La m¨¢s combativa (y brillante) de las parejas de Marvel
Kelly Sue DeConnick y Matt Fraction son autores de una personal¨ªsima obra y propietarios de una visi¨®n muy particular del g¨¦nero
Kelly Sue DeConnick y Matt Fraction son autores de una personal¨ªsima obra que contribuye al fin del manique¨ªsmo superheroico, y no s¨®lo eso: ¨¦l se ha llevado un Eisner por su ¨²ltima creaci¨®n (Sex Criminals) y ella es la creadora la mitol¨®gico bizarra Bella Muerte (Pretty Deadly) y la gal¨¢ctico carcelaria feminista Bitch Planet. Estos d¨ªas andan de paso por el 36 Sal¨®n Internacional del C¨®mic de Barcelona.
Desde hace poco comparten habitaci¨®n, y ¨¦l se pone cascos para no tener que escuchar la m¨²sica cl¨¢sica que ella necesita para trabajar, y ella cree que la de los cascos deber¨ªa ser ella desde que ¨¦l se ha comprado un teclado que imita el sonido ¨C y hasta el aspecto ¨C de una vieja Underwood. ¡°Antes escrib¨ªamos por separado, pero nos mudamos y empezamos a compartir despacho. Nos sentamos incluso a la misma mesa¡±, dice ella. Ella es Kelly Sue DeConnick (Ohio, 1970), la responsable de la demoledora Bitch Planet, suerte de soap space opera, una distop¨ªa futurista en la que la Tierra est¨¢ gobernada por el Protectorado, un patriarcado cristiano capitalista (radical) en el que la vida de las mujeres deben aceptar el lugar que les ha tocado en la sociedad, el de florero (as¨ª lo designa el Consejo de Padres), y si no lo hacen, ser¨¢n consideradas NC (No Conformes) y enviadas al Puesto de Obediencia Auxiliar, al Planeta de las Zorras ¨CBitch Planet¨C, esto es, un planeta c¨¢rcel. Pero no s¨®lo eso. DeConnick tambi¨¦n firm¨® la primera Capitana Marvel decididamente feminista, y si Juan Antonio Bayona pudo dirigir parte de una serie llamada Bella Muerte?fue porque ella tuvo un d¨ªa la idea de que eso fueran un pu?ado de c¨®mics.
¡°No s¨¦, tengo la sensaci¨®n de que siempre hablamos de lo mismo. Todos tenemos tres o cuatro temas a los que les damos vueltas una y otra vez. No importa la forma que tomen esos temas, son siempre los mismos. Nuestras obsesiones¡±, dice. A su lado, Matt Fraction, nombre propio en el universo Marvel ¨C le dio la vuelta a Ojo de Halc¨®n, haci¨¦ndolo, tambi¨¦n, mujer; se hizo grande con Uncanny X-Men (Patrulla X, en Espa?a), y los radiantes FF¨C, y fuera de ¨¦l ¨Csus Sex Criminals, serie de viajes en el tiempo, en realidad, de atrapados en el tiempo ¨C hay parejas que, cuando lo hacen, detienen, literalmente, el mundo, y, claro, pueden robar bancos y ese tipo de cosas mientras el tiempo no pasa ¨Cha sido merecedora de un Eisner, asiente. ¡°T¨², por ejemplo¡±, le dice Kelly Sue, ¡°sobre todo hablas de amor¡±. ¡°Y t¨² del papel secundario que se le otorga a la mujer y de c¨®mo se rebela contra eso y se vuelve protagonista. Hablas del abuso, pero tambi¨¦n de su condici¨®n de musa, de la cosificaci¨®n de la mujer¡±, dice Matt.
Se conocen bien. Podr¨ªa decirse que son la pareja de moda de Marvel si no hubiera un pu?ado de otras parejas de moda en Marvel, y si lo suyo fuese cosa de hace no demasiado. Pero en realidad llevan juntos mucho tiempo. Tienen dos hijos (uno de diez a?os, ¡°s¨²per sensible¡±, la otra, de siete, ¡°una tipa dura¡±, dicen). Tambi¨¦n tiene un perro, un gato y un camale¨®n. A su paso por Barcelona ¨C son uno de los principales atractivos del 36 Sal¨®n Internacional del C¨®mic que se celebra hasta el domingo en la capital catalana ¨C hablan de c¨®mo empez¨® todo, del poder de la vi?eta hoy en d¨ªa ¨C ¡°el c¨®mic es pol¨ªtica¡±, asevera DeConnick ¨C, de la diferencia entre trabajar para una major o para una minor, y hasta de c¨®mo, todo lo que hacen, no est¨¢ nunca exento de lo que viven ¨C ¡°mi hijo Henry me dio el inicio de Bella muerte?cont¨¢ndome una pesadilla que tuvo¡±, confiesa Kelly ¨C. ?Lo ¨²ltimo que puede leerse en espa?ol de cada uno? En el caso de Matt, Sex Criminals, y en el de DeConnick, Bitch Planet (ambas en Astiberri).
