Caracas, la ¡®Comedia¡¯ de la pobreza
El poeta venezolano Igor Barreto reflexiona sobre la pobreza en 'El muro de Mandelshtam' a trav¨¦s de voces que hablan desde el infierno visitado por Dante
En 2014, la editorial Pretextos reuni¨® toda la poes¨ªa que Igor Barreto (San Fernando de Apure, Venezuela, 1952) hab¨ªa publicado hasta entonces. Un volumen de algo m¨¢s de 500 p¨¢ginas ocupado en buena parte por el canto gozoso y festivo a la abigarrada naturaleza tropical, en poemas llenos de gracia y humor, incluso humor negro, como cuando invita a los deudos de un hombre devorado por un caim¨¢n a llorar la muerte del cocodrilo, pues ¡°tanto la v¨ªctima?/ como el reptil?/ fueron ¡®uno¡¯?/ todo este tiempo¡±. Pero en las p¨¢ginas finales irrump¨ªa el lamento de un ¡°funcionario cuasi metaf¨ªsico¡±. Un empleado del Estado bolivariano cuyo ¡°salario se va por una zanja inmunda¡± y que jura ¡°no descender jam¨¢s del Annapurna¡±. ?Pero c¨®mo ha llegado un funcionario venezolano al Himalaya? ¡°Nada que hacer, nada que hacer?/ como no sea viajar con Google Earth¡±. Parec¨ªa como si Barreto estuviera diciendo: tengo suficiente talento como para seguir escribiendo poemas magn¨ªficos a los r¨ªos cuya ¡°agua todo lo ve pero nada recuerda¡±, a la fauna y flora del Llano natal. Pero el momento exige otra cosa. Como tantas veces en la historia moderna, el poeta es llamado no solo a asumir sino casi a encarnar un destino nacional. Primera pista acerca de por qu¨¦ el nuevo libro de Barreto lleva en su t¨ªtulo el nombre de Mandelshtam: el mayor poeta ruso del siglo XX, al que Stalin mand¨® a morir en un campo de trabajo en Siberia.
El muro de Mandelshtam tiene como escenario Ojo de Agua, un gueto caraque?o donde aparece, en un cementerio de autom¨®viles, ante los ojos del narrador, que padece ¡°graves dificultades econ¨®micas¡±, un hombre alto y entrecano que dice llamarse Osip Mandelshtam. Un poeta ruso en Caracas, ¡°la capital del rencor¡±. No importa si es un impostor: lee obsesivamente a Dante, como lo hizo el poeta ruso, y hasta reescribe algunos de los cantos de la Comedia, donde dice: ¡°Somos retazos de vida extrema?/ copia de nosotros mismos¡±. Pero tambi¨¦n hay varios epitafios de personajes muertos prematuramente que evocan la Antolog¨ªa de Spoon River, de Lee Masters: ¡°Kelver Cordero, 28 de julio de 1981-2 de febrero de 2005¡±; ¡°Rosa Michelangeli, 3 de octubre de 1975-2 de marzo de 2005)¡±. ?Qu¨¦ tienen en com¨²n estos personajes? La pobreza, y lo que ella genera: degradaci¨®n, violencia, asco. El muro de Mandelshtam es, ante todo, un correlato y una reflexi¨®n sobre la pobreza. Por eso uno de los ep¨ªgrafes es de la oda a la basura del poeta estadounidense A. R. Ammons; que es, a su vez, un eco de la carro?a que Baudelaire vio en una calle de Par¨ªs hacia mediados del siglo XIX. La famosa p¨¦rdida del aura que Las flores del mal puso por primera vez de manifiesto es hoy, para Barreto, la vida miserable; en particular, la de su ciudad.
Estas voces que hablan desde debajo de las tumbas, esas presencias ya incorp¨®reas que apelan al poeta y lo obligan a escuchar, son una derivada inesperada y actual del paseo de Dante por el infierno, varias veces evocado a lo largo de este libro. Son las voces de los que, en vida, apenas pudieron hablar; y ya muertos, en cambio, tienen urgencia en contar las m¨ªseras vicisitudes de sus vidas y la tr¨¢gica ligereza de sus muertes.
El muro de Mandelshtam se lee como en una enso?aci¨®n en la que, en un suburbio de Caracas, conversan todos los grandes poetas que hemos mencionado, y tambi¨¦n Arthur Rimbaud, de vuelta de ?frica con la rodilla gangrenada, en su ¨²ltimo aliento. No es un poema sobre la situaci¨®n en Venezuela: es una trama impresionante, en la que toda la poes¨ªa viene a hacerse o¨ªr all¨ª donde menos se la esperaba ¡ªy donde m¨¢s se hace necesaria¡ª: entre los desheredados de la historia. As¨ª son ¡®Los verdaderos pobres¡¯: ¡°¡?Las bellas cajeras del supermarket,?/ los alba?iles con sus overoles tiznados¡?/ los vendedores de imitaciones?/?¡ /?Todo termina la tarde del domingo?/ donde la rueca los vuelve a dejar sin nada?/ y el lunes?/ el autob¨²s m¨¢s econ¨®mico?/ los retorna a la ciudad¡±.
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Autor: Igor Barreto.
Editorial: Bartleby (2017).
Formato: tapa blanda (140 p¨¢ginas).
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