Las confidencias secretas de la viuda de Miguel Hern¨¢ndez

Suena el pedaleo de una m¨¢quina de coser, marca Singer. Es un ritmo suave y constante que ir¨¢ marcando la confesi¨®n m¨¢s sobrecogedora y valiente de una costurera. Entre puntada y puntada a los ¨²ltimos bordados de un vestido azul mar, Josefina Manresa, la viuda del poeta Miguel Hern¨¢ndez, rememora una vida de amor y llantos, de privaciones y de guerra - ¡°la guerra, la guerra, la guerra, no quiero nombrarla, me he cansado de tenerla en la boca¡±-. En un cuarto en penumbra, plagado de perchas, telas y retales, agujas y acericos, destaca un ba¨²l de donde ir¨¢n surgiendo los recuerdos, cartas y fotograf¨ªas. Se ha encari?ado Josefina con ese vestido, tan bonito y alegre como le est¨¢ quedando, y se le suelta la lengua y comparte ese ratito con esa clienta joven y desconocida que no se sabe porque ha acudido a ella. Los d¨ªas de la nieve, un bell¨ªsimo texto dram¨¢tico a modo de poema escrito por Alberto Conejero, pone voz, luz y poes¨ªa a Josefina Manresa, la mujer nacida en un pueblo de Ja¨¦n, a las puertas de la sierra de Cazorla, y unida a un poeta con el que, como ella misma lamenta, hubo m¨¢s cartas que s¨¢banas.

La obra, interpretada por Rosario Pardo y dirigida por Chema del Barco, nace del impulso de la Diputaci¨®n de Ja¨¦n, propietaria desde hace a?os del legado de Miguel Hern¨¢ndez (1910 / 1942), con motivo del 75 aniversario de la muerte del autor de Nanas de la cebolla o El rayo que no cesa. Siguiendo la estela del grupo teatral La barraca de Garc¨ªa Lorca, Los d¨ªas de la nieve se estren¨® el 28 de marzo de 2017, el mismo d¨ªa de la muerte del poeta en una c¨¢rcel de Alicante, en Quesada, el pueblo natal de Josefina Manresa (1916 / 1987) y, tras recorrer m¨¢s de 20 peque?as localidades de la provincia, llega al Teatro del Barrio, de Madrid, con las entradas pr¨¢cticamente agotadas. Autor, director y actriz, todos nacidos en localidades de Ja¨¦n, se rinden ante Josefina Manresa, esa mujer de manos grandes y siempre de luto que, ¨¢vida de letras, ped¨ªa cuentos de ni?a a su padre, guardia civil, y que a?os m¨¢s tarde no encuentra palabras para nombrar todo el dolor ante la muerte de su primer hijo, pero s¨ª el orgullo de compartir su vida con un poeta, aquel que siempre encabezaba sus hermosas cartas con las mismas tres mismas palabras: locura, amor y querer.

Alberto Conejero (1978), poeta y dramaturgo, reconoce la emboscada que le ten¨ªa preparada Josefina Manresa, al hacerle ver lo conservador que ¨¦l era con respecto a su figura. Sus ideas preconcebidas saltaron por los aires. Crey¨® buscar a la novia buena, la esposa sacrificada y la viuda doliente de un gran poeta y se encontr¨® con una persona compleja y de enorme resistencia, una mujer sacudida por un c¨²mulo de ausencias y muertes. Tras el fallecimiento de su primer hijo, a los diez meses de edad, Josefina Manresa sufri¨® duramente los golpes de la Guerra Civil, con el asesinato de su padre a manos de una patrulla milicianos y la muerte de su marido en la prisi¨®n franquista.

Esta funci¨®n, ubicado a principios de los ochenta, salda tambi¨¦n una deuda del propio Conejero para hablar de las mujeres en la posguerra, ¡°siempre tan silenciadas e ignoradas¡±. ¡°Se han hecho muchos relatos de la guerra y la posguerra desde el punto de vista masculino y a m¨ª me interesaba desafiar ese relato y poner la luz en Josefina. Este pa¨ªs se hubiera desintegrado en la posguerra si no hubiera sido por la resistencia de tantas mujeres viudas hu¨¦rfanas y represaliadas que no han tenido una voz en los peque?os y grandes relatos de esa ¨¦poca¡±, asegura el autor, que ha trabajado para Los d¨ªas de la nieve con cuatro fuentes: las memorias de la propia Josefina, el epistolario con Miguel Hern¨¢ndez, los poemas del autor y su propia imaginaci¨®n.