El traductor del Chapo que prefiere escribir
El autor peruano Mario Michelena presenta su libro ¡®Uno nunca sabe por qu¨¦ grita la gente¡¯ en la 23? Feria del Libro de Lima
El narrador peruano Mario Michelena dej¨® hace 15 a?os un doctorado en Literatura en Nueva York para concursar a un puesto como traductor judicial. En un receso de su trabajo en la Corte Federal de Brooklyn ha presentado en la 23? Feria Internacional del Libro de Lima un ejemplar con cuatro cuentos de ¡°realismo mim¨¦tico¡±: tres transcurren en la sociedad estadounidense tradicional en di¨¢logo con los latinos, y otro en un pa¨ªs sudamericano que atraves¨® una dictadura en las d¨¦cadas de los setenta y ochenta.?Uno nunca sabe por qu¨¦ grita la gente, el t¨ªtulo del libro, es tambi¨¦n el nombre de uno de los dos relatos cuyos personajes padecen litigios judiciales.
En su d¨ªa a d¨ªa, Michelena necesita cuidar mucho el uso que hace de la lengua, y eso se nota en su narrativa. ¡°Si un testigo dice ¡®camioneta¡¯, y uno traduce ¡°pick up¡±; y en una posterior audiencia, refiri¨¦ndose al mismo veh¨ªculo, otro testigo o acusado dice ¡°station wagon¡±, haces dudar al jurado¡±, describe.
¡°El int¨¦rprete judicial tiene una enorme responsabilidad porque lo que hablan los testigos en espa?ol se pierde para la posteridad: queda solo lo que traduce y es registrado [en las actas] en ingl¨¦s, por eso tiene que hacerlo bien y aceptar en p¨²blico las correcciones de otros. A veces el testigo y el acusado son monoling¨¹es en espa?ol y todos los dem¨¢s ¡ªla taqu¨ªgrafa, el juez, el jurado¡ª solo hablan ingl¨¦s¡±, explica a EL PA?S.
¡°En general, el inmigrante de clase trabajadora que llega a Estados Unidos tiene un espa?ol muy endeble, as¨ª que adopta muy r¨¢pido el ingl¨¦s a su habla y puede decir ¡®pusha la breca¡¯ en vez de ¡®aprieta el freno¡¯. Una vez hubo un caso que enfrentaba a una inmigrante polaca y otro latino, ambos hablaban mezclando jerga estadounidense, pero lo m¨¢s dif¨ªcil es cuando la lengua est¨¢ contaminada con jerga delictiva, como la de las maras. Para esto estudiamos con colegas especialistas, nos ayudamos mucho¡±, se?ala.
Otra manera de ser escritor
Michelena se form¨® en Literatura en la Universidad Cat¨®lica del Per¨², y tiene estudios de maestr¨ªa en la misma disciplina. La editorial neoyorquina Chatos Inhumanos ha lanzado su libro de cuentos. En 2015 public¨® la novela Las esquinas redondeadas. Es, adem¨¢s, int¨¦rprete de peleas de boxeo para HBO.
Tambi¨¦n trabaj¨® como traductor en audiencias judiciales sobre la red de corrupci¨®n en la FIFA y en casos de paramilitares colombianos. El juicio de Joaqu¨ªn Guzm¨¢n Loera, El Chapo, est¨¢ en una etapa preliminar que el int¨¦rprete describe como "s¨²per compleja". En la emisora Radioprogramas coment¨®: "Mi impresi¨®n es que no presta atenci¨®n a lo que traduzco. Siempre le deseo buena suerte, es algo que les digo a todos".
El cuento que cierra el libro, Peinados de anta?o presenta esas dificultades de comprensi¨®n entre estadounidenses y migrantes, cuando un anciano blanco y angloparlante, due?o de un despacho de abogados, pide a su asistente de origen latinoamericano que le ayude a entenderse con el obrero que va a encargarse de reformarle el cuarto de ba?o.
Aunque Michelena es uno de los traductores en el juicio a Joaqu¨ªn El Chapo Guzm¨¢n, prefiere escribir historias ¡°sobre personas como uno, o inmensamente mejores que uno". "Gente a la que he conocido que est¨¢n en prisi¨®n. Me conmueve la gente que no es psicop¨¢tica¡±, coment¨® esta semana en una entrevista radial.
El espa?ol de sus relatos incluye las formas de hablar de padres y madres de familia, hijos, vecinos, compa?eros de clase estadounidenses, colombianos, mexicanos, peruanos y uruguayos, entre otros. Y tambi¨¦n frases en ingl¨¦s de los gobernados por Donald Trump.
El escritor Juan Manuel Robles anota que el libro contiene el ingl¨¦s de los estadounidenses de siempre, ¡°pero tambi¨¦n el murmullo de la lengua del submundo inmigrante¡±.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.