PREGUNTA.- Uno no llega a guionista de c¨®mics de casualidad. ?Cu¨¢ndo empez¨® el amor de cada uno por la vi?eta?
MATT FRACTION.- En mi caso, la verdad es que, desde que tengo uso de raz¨®n, me recuerdo dibujando c¨®mics. Desde los seis o siete a?os. ?Record¨¢is las impresoras de papel continuo? Ten¨ªamos una en casa, y yo utilizaba el papel, con aquellos agujeritos que ten¨ªa por los costados, para hacer mis c¨®mics. Los dibujaba y luego con un hilo, los cos¨ªa, para que tuviesen forma de libreto. Luego se los prestaba a la gente. Supera eso, Kelly.
Yo espero que jam¨¢s lleguen a plantearse si el mundo fue alguna vez de otra manera. Es decir, que vean normal que hombres y mujeres sean iguales
Matt Fraction
KELLY SUE DECONNICK.- Uhm. Mi historia es mejor. Crec¨ª en Bases de las Fuerzas A¨¦reas, as¨ª que es como si hubiera vivido hace 900 a?os, en una ¨¦poca en la que no hab¨ªa televisi¨®n, en realidad, s¨ª, pero s¨®lo ten¨ªamos un canal que pudi¨¦ramos ver y digamos que no era muy fan de la programaci¨®n infantil, as¨ª que b¨¢sicamente mi entretenimiento eran los c¨®mics. ?Por qu¨¦? Porque los soldados eran muy j¨®venes y todos eran fans de los superh¨¦roes y los s¨¢bados se organizaba un mercadillo improvisado en el que vend¨ªan los que ya hab¨ªan le¨ªdo o los intercambiaban por otros. Yo ahorraba toda mi paga para comprarme c¨®mics, y no hac¨ªa otra cosa que leerlos. No me preguntaba entonces qu¨¦ ocurr¨ªa con la perspectiva de g¨¦nero en ese tipo de c¨®mics, s¨®lo era una lectora voraz.
P.- Hablando de la perspectiva de g¨¦nero, tanto el uno como el otro hab¨¦is intentado acabar con los convencionalismos en el c¨®mic, algo de vital importancia en el momento que estamos viviendo y teniendo en cuenta lo influyentes que son los c¨®mics en tanto que literatura popular, ?cre¨¦is que los ni?os y las ni?as del futuro ser¨¢n un poco m¨¢s libres de lo que fuimos nosotros gracias a eso?
Podr¨ªa decirse que son la pareja de moda de Marvel si no hubiera un pu?ado de otras parejas de moda en Marvel
M. F.- Yo espero que jam¨¢s lleguen a plantearse si el mundo fue alguna vez de otra manera. Es decir, que vean normal que hombres y mujeres sean iguales, en todos los sentidos. Mis hijos y sus amigos son los suficientemente j¨®venes como para no darse cuenta de lo extraordinario de Black Panther, y espero que no se den cuenta nunca.
K. S. D.- Yo entiendo a los humanos como c¨¦lulas de un gran organismo, la humanidad, que se est¨¢ enfrentando hoy en d¨ªa a problemas muy serios que ponen en peligro a la especie entera, y no podemos permitirnos dejar que alguien que puede aportar alg¨²n tipo de soluci¨®n, una soluci¨®n brillante, por m¨¢s extra?a o contra todo que ¨¦sta nos parezca, quede al margen del sistema, porque le necesitamos. Necesitamos esas otras visiones de nuestro mundo, porque s¨®lo nosotros podemos cambiarlo.
P.-?En su caso, Bitch Planet es un gigantesco paso adelante en ese sentido.
