Girault de Prangey: el olvidado pionero que fotografi¨® Oriente por primera vez

En 1922, Charles de Simony, arist¨®crata franc¨¦s, tras adquirir la ruinosa mansi¨®n de su pariente lejano, Joseph-Philbert Girault de Prangey (1804- 1892), encontraba en el oscuro desv¨¢n un tesoro destinado a reescribir un episodio de la historia de la fotograf¨ªa: cientos de daguerrotipos realizados por el ambicioso y pr¨¢cticamente desconocido pionero de la fotograf¨ªa. Entre ellos la colecci¨®n de placas fotogr¨¢ficas que el intr¨¦pido autor hab¨ªa realizado durante un recorrido de tres a?os por el Mediterr¨¢neo: el mayor conjunto de im¨¢genes de ese periodo, conocido hasta la fecha, formado por? las fotograf¨ªas m¨¢s antiguas de los lugares que representan ¡ªGrecia, Egipto, Siria, L¨ªbano, Turqu¨ªa y Jerusal¨¦n¡ª y algunas de las primeras de Italia.

La exposici¨®n Monumental Journey:The Daguerreotypes of Girault de Prangey exhibe 120 de los daguerrotipos tomados durante este fascinante periplo realizado entre 1842 y 1845 por el artista, as¨ª como algunas de sus pinturas, acuarelas y litograf¨ªas. Se puede ver en el Metropolitan Museum de Nueva York y se trata de la primera exposici¨®n dedicada al fot¨®grafo en Estados Unidos, y la primera en centrarse en su viaje por el Mediterr¨¢neo. ¡°La exposici¨®n perfila a Girault como el creador de un concepto fotogr¨¢fico absolutamente moderno, en el cual los recuerdos visuales pueden ser almacenados, recuperados, reagrupados y mostrados¡±, destaca Stephen C. Pinson, comisario de la exposici¨®n.

La existencia de la colecci¨®n de Girault era conocida por un peque?o grupo de coleccionistas y curadores, pero no fue hasta 2003 cuando realmente se observ¨® el alcance de su obra, tras las primeras subastas de material procedente de dicho archivo.

La noticia del descubrimiento del daguerrotipo en 1839 debi¨® de resultar sumamente atractiva para un esp¨ªritu inquieto como el del aventurero franc¨¦s, quien lo utiliz¨® por primera vez para captar las im¨¢genes de varios monumentos en Par¨ªs, motivos que resultaban muy adecuados debido a los largos tiempos de exposici¨®n que requer¨ªa la t¨¦cnica. Construy¨® una c¨¢mara, de tama?o superior a la de Daguerre, que le permiti¨® tomar las primeras exposiciones dobles que se conocen hasta la fecha. Su m¨¦todo consist¨ªa en hacer uso de una l¨¢mina oscura que introduc¨ªa detr¨¢s de la lente y que era colocada de forma que solo quedaba expuesta una parte de la placa, esta pod¨ªa rotar de forma vertical y horizontal. De esta forma, las im¨¢genes resultantes ¡ªde mayor tama?o que cualquiera del resto de los daguerrotipos que se conocen¡ª pod¨ªan presentar las exposiciones juntas, ser muy verticales, algo poco com¨²n en la ¨¦poca, o verse en formato de panor¨¢mica.

Naci¨® en Langres, al este de Francia. Fue el ¨²nico heredero de una gran fortuna, lo que le permit¨ªa viajar para alimentar su inter¨¦s por las civilizaciones orientales, algo com¨²n entre la aristocracia e intelectualidad de la ¨¦poca. Estudio arte en Par¨ªs, as¨ª como leyes. En Langres form¨® parte de un comit¨¦ dedicado a la conservaci¨®n y al estudio de las ruinas romanas, as¨ª llev¨® a cabo un inventario de los monumentos de la zona. En 1831 realiz¨® su primer largo viaje a Italia, y al a?o siguiente comenz¨® una expedici¨®n de dos a?os que le llev¨® por T¨²nez, Argelia, Espa?a y Sicilia, para acabar en Suiza. Fue precisamente en Espa?a donde brot¨® su fascinaci¨®n por la arquitectura isl¨¢mica. De regreso a su propiedad decidi¨® dise?ar sus jardines inspirando en La Alhambra, a la que consideraba como la obra cumbre de la arquitectura isl¨¢mica. Public¨® dos colecciones de litograf¨ªas basadas en los dibujos que realiz¨® en Espa?a bajo el t¨ªtulo de Monuments arabes et moresques de Cordoue, Seville y Choix d¡¯ornements moresques de l¡¯Alhambra , as¨ª como un texto, Essai sur l¡¯architecture des Arabes et des Mores, en Espagne, en Sicile et en Barbarie.

