Artistas invisibles tras el tel¨®n de acero
Una muestra exhibe en Dresde el trabajo de creadoras transgresoras del Este de Europa
Artistas radicales tras el tel¨®n de acero. Ese es el subt¨ªtulo de una exposici¨®n reci¨¦n inaugurada en el este de Alemania, que bien podr¨ªa llamarse ¡°Mujeres invisibles¡±. Porque pese a haber sido artistas notables y rompedoras, la velocidad de la historia en este rinc¨®n de Europa las acab¨® relegando al olvido. Especialmente a las de la antigua Rep¨²blica Democr¨¢tica Alemana (RDA), porque cuando cay¨® el muro, la ilusi¨®n embriag¨® a muchas artistas hasta entonces ignoradas e incluso castigadas por el r¨¦gimen, que pensaron que por fin las reconocer¨ªan, que las galer¨ªas del Oeste se pegar¨ªan por ellas. ¡°Pero todo eso no sucedi¨®¡±, explica Susanne Altmann, comisaria de La insurrecci¨®n de Medea, la exposici¨®n reci¨¦n inaugurada en Dresde y que se puede ver hasta finales de marzo.
La muestra exhibe la potente energ¨ªa creativa de artistas a las que les toc¨® crear en un contexto represivo y hostil. Pelucas punk o espectaculares chupas de cuero comparten espacio con v¨ªdeos de performances y fotograf¨ªas que destilan transgresi¨®n. Provocaban, protestaban y canalizaban su frustraci¨®n a trav¨¦s del arte. ¡°Las mujeres arriesgaban m¨¢s, y normalmente eran m¨¢s radicales, porque si eres invisible, te da igual, puedes arriesgar m¨¢s¡±, sostiene Altmann. La ropa y la imagen personal cobr¨® especial importancia en un contexto de uniformidad est¨¦tica y en el que los artistas trataban de distinguirse arriesg¨¢ndose incluso a ser detenidos por su aspecto.
Una serie de 400 diapositivas retrata a los amigos de Tina Bara en Prenzlauer Berg, un barrio del norte de Berl¨ªn que alberg¨® a muchos artistas antes de la ca¨ªda del muro, convertido hoy en emblema de la gentrificaci¨®n de la capital alemana. Las im¨¢genes muestran cuerpos desnudos y en general retratan aires de libertad que encajan mal con la imagen tradicional de la vida en la Alemania oriental. Hay tambi¨¦n postales y objetos en peque?os formatos, que las artistas pod¨ªan hacer circular con facilidad y ser empaquetados r¨¢pidamente para traspasar fronteras.
¡°En el debate de la infrarrepresentaci¨®n de los artistas cr¨ªticos de la RDA en realidad solo se ha hablado de hombres y en particular de pintores¡±, cuenta Altmann mientras recorre la muestra. ¡°Es incre¨ªble que sea ahora cuando se empieza a hablar de los que vieron sus expectativas e ilusiones frustradas, tambi¨¦n en la pol¨ªtica¡±, dice Altmann, en alusi¨®n al descontento que brota en el Este de Alemania y que ha contribuido al auge de la extrema derecha.
La muestra expone obras de mujeres que ahora rondan los 70 a?os o que ya han muerto. Que en Polonia, Hungr¨ªa, Ruman¨ªa o la antigua Checoslovaquia algunas han pasado a formar parte de la memoria art¨ªstica del pa¨ªs y gozan de reconocimiento internacional. Pero eso no sucedi¨® con las creadoras del este de Alemania, donde tras caer el muro se mir¨® hacia el oeste y en buena medida se borr¨® un pasado que ahora recoge la muestra.
Un ejemplo claro en la exposici¨®n son las fotograf¨ªas de Zof¨ªa Rydet, una artista polaca que durante d¨¦cadas tom¨® im¨¢genes de aldeanas de su pa¨ªs. Son mujeres mayores, retratadas con una dignidad poderosa. En la pared contigua, un trabajo semejante, pero esta vez de im¨¢genes tomadas en las fabricas de Alemania del Este, en el que Evelyn Richter retrata a mujeres en medio de impactantes paisajes industriales. Mientras Rydet goza de fama internacional, Richter es mucho menos conocida.
¡°Las respuestas art¨ªsticas fueron cambiando seg¨²n el clima pol¨ªtico¡±, explica Altmann. A menudo, cuanto m¨¢s apretaba la represi¨®n, m¨¢s intensa se volv¨ªa la energ¨ªa creativa y la subcultura. Los artistas figurativos oficiales eran muy celebrados por el r¨¦gimen y cuando cay¨® el muro lo siguieron siendo, porque ten¨ªan un nombre, pero las desconocidas antes del 89, siguieron si¨¦ndolo despu¨¦s. Si se exhib¨ªa su trabajo, siempre se hac¨ªa etiquetado como g¨¦nero menor o desde un punto de vista pol¨ªtico, para ilustrar ese periodo hist¨®rico. ¡°Yo he querido centrarme en su arte y dejar de lado los aspectos sociol¨®gicos¡±, advierte la comisaria.
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