Dimite el presidente de la comisi¨®n que estudia las tarifas de las entidades de gesti¨®n

El conflicto entre las entidades de gesti¨®n de derechos de autor y los usuarios en torno a la fijaci¨®n tarifas por el uso del repertorio ha tocado de lleno a la Secci¨®n Primera de la Comisi¨®n de Propiedad Intelectual (SPCPI), encargada de controlar las tarifas y determinar los tipos en caso de conflicto entre las partes. El presidente de ese organismo, Julio Costas, present¨® el viernes su dimisi¨®n. Denuncia "presiones" del Ministerio de Cultura y de las entidades de gesti¨®n en el contencioso que mantienen abierto con las radios desde hace a?os.

La dimisi¨®n de Costas (en realidad, una solicitud de cese, ya que su nombramiento procede del Consejo de Ministros) se ha producido un d¨ªa despu¨¦s de que se aprobara la resoluci¨®n del expediente que enfrenta a AGEDI-AIE y la Asociaci¨®n Espa?ola de Radiodifusi¨®n Comercial (AERC), que agrupa a la pr¨¢ctica totalidad de las cadenas, entre ellas la SER, Cope, Onda Cero y Kiss FM.

Esta resoluci¨®n evaluaba algunas de las seculares reclamaciones efectuadas por las radios: pagar a las entidades de gesti¨®n por el uso efectivo del repertorio. La AERC siempre ha defendido que las tarifas aplicadas a la radio musical no pod¨ªan ser las mismas que las de la radio hablada, donde las canciones no son parte sustancial de la programaci¨®n. Las entidades de gesti¨®n abogaban, sin embargo, por una especie de tarifa plana, independientemente del uso de la m¨²sica, calculada en funci¨®n de los ingresos de las emisoras. En la ¨²ltima revisi¨®n de tarifas, que naci¨® con la Ley de Propiedad Intelectual de 2015, los precios subieron entre un 100%? y un 150% en algunas modalidades.

Costa explica que en la madrugada del jueves al viernes, horas despu¨¦s de aprobarse la resoluci¨®n del expediente (que a¨²n no ha sido comunicada a las partes), las entidades de gesti¨®n AGEDI-AIE registraron en el Ministerio de Cultura una solicitud de recusaci¨®n en su contra (la segunda, tras la del mes de julio). Y el viernes, ambas entidades presentaron una petici¨®n de desestimiento del procedimiento de fijaci¨®n de tarifas, lo que en la pr¨¢ctica podr¨ªa echar por tierra todo el trabajo efectuado por la SPCPI en este tiempo para intentar poner orden en un conflicto enquistado desde hace a?os.

¡°Las entidades de gesti¨®n pretenden que la resoluci¨®n adoptada no se notifique. Si la Secci¨®n Primera lo acepta significa que se archivar¨¢ el procedimiento¡±, dice Costas. De ser as¨ª, el enfrentamiento entre las radios y las entidades de gesti¨®n volver¨ªa a su punto de partida y no se aplicar¨ªa la decisi¨®n adoptada por la SPCPI. El expediente quedar¨ªa en nada.

Costas ha tomado la decisi¨®n de dejar el cargo en medio de un ambiente marcado, afirma, por las presiones de AGEDI-AIE ante Cultura, circunstancia que habr¨ªa estado detr¨¢s de la destituci¨®n, la semana pasada, del secretario de la SPCPI, Ra¨²l Rodr¨ªguez. ¡°Fue relevado sin mi conocimiento previo y en contra de mi criterio¡±, sostiene Costas, que elogia el trabajo efectuado por Rodr¨ªguez. ¡°Realizaba una labor excelente en un puesto de la Administraci¨®n muy dif¨ªcil de cubrir por la especificidad de la materia y ha trabajado a plena satisfacci¨®n de la secci¨®n¡±.

Rodr¨ªguez fue destituido por Adriana Moscoso, directora general de Industrias Culturales y del Libro, del Ministerio de Cultura, que procede del mundo de las entidades de gesti¨®n.

El presidente de la SPCPI desde 2015 afirma sentirse desautorizado por Cultura ante "las presiones de? AGEDI-AIE" y asegura que en este panorama no puede seguir ni como presidente ni como vocal en el organismo. Lamenta tener que haber tomado esta decisi¨®n porque "se estaba haciendo un buen trabajo t¨¦cnico; neutral e independiente y esto se ha cercenado por presiones de una de las partes".?Costas critica que "a las primeras cambio" han "dinamitado" la Secci¨®n Primera de la CPI.?

Otro de los motivos que le ha llevado a arrojar la toalla son las enmiendas al proyecto de reforma de la Ley de Propiedad Intelectual?pactadas por los cuatro principales grupos parlamentarios (PP, PSOE, Podemos y Ciudadanos) para incrementar el n¨²mero de vocales de la SPCPI. Se tratar¨ªa de pasar de cuatro a cinco. Este nuevo vocal ser¨ªa nombrado por Cultura. "En algunas de las enmiendas veo mi nombre y apellidos", dice Costas, convencido de que las enmiendas est¨¢n "claramente dirigidas a torpedear la composici¨®n de la SPCPI y modificar a mitad del partido el r¨¦gimen de mayor¨ªas. En su calidad de presidente, Costas ¡ªque fue designado por el Ministerio de Econom¨ªa y antes de acceder a este puesto fue miembro de la Comisi¨®n Nacional de la Competencia (CNC)¡ª?ten¨ªa voto de calidad.

Precisamente su antigua pertenencia al organismo regulador fue invocada por AGEDI-AIE para recursarle en el procedimiento sobre las tarifas de las radios. La primera recusaci¨®n se present¨® el 13 de julio y fue retirada tres d¨ªas despu¨¦s. La segunda se registr¨® el viernes pasado. Costas confiesa que en este tiempo ha advertido "una cierta inquina y animadversi¨®n" hacia ¨¦l por parte de las entidades de gesti¨®n, toda vez que durante su etapa como consejero de la CNC particip¨® en resoluciones que pon¨ªan de relieve las abusivas e inequitativas tarifas dictadas por las entidades de gesti¨®n.

Las enmiendas que se tramitan en el Congreso no solo lesionan al sector de la radio. Como usuarios que son del repertorio que representan las entidades de gesti¨®n, tambi¨¦n afectan a la televisi¨®n (p¨²blica y privada), la prensa, las universidades, los Ayuntamientos, festivales, hoteles y negocios de Internet, entre otros sectores.

Las enmiendas pactadas por los cuatro grandes grupos han sido aplaudidas por las entidades de gesti¨®n de derechos de propiedad intelectual agrupadas en Adepi, que ha felicitado a PP, PSOE, Ciudadanos y Podemos. En su opini¨®n, la incorporaci¨®n de un nuevo miembro en la secci¨®n primera de la CPI ¡°mejorar¨¢ la eficacia y la eficiencia imprescindibles en un organismo que debe ser verdaderamente independiente para velar por la equidad de las tarifas en lugar de ser utilizado como excusa para no pagarlas¡±, sostiene Adepi en un comunicado.