K.S.D.- Bueno, Bitch Planet naci¨® por mi deseo de trabajar con el dibujante Valentine De Landro. Est¨¢bamos esperando la oportunidad de poder trabajar juntos en un superh¨¦roe, pero un d¨ªa Valentine me llam¨® y me dijo: '?Por qu¨¦ no creamos algo nuevo? ?Por qu¨¦ tenemos que esperar a que aparezca otra Capitana Marvel? Y me dije que ten¨ªa raz¨®n. Ech¨¦ un vistazo a mi libreta de ideas y le solt¨¦ unas cuantas. Soy muy fan del cine exploitation, y a la vez del g¨¦nero c¨¢rceles de mujeres, y de todo lo que tiene que ver con la venganza, y s¨¦ que todo eso junto es, por decirlo suavemente, peligroso para una feminista como yo, pero no puedo evitar sentirme atra¨ªda por esos temas. Y queriendo luchar contra ellos se me ocurri¨® ese planeta c¨¢rcel. Creo que las ideas que te plantean problemas, que te generan dudas, son el terreno m¨¢s f¨¦rtil para la ficci¨®n.
Que quede claro: no todo lo que se publica en una gran editorial es basura ni todo lo que se publica en una peque?a, una obra maestra. Hay basura y obras maestras en unas y otrasKelly Sue DeConnick
P.-??Y es muy distinto trabajar para Marvel o para una indie, hasta qu¨¦ punto puede uno ser ¨¦l o ella misma en una gran editorial?
M. F.-??Cuando trabajas para Marvel tienes que ser consciente de que est¨¢s trabajando con s¨ªmbolos, con personajes ic¨®nicos, con los que ciertos temas funcionan y otros no. Por ejemplo, el tema que quer¨ªa tratar en Sex Criminals no hubiera funcionado en el universo Marvel en absoluto.
K.S.D..- Por otro lado, si niegas el potencial de la cultura popular est¨¢s negando el potencial del pueblo. Que quede claro: no todo lo que se publica en una gran editorial es basura ni todo lo que se publica en una peque?a, una obra maestra. Hay basura y obras maestras en unas y otras. En cualquier caso, yo no s¨¦ dejarme a un lado cuando escribo. Es decir, todo lo que hago tiene algo de m¨ª, y no pienso renunciar a eso. Haga superh¨¦roes o no los haga. Y creo que a todo el mundo le ha quedado claro, porque me llaman para proyectos en los que mi voz encaja a la perfecci¨®n.
P.-??Qu¨¦ otras cosas os fascinan m¨¢s all¨¢ de los c¨®mics? ?De d¨®nde vienen todas vuestras ideas?
Todo lo que hago tiene algo de m¨ª, y no pienso renunciar a eso. Haga superh¨¦roes o no los haga
Kelly Sue DeConnick
M. F.-?En mi caso, me fascinan los c¨®micos. Me encanta cuando un stand-up comedian te cuenta c¨®mo construye sus mon¨®logos. He le¨ªdo un mont¨®n de libros al respecto. Y dir¨ªa que mi libro favorito es Look, I Made a Hat, de Stephen Sondheim. Tengo la sensaci¨®n de que la idea del ritmo de un c¨®mico de escena es id¨¦ntica a la de un guionista de c¨®mic. Sabes que las cosas deben ser as¨ª porque deben ser as¨ª. El ritmo interno es muy importante.
K.S.D.?En mi caso, lo que pasa es que no pienso de forma visual, y no tengo por qu¨¦ hacerlo, en realidad, as¨ª los dibujantes son mucho m¨¢s libres. Yo escribo a la manera en que un actor analiza un gui¨®n. Porque me form¨¦ en el mundo del teatro, fui actriz, y escribo como lo har¨ªa un dramaturgo.
M. F.-?En tu caso adem¨¢s es un muy evidente que todo lo que te fascina m¨¢s all¨¢ de los c¨®mics, acaba col¨¢ndose en lo que sea que est¨¦s haciendo. Desde un dato estad¨ªstico hasta una historia que te hayan contado los ni?os.
K.S.D.- S¨ª. De hecho, una de las historias que da pie a Bella muerte?parti¨® de una pesadilla de nuestro hijo mayor (Henry). Crey¨® que hab¨ªa matado a un colibr¨ª con una pistola de agua y se despert¨® llorando, y yo le hice entender el poder de las historias, de c¨®mo pod¨ªan llegar a hacernos sentir sin ser ciertas. Luego estuve investigando sobre el colibr¨ª. Pesa poqu¨ªsimo. Pesa tan poco que cuando llueve, f¨ªsicamente, no tendr¨ªa por qu¨¦ poder volar. Pero redoblan sus fuerzas para volar. Me pareci¨® tremendo. C¨®mo en los peores momentos, todos redoblamos nuestras fuerzas para salir adelante. Tom¨¦ eso como punto de partida para una de las historias de Bella muerte. Si lo pienso bien, en realidad, todo Bella muerte?tiene mucho de nuestro hijo, mientras que Bitch Planet est¨¢ completamente basada en el car¨¢cter de nuestra hija.
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