Segunda juventud
Ridley Scott nos sirve el miedo a domicilio y por cap¨ªtulos en 'The Terror'
¡°Quiero matar a la gente del susto¡±. Lo dec¨ªa Ridley Scott cuando presentaba su ¨²ltimo Alien bastardo, el Covenant. Lo podr¨ªa haber repetido con la versi¨®n televisiva de The Terror que ha producido para AMC. Basada en una novela de Dan Simmons, que a su vez se inspira en tragedia real de la expedici¨®n brit¨¢nica al ?rtico en busca del paso del Noroeste, era la propuesta perfecta para que Scott se enrolase. No solo porque cuenta con la amenaza de un pasajero no invitado a una exploraci¨®n en territorio inh¨®spito. Tambi¨¦n por el car¨¢cter hist¨®rico de la aventura. Deslumbrados por la maestr¨ªa de Scott para filmar las entra?as del espacio exterior, olvidamos con frecuencia que debut¨® con Los duelistas. Produciendo The Terror, Ridley Scott cierra el c¨ªrculo que inici¨® adaptando la novela de Joseph Conrad. El propio Conrad cita de pasada la expedici¨®n real de The Terror y su gemelo The Erebus en El coraz¨®n en las tinieblas.
Vuelve Scott, en esta segunda juventud televisiva, a sus or¨ªgenes: cuando quer¨ªa hacer una pel¨ªcula heredera de Barry Lyndon. Lo demostr¨® en Taboo y lo reafirma en The Terror. Y no deja de ser curioso que haya elegido dos tramas que hablan de canibalismo y de barcos. Como si el viejo zorro quisiera avisarnos de que tambi¨¦n puede comerse de un bocado esta porci¨®n del negocio si se lanza a la conquista.
En The Terror hay una vuelta de tuerca en el espanto. Es en el fondo un cuento de casa encantada. Pero la casa es el ?rtico y el fantasma, el demonio que habita en el alma de los marineros. El que hambriento hasta la locura se relame con el olor de la carne chamuscada de los compa?eros muertos en un incendio. La narraci¨®n alcanza una oscuridad extrema sobre el blanco parad¨®jico del hielo. Vuelve Scott a matarnos del susto. Nos sirve el miedo a domicilio y por cap¨ªtulos. Exactamente igual que hizo su amado Conrad con las entregas de El coraz¨®n en las tinieblas.
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