¡°El ¡®streaming¡¯ ha sido la vacuna contra la pirater¨ªa y ha viralizado lo latino hasta Vietnam¡±

En su oficina en el ¨¢tico de un edificio art d¨¦co en South Beach, Jes¨²s L¨®pez (Ferrol, 1955), desgrana sentado en una butaca la actualidad de la m¨²sica latina. Es una ma?ana soleada de Miami previa a la semana de los Grammy Latinos. El CEO de Universal Music Latinoam¨¦rica & Pen¨ªnsula Ib¨¦rica empez¨® en el negocio en los ochenta durante la Movida madrile?a. Tres d¨¦cadas despu¨¦s es uno de los ejecutivos m¨¢s poderosos del sector. En su despacho lo acompa?an tres fotograf¨ªas de m¨²sicos: Morente, Camar¨®n, Paco de Luc¨ªa. Ni uno m¨¢s. En la sala contigua de reuniones atesora los premios a Despacito, el ¨¦xito masivo de Luis Fonsi. L¨®pez defiende el valor intr¨ªnseco de la m¨²sica y al mismo tiempo su deber de encontrar productos de entretenimiento rentables, virales. Un fen¨®meno, lo viral, que pese a su "connotaci¨®n infecciosa", dice, es para su negocio algo "absolutamente positivo". Se pregunta si la RAE recoge ya la acepci¨®n positiva. Pues no. En el diccionario lo viral sigue siendo solo lo relativo a los virus, y si uno busca viralidad solo encontrar¨¢. "Vialidad", "Virilidad", "Vitalidad". Veremos en la pr¨®xima edici¨®n de la Academia.

Pregunta. ?C¨®mo est¨¢ la m¨²sica latina?

Respuesta. La industria de la m¨²sica lleva dos a?os creciendo despu¨¦s de 15 de enorme bajada y el sector latino est¨¢ creciendo a¨²n m¨¢s. El streaming ha revolucionado el consumo de la m¨²sica y lo ha democratizado. Se evitan filtros. Antes para que una canci¨®n tuviese impacto internacional ten¨ªa que triunfar primero en Londres y Nueva York y ser impulsada por sus programadores de radio. Solo lo consegu¨ªan los temas en ingl¨¦s. Ahora si eres un chico que vive en Vietnam y te interesa la cultura latina solo tienes que buscar un playlist en Spotify y pinchar una tecla. Hasta ah¨ª se ha viralizado lo latino. Nuestra m¨²sica est¨¢ viajando y cruzando territorios m¨¢s r¨¢pido, y adem¨¢s la potencia de consumo de los latinos es grande, somos los que m¨¢s horas pasamos viendo v¨ªdeos. As¨ª ha venido un r¨¦cord hist¨®rico como el de Despacito, que ya se ha visto 4.300 millones de veces en Youtube.

La m¨²sica latina compite con la anglo tanto en calidad como en creatividad. Es bailable, divertida, novedosa

P. ?Qu¨¦ lecciones ha sacado de Despacito?

R. Hemos entendido mejor los m¨¦todos de marketing. Los que aplicamos a Despacito los hemos aplicado a Mi Gente y estamos teniendo un ¨¦xito parecido. Ya somos conscientes de que tenemos que hacer un marketing global, m¨¢s r¨¢pido y coordinado. No pensar en tener ¨¦xito en el mercado latino y luego buscar otros mercados. Ahora cuando sacamos un tema latino mis colegas de Inglaterra, Australia o Hong Kong est¨¢n mucho m¨¢s pendientes.

P. ?El streaming ha matado a la pirater¨ªa?

R. Ha sido la mejor vacuna contra la pirater¨ªa. En los dos mil llegamos a tener un 80% de pirater¨ªa. Hoy la gente consume la m¨²sica en su casa. Pincha y punto. Y se ha vuelto al concepto de consumir canciones sueltas y no ced¨¦s con bloques de 12 canciones.

P. ?La m¨²sica latina compite con la anglo?

R. S¨ª, tanto en creatividad como en calidad. Est¨¢ resultando muy atractiva. Por eso los artistas americanos quieren trabajar con nosotros. Igual que Bieber con Fonsi en Despacito ahora vas a ver una inundaci¨®n de duetos y featurings de hispanos con americanos. Y estamos apostando por las canciones en espa?ol. Es parte del atractivo, como esa frescura de ritmos que mezcla pop, reggae, electr¨®nica y dance con elementos aut¨®ctonos como el cuatro puertorrique?o o la tambora. Suena diferente. Es bailable, novedoso, divertido.

