El rayo azul
Tras cinco a?os en activo, Blueproject Fundation vuelve a darle al Borne de Barcelona ese espacio para el arte contempor¨¢neo pensado para el artista 'mid-career'
Hubo un espacio m¨ªtico en Barcelona en los noventa llamado Sala Montcada. Era un proyecto de la Fundaci¨®n La Caixa y estaba en la calle del mismo nombre, en el barrio del Borne. Compart¨ªa filosof¨ªa con la Sala Metr¨°nom y hac¨ªa de puente con La Capella y el Espai 13 de la Fundaci¨®n Mir¨®, los espacios abiertos a los m¨¢s j¨®venes, tanto de artistas como comisarios, hasta que en 2003 lleg? a Barcelona el centro de arte que hasta entonces no ten¨ªa, el CASM. Durante a?os, hasta que la crisis la cerr¨® en 2008, fue un espacio de referencia para los artistas espa?oles que empezaban a alcanzar la media carrera, los grandes olvidados de la mayor¨ªa de museos. Ya saben: demasiado conocidos para lanzarlos y demasiado j¨®venes para consagrarlos. Se habla poco de eso, pero es una de las grandes sombras que hay tras la actual programaci¨®n de exposiciones. Trabajar en la Sala Montcada implicaba embarcarse en un proyecto nuevo, abierto a la experimentaci¨®n y a la oportunidad de generar un proyecto de cero.
Justo en ese hueco se sit¨²a Blueproject Foundation. Abri¨® hace cinco a?os tambi¨¦n en el Borne con la idea de ensanchar ese escaso espacio para artistas con reconocimiento previo a las consagraciones del museo. Es decir, abrir un espacio de proyectos. La idea fue de Vanessa Salvi, que act¨²a tambi¨¦n, de pulm¨®n econ¨®mico. Cuando conoci¨® a Renato Della Poeta en la Academia de Bellas de Roma el proyecto empez¨® a coger forma junto al resto del equipo: Cristina L¨®pez Morcuende, Pedro Torres y Gerardo Peral. Fue as¨ª como abrieron esta fundaci¨®n que en este corto tiempo ha cogido un peso importante en el contexto art¨ªstico de Barcelona. El suyo es un modelo de instituci¨®n escurridizo. Por un lado, es un espacio independiente en cuanto a subvenciones y recursos p¨²blicos o privados de otras entidades, lo que genera independencia a la hora de programar. Por otro lado, las aportaciones econ¨®micas de donantes privados la llevan a la etiqueta de fundaci¨®n privada, que ha patrocinado, a su vez, proyectos de artistas fuera, como el de Ernesto Neto en la ¨²ltima Bienal de Venecia. ¡°Somos una instituci¨®n dentro del contexto local, es inevitable no considerarse como tal, pero no queremos y no podemos, por escala, asumir cierto peso institucional que podr¨ªa ser paralizante¡±, explican a modo coral.
La programaci¨®n gira en torno a varios focos. Uno es para artistas consagrados que no han expuesto individualmente en Barcelona, y algunas veces tampoco en Espa?a. ?C¨®mo? Apostando por proyectos site-specific, que ofrecen al p¨²blico grandes instalaciones in¨¦ditas, lo que diferencia a la fundaci¨®n de otros espacios locales. Esos proyectos se ubican en Il Salotto, una sala de 200m2 sin luz natural por donde han pasado ya artistas como Pieter Vermeersch, Lionel Esteve o la actual Nelo Akamatsu. El otro foco es sobre el arte emergente y m¨¢s experimental. Ellos ocupan la Sala Project, bajo convocatoria p¨²blica y con la cesi¨®n de un espacio en residencia para poder desarrollar los proyectos. All¨ª han trabajado comisarias como Anna Manubens, con Joachim Koester, o Claudia Segura con Jorge M¨¦ndez Blake y Mateo L¨®pez. En esta charla ahondan en ello.
?C¨®mo se mide el ¨¦xito desde el ¨¢mbito institucional?