Girault anunci¨® su intenci¨®n de estudiar los monumentos del Mediterr¨¢neo y su relaci¨®n con la arquitectura medieval utilizando el daguerrotipo durante una reuni¨®n de la Sociedad Francesa de Arqueolog¨ªa, en 1941. El periplo comenz¨® al a?o?siguiente en Par¨ªs, cargado con una equipo fotogr¨¢fico que pesaba casi cincuenta kilos. Resulta sorprendente que fuese capaz de embarcarse en una aventura tan grande y que consiguiera realizar con ¨¦xito y calidad la cantidad de daguerrotipos con los que finalmente regres¨® a su mansi¨®n. De vuelta ah¨ª realizar¨ªa algunas tomas de distintos motivos bot¨¢nicos en su jard¨ªn. Los fot¨®grafos de aquella ¨¦poca deb¨ªan de hacer frente a enormes retos t¨¦cnicos, especialmente en el desierto, lo que refleja la extraordinaria habilidad t¨¦cnica del artista. ¡°El hecho de que esta monumental y ejemplar colecci¨®n haya sobrevivido es tambi¨¦n un ejemplo de un meticuloso proceso de archivo, algo excepcional en ese tiempo¡±, dice la nota de prensa. Girault atesoraba sus daguerrotipos en cajas de madera construidas a medida, donde quedaban etiquetados, fechados, e inventariados con el fin de ser utilizados en un futuro, frecuentemente como base para sus pinturas o litograf¨ªas impresas. Cre¨® el archivo fotogr¨¢fico m¨¢s antiguo del mundo.

Su segundo gran viaje lo realiz¨® por barco. Italia fue su primer destino. En Grecia tom¨® m¨¢s im¨¢genes que en cualquier otro pa¨ªs (por entonces, Atenas era mucho menos familiar para los franceses que Roma). Lleg¨® a Egipto, y despu¨¦s de explorar Alejandr¨ªa se estableci¨® en El Cairo por un a?o. Describ¨ªa los monumentos egipcios como ¡°grandes masas con largas bases y grandes superficies¡±. La colecci¨®n incluye tambi¨¦n im¨¢genes de personajes a los que hac¨ªa posar conforme a las convenciones occidentales sobre Oriente, y generalmente eran identificados por gen¨¦ricos (beduino, marino, conductor de caballos), excepto el retrato de Ayoucha, quien pos¨® para ¨¦l en distintas ocasiones. Por aquel entonces las autoridades locales comerciaban con los restos arqueol¨®gicos, as¨ª Girault consigui¨® una peque?a colecci¨®n de objetos egipcios que forma parte del Museo de Arte y de Historia de Langres. Tambi¨¦n explor¨® la pen¨ªnsula de Anatolia. En tierra viajaba fundamentalmente en camello o a caballo, con un gu¨ªa contratado que probablemente sirvi¨® de interprete. Lleg¨® a Beirut, continu¨® a Damasco y a Baalbek, donde realiz¨® en las entonces no escavadas ruinas romanas m¨¢s tomas que en cualquier otro sitio, para seguir de camino a Alepo.

Su empe?o por realizar ¡°un estudio comparativo de la arquitectura del mundo oriental y occidental utilizando el medio fotogr¨¢fico de forma met¨®dica le convirti¨® en pionero de la fotograf¨ªa arqueol¨®gica, en un momento en que la arqueolog¨ªa era tambi¨¦n una disciplina emergente¡±, destaca Pinson en el cat¨¢logo que acompa?a a la muestra. ¡°Motivado en parte por los intereses pol¨ªticos de Francia en el Oriente Medio y por una fascinaci¨®n art¨ªstica por lo oriental, adopt¨® un acercamiento inevitablemente eurocentrista, al estudio de lo que llam¨® arquitectura '¨¢rabe'. Aun as¨ª, su implicaci¨®n con el arte isl¨¢mico, en un momento en el que este tipo de estudios eran escasos, resulta innovadora¡±.

De regreso de su aventura se dedic¨® a continuar su estudio sobre patrimonio medieval de Langres. Volver¨ªa a hacer uso del daguerrotipo de forma continuada en Suiza y a lo largo de su frontera con Francia. A partir de los a?os cincuenta vivi¨® recluido en su propiedad, dedicado a su otra pasi¨®n: la bot¨¢nica, as¨ª como a experimentar con el procedimiento del colodi¨®n h¨²medo y la esteroscopia. Alimentando una fama de mis¨¢ntropo y exc¨¦ntrico, quiz¨¢s aquella que muchas veces precede a los so?adores que se adelantan a su tiempo.

Monumental Journey:The Daguerrotypes of Girault de Pragney. Metropolitan Museum, Nueva York. Hasta el 12 de mayo.