La f¨¢bula de Guillermo del Toro emociona Venecia
El mexicano recibe aplausos convencidos por ¡®La forma del agua¡¯ Paul Schrader muestra el camino de un cura hacia el extremismo en ¡®First Reformed¡¯

Cuando Guillermo del Toro cree firmemente en un proyecto, lanza un ¨®rdago. Sin red o certezas. Ni mucho menos financiaci¨®n. Con la ¨²nica garant¨ªa de su fe ciega en la historia. ?l mismo paga, de su bolsillo, todo el trabajo. Pone a escultores a crear estatuas de las criaturas que ha imaginado, y a dibujantes a dise?ar ese universo. Desarrolla ampliamente el guion. Y solo entonces acude al final a un estudio, con su oferta ya avanzada: un paquete de viaje todo incluido a sus fantas¨ªas. Lo hizo para El laberinto del fauno, y lo ha repetido ahora con La forma del agua. En ambos casos, la productora dijo s¨ª. A todo. Bueno, casi. Fox compr¨® la historia de amor entre un monstruo y una conserje. Acept¨® que la protagonista fuera muda o se masturbara. Asumi¨® la atm¨®sfera tierna y sombr¨ªa, en plena Guerra Fr¨ªa. ¡°Pero se negaron a que fuera en blanco y negro¡±, sonr¨ªe el cineasta mexicano. As¨ª que el nuevo cuento de hadas de Del Toro se ha visto con todos sus oscuros colores, hoy en Venecia, en la competici¨®n oficial. Y recibi¨® una acogida a la altura de las grandes expectativas.
¡°Es su mejor pel¨ªcula desde El laberinto del fauno¡±, sostiene el director de La Mostra, Alberto Barbera. El propio Del Toro se mostraba de acuerdo, en un encuentro con un grupo de periodistas. La comparaci¨®n con su obra m¨¢s conocida, ganadora de tres oscars, resulta exagerada, pero La forma del agua sabe seducir. Luce belleza, poes¨ªa e intenta juntar Bella y Bestia sin ¡°puritanismo¡± ni ¡°perversiones¡±. Para su creador es ¡°la f¨¢bula extra?a de un monstruo¡±, adem¨¢s de una oda al cine y, sobre todo, al amor: "Si los Beatles y Jes¨²s est¨¢n de acuerdo en algo, no pueden estar equivocados". Para una sinopsis, se dir¨ªa que narra la relaci¨®n entre dos marginados: una criatura subacu¨¢tica, atrapada por los servicios secretos de EE UU, y la mujer que limpia los pasillos de esa instalaci¨®n. ¡°?l me ve y no le doy pena por ser incompleta¡±, asegura ella en el filme. Y para la cr¨ªtica internacional es una candidata a la venidera temporada de premios.
¡°La magia no existe. Ni para ti, ni para m¨ª, ni para nadie¡±, le dec¨ªa su madre a la peque?a protagonista de El laberinto del fauno. Sin embargo, el director mexicano sigue empe?ado en lo contrario. Incontables criaturas y extra?ezas parece habitar su mente. De vez en cuando, alguna encuentra el camino de salida hasta la pantalla. Y nacen El espinazo del diablo, La cumbre escarlata o Hellboy. ¡°Siempre he cre¨ªdo que la fantas¨ªa es un g¨¦nero muy pol¨ªtico¡±, defiende el cineasta en la presentaci¨®n de La forma del agua. Y subray¨® el poder de las f¨¢bulas: ¡°Muchos de nosotros tenemos ideas fijadas y el cuento de hadas es un ant¨ªdoto, una forma de llegar a las emociones. Quer¨ªa que la pel¨ªcula fuera precisamente emociones e im¨¢genes, m¨¢s que palabras¡±.
Aunque, a continuaci¨®n, tuvo que emplear unas cuantas para analizar la relaci¨®n de La forma del agua con los Estados Unidos de hoy en d¨ªa. ¡°Es una pel¨ªcula de 1962, pero de hoy. Cuando se habla de ¡®hacer Am¨¦rica grande de nuevo¡¯ [el lema de Donald Trump] es como regresar a esa ¨¦poca. Racismo, clasismo... Nos enfrentamos a muchos de los problemas que exist¨ªan cuando asesinaron a Kennedy¡±, a?adi¨®. Del Toro, adem¨¢s, lo nota cada d¨ªa en su piel: ¡°Soy mexicano y s¨¦ lo que es ser visto como el otro¡±. El cineasta no se siente parte de Hollywood: emplea sus millones -20 en este caso-, pero se mantiene al margen, como sus criaturas. A esta, por cierto, optaron por dejarla sin nombre: ¡°As¨ª puede ser algo diferente para cada uno¡±.
Vor¨¢gine doble
A Paul Schrader tambi¨¦n le han dicho que ha tra¨ªdo a La Mostra su mejor filme en mucho tiempo. Superar fracasos recientes como su The Canyons, su pel¨ªcula con Lindsay Lohan, o Como perros salvajes no supon¨ªa tampoco una haza?a. Pero First Reformed, el drama g¨¦lido que el cineasta mostr¨® en la competici¨®n por el Le¨®n de Oro, muestra destellos evidentes de su talento. Hablamos, al fin y al cabo, del guionista de Taxi Driver y de Toro salvaje, director de American Gigolo.

¡°El coraje es la soluci¨®n a la desesperaci¨®n¡±, tercia el hundido protagonista. Y Schrader se ha arriesgado a hacer suyas estas palabras. Propone, as¨ª, la historia de un pastor de almas que no sabe cuidar ni de la suya. Un capell¨¢n desolador, atrapado en una vor¨¢gine que solo lleva al extremismo, interpretado por un gran Ethan Hawke. La trama mezcla muerte, venganza, alcoholismo y depresi¨®n con el medioambiente y el terrorismo. Y Schrader la rueda con frialdad absoluta: los largos planos fijos, con la pantalla reducida casi a un cuadrado, duran siempre un poco m¨¢s de la cuenta. Como para decir que los problemas, aunque los personajes se marchen, siguen all¨ª. No hay m¨²sica, ni apenas efectos. Solo la realidad, sin maquillaje, de un hombre de dios que lo pierde todo: su hijo, su fe, sus afectos, sus convicciones. ¡°Quiero que sea una experiencia diferente. Si alguien no est¨¢ acostumbrado a las pel¨ªculas lentas, espero que se largue en los primeros tres minutos. Si te quedas, te comprometes¡±, asegur¨® el creador.
Y una espiral salvaje atrapa tambi¨¦n a los protagonistas de El insulto, tercer filme en competici¨®n del d¨ªa. Todo empieza con una disputa cualquiera, entre un vecino y un jefe de obra. Pero una m¨ªnima chispa, en un territorio tan incendiado como L¨ªbano, puede prender fuego al pa¨ªs entero. M¨¢s si la pelea enfrenta a un cristiano y un palestino. De una palabrota al racismo y las odas al genocidio el paso puede ser inmediato. Del barrio, se llega hasta el presidente del pa¨ªs. Ziad Doueiri lo rueda todo con ritmo y tensi¨®n, aunque el cine de Oriente Medio ya haya contado muchas veces esta trama. Deja, aun as¨ª, frases como: ¡°Est¨¢is listos para quebrarlo todo pero no para pasar p¨¢gina¡±. Un buen resumen del ¨²ltimo medio siglo.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
Sobre la firma