Para nosotros, lo importante no es proponer algo nuevo u original, o marcar una l¨ªnea exclusiva de actuaci¨®n. Intentamos, en nuestra medida, aportar algo interesante al panorama cultural de la ciudad. Pensamos que es importante apostar y apoyar el trabajo intelectual de los artistas, as¨ª como dar las condiciones econ¨®micas para que puedan realizar sus trabajos.
?C¨®mo trabaj¨¢is con el contexto? ?Os interesa la idea de contexto?
Somos un espacio activo en la ciudad y somos partes del contexto. Hemos colaborado con otros muchos espacios, artistas e iniciativas de la ciudad, por ejemplo, con el Big Draw, la Noche de los Museos, el Gallery Weekend y ArtsLibris. Hay otros proyectos que surgen de colaboraciones m¨¢s espec¨ªficas, como ha ocurrido con La Poderosa o la Fundaci¨® Joan Mir¨® (para el actual ciclo Abaton, en una de las actividades). Tambi¨¦n somos conscientes de los problemas que el contexto tiene (como la falta de p¨²blico) y procuramos aportar, participando/proponiendo rutas de visitas que organizamos con los espacios y galer¨ªas vecinos. Nuestro contexto es local, pero tambi¨¦n internacional. Y al programar ciertas exposiciones, tambi¨¦n buscamos ampliar el contexto local.
Y ?c¨®mo trascender el contexto y proyectarse m¨¢s all¨¢?
En nuestro caso, procuramos establecer conexiones internacionales y no quedarnos en lo exclusivamente local. Una de las premisas de la fundaci¨®n es proponer artistas que no han trabajado en el contexto local, lo que creemos que es positivo para el p¨²blico de aqu¨ª y para nosotros, ya que genera proyecci¨®n fuera de nuestro territorio. La trascendencia tambi¨¦n es una cuesti¨®n de tiempo.
?Qu¨¦ debe tener un proyecto para que sea destacable?
Nos interesa trabajar con proyectos que marcan su propio camino, independientemente de tendencias o del mercado, que sean buenos en s¨ª mismos, es decir, con una coherencia interna y fiel al artista. Discutiendo esta pregunta, Renato nos recuerda el reci¨¦n fallecido pintor y fil¨®sofo italiano Gillo Dorfles, que dec¨ªa que nuestra ¨¦poca no tiene un gusto ¨²nico, vivimos en un era de much¨ªsimos gustos (?La nostra epoca non ha pi¨´ un gusto: viviamo nell'era dei moltissimi gusti?). Los artistas, en la contemporaneidad, tienen el privilegio de marcar su propio camino y proponer gustos, conceptos, metodolog¨ªas de trabajo muy propios, desvinculados de cualquier canon como ocurr¨ªa en el pasado, en ¨¦pocas marcadas por reglas y estilos claros, a las que los artistas o las ten¨ªan que seguir o ir en contra, en direcci¨®n opuesta, para desmarcarse de lo acad¨¦mico o del gusto de la ¨¦poca. Hoy en d¨ªa estamos liberados de estas premisas, lo que tambi¨¦n genera una libertad absoluta en la que cada artista debe encontrar su propia voz. Encontrar estas sinton¨ªas ¨²nicas no es f¨¢cil, pero nosotros procuramos encontrarlas y darles cabida.
Hablen m¨¢s extensamente del suyo...
En Il Salotto apostamos por proyectos site-specific y nos centramos en esta l¨ªnea con artistas contempor¨¢neos internacionales. Sin embargo, tambi¨¦n tienen cabida otros proyectos como exposiciones colectivas y ciclos de actividades, como fue Passe/Impasse y el actual Abaton, que re¨²ne la instalaci¨®n sonora Chijikinkutsu, performances, sesiones de v¨ªdeo y cine, un encuentro literario y una performance audiovisual para el finissage. En la Sala Project, el perfil de los artistas seleccionados en la convocatoria es m¨¢s joven, pero tambi¨¦n invitamos a artistas de media carrera a exposiciones individuales. Entre ambas salas, procuramos apoyar a los artistas en esta fase, de mid-career, ya que en Barcelona escasean los espacios para tal. Por un lado, hay una serie de espacios y ayudas para artistas emergentes (Can Felipa, Sant Andreu Contemporani y Sala d'Art Jove, entre otros) y por el otro, han desaparecido espacios como Metr¨°nom, la Sala Montcada, etc. Es inevitable que los artistas salgan fuera para avanzar en sus carreras, pero tambi¨¦n queremos aportar esta posibilidad en la ciudad.
