La peculiaridad de la ignorancia

El ya cl¨¢sico subg¨¦nero del drama educativo ambientado en zonas depauperadas, con dificultades para la transmisi¨®n de conocimientos y arco dram¨¢tico en el que profesor y alumnos se van acercando progresivamente, ofreci¨¦ndose mutuos valores y renunciando cada uno de ellos a una cuota de su personalidad e idiosincrasia propias, tiene una peculiar variante con Profesor en Groenlandia, pel¨ªcula francesa hablada en dan¨¦s y groenland¨¦s, que lleva su relato a un inh¨®spito e ¨ªnfimo pueblo de 200 habitantes en una esquina de la isla, regi¨®n aut¨®noma del reino de Dinamarca. Y su singularidad proviene tanto del formato como de la mezcla de g¨¦neros.

Ficci¨®n donde los personajes reales se interpretan a s¨ª mismos en su propia cotidianidad, la pel¨ªcula est¨¢ compuesta a partir de la experiencia que un joven profesor dan¨¦s en busca de ¡°nuevas experiencias¡± ha venido viviendo en la isla, pero guionizada a trav¨¦s de una serie de situaciones basadas en el choque social y cultural vivido, y que deambulan entre lo educativo y lo antropol¨®gico. As¨ª, Samuel Collardey, director y coescritor, ha compuesto un extra?o y muy osado libreto que comienza casi como una comedia dram¨¢tica en la l¨ªnea de Doctor en Alaska, pero que m¨¢s tarde deriva incluso hacia la aventura.

Un guion de gran libertad donde lo ¨²nico que chirr¨ªa son los puntuales cambios en el punto de vista, con tres o cuatro secuencias donde no aparece el profesor, que quiz¨¢ sirvan para aportar m¨¢s informaci¨®n y resultar m¨¢s did¨¢ctico, pero que van en perjuicio de la unidad del conjunto y que bien se podr¨ªan haber integrado en otros momentos con presencia del protagonista.

Pel¨ªcula de espectaculares localizaciones y de evidente belleza visual, Profesor en Groenlandia acaba siendo una lecci¨®n de humildad en tiempos de choque entre la civilizaci¨®n y el salvajismo, entre la cultura y la ignorancia, donde la relatividad de cada uno de esos conceptos se hace carne en un lugar alejado de toda l¨®gica.