Apacible animaci¨®n para ni?os
Un sentido del humor con el que los mayores pueden sentirse en territorio ajeno
Acostumbrados al molde hiperactivo, de ritmo sin freno y con estruendosa acumulaci¨®n de gags y recursos visuales y sonoros de la mayor¨ªa del cine animado que nos llega casi cada semana, el aterrizaje apacible y esquivo de la producci¨®n francesa Amarillito, protagonizada por un p¨¢jaro hu¨¦rfano de viaje migratorio, tiene, como m¨ªnimo, el sabor de la valiente novedad que huye de un tiempo despavorido. La dirige el debutante en el largometraje Christian De Vita, hasta ahora ayudante de Wes Anderson con los storyboards de Fant¨¢stico Mr. Fox y Gran Hotel Budapest, y de Tim Burton con el de Frankenweenie.
Amarillito
Direcci¨®n: Christian De Vita.
G¨¦nero: animaci¨®n infantil.
Francia, 2014.
Duraci¨®n: 90 minutos.
Con fondo ecol¨®gico y esp¨ªritu did¨¢ctico, la pel¨ªcula de De Vita se circunscribe, eso s¨ª, en el c¨ªrculo exclusivo de los m¨¢s peque?os, con un sentido del humor entre la ingenuidad y el c¨¢lido humanismo con el que los mayores pueden sentirse en territorio ajeno. Arquetipo de road movie con todas sus constantes f¨ªsicas y mentales ¨Dtrayecto tangible, trayecto moral¨D, Amarillito, de originales dise?os de personajes pero de fondos no demasiado atractivos, se configura de este modo como ese posible primer acercamiento del ni?o a un espejo de posible identificaci¨®n, valorando en su interior las dudas del protagonista respecto de su capacidad personal para resolver problemas y retos.
Aunque lo que quiz¨¢ sorprenda m¨¢s viendo la pel¨ªcula, y recuperando al mismo tiempo tanto PJ Masks, la discreta serie animada de De Vita que est¨¢ emitiendo el Canal Disney Junior, como Moonrise Kingdom: Animated Book Short, cortometraje nacido al amparo de la pel¨ªcula de Wes Anderson, es que sus trabajos se parecen entre ellos como un huevo a una casta?a. Lo que invita a pensar en el director franc¨¦s como un profesional del arte de la animaci¨®n al servicio de cada producto m¨¢s que como un autor de inspirado universo propio.
Babelia
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