?Vivimos ensimismados en el mundo del arte? ?Miramos demasiado a lo propio?
Por definici¨®n, el arte contempor¨¢neo es aquel que habla de la contemporaneidad, de aquello que pasa en nuestro entorno, en nuestro sistema pol¨ªtico-social y tambi¨¦n en nuestras vidas, de lo m¨¢s ¨ªntimo a lo m¨¢s abstracto. Por ello, el mundo del arte puede ser un reflejo de las problem¨¢ticas de nuestro mundo, de nuestro contexto o del exterior. El arte no es un sistema independiente que se cierra en si mismo, sino que habla de lo cercano y nos ayuda a comunicarnos y a entendernos. El mundo del arte analiza las problem¨¢ticas de la sociedad y se aproxima a ellas, intenta reflexionar y proponer, quiz¨¢s, m¨¢s preguntas. Hay muchas maneras y tem¨¢ticas con las que el arte se relaciona con el mundo. Existe este gesto, movimiento, del arte hacia la sociedad, una retroalimentaci¨®n ineludible. Pero es cierto que desde el interior del mundo del arte muchas veces el discurso no atraviesa sus fronteras y se queda entre los (pocos) que somos. Adem¨¢s de que ese discurso puede estar construido por muchos factores y agentes con intereses muy propios. El mundo de arte somos una minor¨ªa, pero al arte se le atribuye un alcance y responsabilidad universales. Quiz¨¢s haya que equilibrar un poco la balanza. Podemos vivir, o no, ensimismados en un mundo, ya sea el del arte o como en el que estamos, que quiz¨¢s nos puede dar pistas de lo que somos capaces, como seres productores y consumidores.
?Vivir del arte es malvivir? ?Hay salida?
Siempre hay salida, lo dif¨ªcil a veces es encontrarla o asumirla. El proceso o el camino de cada instituci¨®n, espacio o artista puede variar mucho. Ser m¨¢s o menos pesado seg¨²n el aguante (econ¨®mico, emocional, f¨ªsico) de cada uno. Es cierto que el sector sufre, en general, problemas cr¨®nicos, externos e internos, que deber¨ªan ser trabajados a largo plazo y con mucha educaci¨®n.
Acab¨¢is de inaugurar una exposici¨®n de Julia Llerena, un de las artistas de nueva generaci¨®n m¨¢s destacadas. Haced una breve cr¨ªtica de la muestra...
Julia Llerena ha sido seleccionada en la pasada convocatoria de la fundaci¨®n y presenta una exposici¨®n bastante coherente con sus ¨²ltimos proyectos. Estrato cero, como t¨ªtulo, ya nos da pistas de los intereses y metodolog¨ªa de la artista. Interesada en deshechos cotidianos, que encuentra por la calle en sus derivas por diferentes ciudades, recoleta este material para luego recomponerlos y en este gesto de abstracci¨®n de la materia (de algo que deja de ser ¨²til y se convierte en otra cosa) se apoya en la invenci¨®n de un lenguaje nuevo, con un alfabeto mat¨¦rico impreciso. La exposici¨®n tiene un componente est¨¦tico muy importante, que lleva al p¨²blico a resignificar estos peque?os objetos fuera de contexto, combinados con dibujos encontrados en la Carta Arqueol¨®gica de Barcelona. Dos elementos dispares que se unen en consonancia en el presente. Desde la fundaci¨®n nos ha interesado su trabajo y hemos apostado por el proyecto.
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