¡°Re¨ªrse mucho, lujuria intensa¡±

"Re¨ªrse mucho, lujuria intensa; poca carne en los muslos, valent¨ªa; afici¨®n por la m¨²sica y la conversaci¨®n, deseosa de hacer el amor; pene largo y grueso, mal car¨¢cter; nalgas altas, vagina ancha..." M¨¦dicos, astr¨®logos, echadores de cartas, alquimistas... los expertos otomanos del siglo XVI consideraron que estas premisas eran la ciencia de la fisonom¨ªa aplicada a las mujeres y los hombres. Y las plasmaron en un iluminado c¨®dice titulado El libro de la felicidad, un regalo que el sult¨¢n Mourad III quiso hacer a su hija favorita F¨¢tima para que encontrara en ¨¦l los caminos hacia la plenitud. Un incunable completado con tablas de interpretaci¨®n de sue?os, lecturas zodiacales, leyendas y cuentos o profesiones asociadas a planetas en un sin fin de colores y oro plasmado en miniaturas.

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C¨®dices que se pueden tocar

El complicado arte de clonar c¨®dices

Son mensajes del pasado que se pueden consultar y tocar ahora con la vibrante calidad del clon de este hist¨®rico manuscrito editado por Manuel Moleiro en la exposici¨®n El arte de la perfecci¨®n. 25 a?os de ediciones primeras, ¨²nicas e irrepetibles, que hasta el pr¨®ximo 29 de octubre acoge el Real Alc¨¢zar de Sevilla. En ella se muestran las 40 obras, entre manuscritos, atlas, libros de horas y otros documentos que el editor ha coordinado durante un cuarto de siglo en un delicado proceso de copia de estos tesoros bibliogr¨¢ficos resguardados siempre tras vitrinas en espacios como la Biblioth¨¨que Nationale de Francia, la British Library de Londres, o el Metropolitan Museum of Art de Nueva York.

"Esta labor es importante para conservar el patrimonio, al clonarse no desaparecer¨¢n nunca. Y adem¨¢s acerca el conocimiento y permite su estudio. Se pueden consultar todas las hojas, no solo la par e impar que el comisario considere m¨¢s interesante para exponer", apunta Moleiro, que destaca con emoci¨®n el mensaje de tolerancia que refleja El libro de la felicidad. "Lo pag¨® un sult¨¢n califa de los sunitas, los del ISIS ahora. Ten¨ªan una apertura total en el sentido sexual, lo trataban con toda la naturalidad. Est¨¢n dibujadas adem¨¢s cinco iglesias y la estrella de David en miniatura. El entendimiento entre culturas y religiones era m¨¢s permeable que ahora mismo", apunta Moleiro de este sultanato, conocido como de las mujeres por la "enorme influencia" que asumieron tanto su madre como su esposa.

Su entidad realiza 987 ejemplares por cada una de las obras reproducidas que oscilan entre los 400 y los 25.000 euros. Procura que sean pr¨¢cticamente id¨¦nticas, que casi se confundan con la original, con encuadernaciones con pieles como las de cabra sin tratar con cromo, cueros que consigue en ?frica o Asia; o pergaminos estucados con tintas secadas por oxidaci¨®n y no por penetraci¨®n. "Solo as¨ª se consiguen colores fant¨¢sticos como los de la Edad Media. Es un trabajo delicado, caro, complejo y ¨²nico, que permite hacer un clon con la misma solvencia", considera el editor. Es tecnolog¨ªa punta para recrear las manos del pasado. Realizan fotograf¨ªas que como m¨ªnimo pesan 500 megas, y despu¨¦s utilizan t¨¦cnicas como offset, serigraf¨ªas o implantaciones de l¨¢minas de oro a presi¨®n o a mano. "Los revisamos las veces que haga falta. Todav¨ªa hay diferencias entre lo que recoge un ordenador y el ojo humano", apunta Moleiro, que deja en sus obras cualquier marca del pasado, ya sea el bocado de un gusano o una mancha.

"El libro lo pag¨® un sult¨¢n califa de los sunitas, los del ISIS ahora. Ten¨ªan una apertura total en el sentido sexual", dice Moleiro

Un equipo de profesionales trabaja adem¨¢s en la traducci¨®n, la documentaci¨®n y la restauraci¨®n de las obras, de las que tambi¨¦n se publica un libro de estudios, revela y acerca historias como las de El libro de la felicidad. Se puede leer as¨ª como en la ¨¦poca se interpretaba que si se so?aba con un cuervo de pico rojo significar¨ªa que aparece una persona lujuriosa y que desea divertirse; si es con un milano se vislumbra la guerra y la muerte; si es un estornino, viajes por tierra y mar; con una tortuga, que una mujer embellecer¨¢ o con una esclava se ve la bondad... Tambi¨¦n se lee que el juez, el predicador y el monje estaban vinculados a J¨²piter; el domador de leones, el cocinero, el vidriero o el portador de antorchas a Marte; el sastre y el boticario a Mercurio; o el blanqueador de lino, el pescador y el sembrador a la Luna, por ser actividades a cielo abierto.

Saberes del pasado que guiaban las vidas de sus contempor¨¢neos hasta la muerte. Como la del sult¨¢n. "Parece ser que falleci¨® de un ataque al coraz¨®n terminando una org¨ªa. Le asesoraron de que si ten¨ªa una revelaci¨®n fuese r¨¢pido a escribirla antes de que se le olvidara. Y al ir a buscar un papel, estando la sangre donde no deb¨ªa, le dio un infarto y muri¨® a los 49 a?os", apunta Moleiro, que igual trabaja estos libros de herencia musulmana, como que invierte seis a?os en La Biblia de San Luis, o clona el Breviario de Isabel la Cat¨®lica, cuyo original estuvo en el Real Alc¨¢zar de Sevilla.

Igual ha trabajado atlas como el Miller, de 1519, que Manuel I de Portugal regal¨® a Carlos V con la intenci¨®n de disuadirle para detener la expedici¨®n de Magallanes. Un planisferio que representaba al mundo como un gran mar rodeado de tierra le demostrar¨ªa que fracasar¨ªa al financiar el proyecto de expedicionario, una vuelta al mundo que ahora cumple 500 a?os gestada tambi¨¦n en el Alc¨¢zar de Sevilla. Donde ahora contempla el p¨²blico lo que en exclusiva ve¨ªa en el siglo XVI la hija de un sult¨¢n otomano.