P. ?Cu¨¢l fue la clave de Despacito?

R. El que lo tenga claro, que me lo diga. Es la suma de muchas cosas, pero para m¨ª uno de los elementos determinantes fue la calidad del v¨ªdeo. Yo ahora machaco mucho a mis artistas para que hagan grandes v¨ªdeos. No me vale el v¨ªdeo de chica con beso. Hay que ser creativo. Tienes que querer seguir vi¨¦ndolo despu¨¦s de haberlo visto 15 veces.

P. ?Los sonidos no se est¨¢n homogeneizando?

R. No, cada vez hay m¨¢s diversidad y m¨¢s facilidad para que la gente componga. Pero s¨ª creo que hay un riesgo cada mayor en las letras. El nivel cultural medio ha bajado y se va perdiendo la capacidad de decir cosas de manera literaria. Eso me preocupa. No s¨¦ si es por cuesti¨®n de edad, pero veo demasiada groser¨ªa en algunas canciones.

P. Por ejemplo en el trap latino.

R. S¨ª.

P. ?C¨®mo afronta como ejecutivo la tensi¨®n entre buen gusto y tendencia?

R. Debemos medir entre lo que quiere el consumidor y nuestra labor cultural. Yo no har¨ªa todo trap, pero tampoco soy ning¨²n censor. Eso s¨ª, no pienso dejar de poner dinero en gente como Pablo L¨®pez, Antonio Orozco, Manuel Carrasco o Alejandro Sanz.

P. ?En EE UU ha cambiado la visi¨®n de lo latino?

Los latinos estamos empezando a tener m¨¢s orgullo de nuestra m¨²sica. Y tiene un componente pol¨ªtico

R. Est¨¢ cambiando. Y existe un componente pol¨ªtico. Cuando sacamos Despacito y vi el ¨¦xito que estaba teniendo pens¨¦ que ese era el primer golpe al muro. Los latinos estamos empezando a tener m¨¢s orgullo de nuestra m¨²sica, igual que de nuestros frijoles o de nuestra paella. Por primera vez veo chicos latinos que antes solo consum¨ªan m¨²sica anglo empezando a escuchar m¨²sica latina, o que no se hacen llamar Anthony sino Antonio.

P. ?Qu¨¦ viene ahora en el sector de la m¨²sica?

R. Mi preocupaci¨®n es saber c¨®mo va a ser el consumo. ?Realmente el streaming es el futuro al 100%? No lo s¨¦. Si es as¨ª me preocupa que lleguemos a estar en manos de dos o tres compa?¨ªas en el mundo. Apple, Spotify, Youtube. ?Qu¨¦ peligro, no? Es un peligro para el consumidor porque te podr¨¢n dirigir hacia donde ellos quieran.

P. ?Es una amenaza para su negocio?

R. Ahora mismo han sido la salvaci¨®n, pero no significa que lo sigan siendo a medio plazo. Ahora estamos en un momento de euforia de crecimiento, pero hay que pararse a analizar la situaci¨®n con detenimiento. Yo por eso he estado trabajando para que esta compa?¨ªa no sea solo productora de m¨²sica sino que trabaje toda la cadena del entretenimiento.

P. ?Cu¨¢nto dinero dan hoy los grandes ¨¦xitos?

R. Mucho menos. El Despacito de Luis Fonsi habr¨¢ dado m¨¢s o menos un 20% del Thriller de Michael Jackson. Desde finales de los noventa el negocio se deterior¨® mucho. Los dos mil fueron una aut¨¦ntica carnicer¨ªa por la pirater¨ªa y la falta de consumo de ced¨¦s. A la industria de la m¨²sica le ha costado 15 a?os empezar a reaccionar.

P. ?El reguet¨®n sigue siendo el rey?

R. No creo que estemos haciendo reguet¨®n ya. Estamos haciendo urbano, que es diferente. Mi Gente de J Balvin o Despacito no son reguetones.

P. ?Qu¨¦ es urbano?

R. Una mezcla de conceptos musicales. Es un nuevo pop. Y una nueva forma de comunicar. Hoy en d¨ªa no todo consiste en tener buena voz. Hay que comunicar.

P. ?Esto no va de cantar?

R. Para nada. Este negocio no va solo de cantar. Se busca entretener, divertir.

P. ?Los Grammy Latinos siguen siendo un evento importante?

R. Ver¨¢s. Se me conoce por no ser muy pol¨ªticamente correcto, y te dir¨¦ que siendo yo fundador de los Latin Grammy estoy muy triste con ellos porque desde hace a?os han ido perdiendo credibilidad. No se ve un criterio en los premios, y su efecto en la industria es cada vez m¨¢s irrelevante, a diferencia de una d¨¦cada atr¨¢s. Pero es una marca importante para la m¨²sica latina. Ojal¨¢ seamos capaces de reinventarla.