El d¨ªa de la marmota de la Nochebuena televisiva

La familia se re¨²ne alrededor de la mesa. De fondo, la televisi¨®n queda como otro acompa?ante m¨¢s, un runr¨²n continuo al que no se presta demasiada atenci¨®n pero que ah¨ª est¨¢. Quiz¨¢ por eso, porque las familias tienen otras cosas sobre las que hablar y discutir ¡ªy este a?o hab¨ªa temas de conversaci¨®n sobrados solo con repasar la actualidad¡ª, tampoco las cadenas prestan demasiada atenci¨®n a lo que ofrecen a los espectadores. El resultado es una programaci¨®n que vive en un bucle en el que se combina caspa, buenas dosis de verg¨¹enza ajena, refritos abundantes, bastante m¨²sica y cl¨¢sicos cinematogr¨¢ficos de hoy y de ayer. Una programaci¨®n especial que, en realidad, tiene poco de especial.

El mayor cl¨¢sico para la Nochebuena es La 1. Tras el institucional discurso del Rey, la primera cadena de TVE ha vuelto a apostar por Telepasi¨®n, donde las caras m¨¢s populares (y menos, que de todo hab¨ªa) de la cadena tienen que cantar y bailar este a?o con los musicales y La la land dando unidad al asunto. Altas dosis de verg¨¹enza ajena (y poca verg¨¹enza por parte de sus participantes, a los que no les queda otra y est¨¢ claro que saben re¨ªrse de ellos mismos, bien por ellos) para una oferta que sabe a rancio y antiguo. Lo mismo de siempre que, aunque en el pasado funcionaba, ya no interesa.

A continuaci¨®n, otro clasicazo navide?o, Raphael, que tiene m¨¦rito levantando todav¨ªa al personal al son de "qu¨¦ pasar¨¢, qu¨¦ misterio habr¨¢, puede ser mi gran noche" o el "ropopompon" del Tamborilero. Pero, una vez m¨¢s, poca novedad en la propuesta. Eso s¨ª, para la pr¨®xima vez ¡ªque seguro que la habr¨¢¡ª, por favor, podr¨ªan ahorrarse los interludios entre canci¨®n y canci¨®n que daban ganas de cambiar de canal. Y tras Raphael, Pablo Albor¨¢n con otro programa a modo de promoci¨®n de su ¨²ltimo disco y acompa?amiento de otros cantantes. Solo para fans de Albor¨¢n. La noche termin¨® con otro programa de refritos, esta vez con Viaje al centro de la tele y su gran karaoke, que invitada al personal a cantar temas altamente populares.

En La 2, otro cl¨¢sico reciente de la Navidad con un especial de Cachitos. No era un programa nuevo, sino repeticiones de la temporada reciente, pero aun as¨ª, fue una de las propuestas m¨¢s aplaudidas de la noche. Y apostamos a que en Nochevieja volver¨¢ a ocurrir lo mismo cuando la televisi¨®n se vuelva a llenar de galas enlatadas y programas de refritos. La nostalgia y el buen hacer de Cachitos recibir¨¢ los reconocimientos que se merece. Tras un recopilatorio con humoristas varios, otro enorme cl¨¢sico navide?o en La 2: Qu¨¦ bello es vivir.

Antena 3 no vari¨® su programaci¨®n respecto a la del a?o pasado: un recopilatorio de lo mejor del a?o televisivo seg¨²n ellos y una selecci¨®n de actuaciones de Tu cara me suena. Y ya est¨¢: barato, sin sufrimiento, sin esfuerzo, sin imaginaci¨®n.

Telecinco se sali¨® del guion habitual y en vez de las casposas galas a las que nos ten¨ªa acostumbrados, este a?o ha optado por dedicar la noche a Frozen programando un par de cortos, entre ellos el que ahora mismo est¨¢ en los algunos cines delante de Coco (en otros se ha eliminado) y que no ha recibido demasiadas alabanzas, para pasar a proyectar la pel¨ªcula, uno de los ¨²ltimos grandes ¨¦xitos de Disney. Todo parec¨ªa ir sobre ruedas por el canal hasta que alguien tuvo la feliz idea de, justo cuando la protagonista, Elsa, cantaba el tema m¨¢s popular de la pel¨ªcula, ese Su¨¦ltalo que ha sonado hasta la saciedad, meter anuncios. Porque total, qu¨¦ m¨¢s da cortar una canci¨®n de una pel¨ªcula. Y cortar ESA canci¨®n. Qu¨¦ m¨¢s da no respetar ni al espectador ni a tu propio contenido. O a esos ni?os que estaban viendo la pel¨ªcula y cantando su canci¨®n favorita y, de repente, se la cortan. Qu¨¦ m¨¢s da todo.

Tampoco se ha arriesgado demasiado en Cuatro y La Sexta. En el canal de Mediaset, el a?o pasado ya se apost¨® por un especial de First Dates y este a?o se ha repetido experiencia, con parejas que ya hab¨ªan pasado por el programa y a los que la cita les fue bien, regular o tirando a mal. Y en La Sexta, refrito de Pesadilla en la cocina con algunos de los momentos m¨¢s locos del programa para, despu¨¦s pasar a reponer emisiones antiguas del espacio de Chicote. Sin m¨¢s.

En definitiva, la televisi¨®n no ha puesto las cosas f¨¢ciles para huir de las conversaciones en la mesa entre langostino y langostino. Menos mal que en #0 tuvieron a bien poner Los gremlins. Eso s¨ª que es un cl¨¢sico navide?o y, por mucho que se repita, nunca cansar¨¢.