de los fundadores de la Uni¨®n Estatal.
La SGAE siempre ha intentado sistem¨¢ticamente frenar cualquier intento de ruptura de su monopolio, pero no lo consigui¨® con AISGE y DAMA. Tampoco con EKKI, una federaci¨®n nacida en 2015 con cinco asociaciones que representan a m¨²sicos, escritores, editores literarios y creadores visuales del Pa¨ªs Vasco. EKKI logr¨® la autorizaci¨®n del Gobierno vasco. AISGE y DAMA la consiguieron del Ministerio de Cultura, como tendr¨ªa que suceder en el supuesto de que surgiese una nueva entidad de gesti¨®n para los m¨²sicos espa?oles.
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