Un gigante de Broadway obliga a cancelar ¡®Matar a un ruise?or¡¯ en los teatros peque?os de EE UU
La versi¨®n de la obra de Aaron Sorkin, un ¨¦xito en Nueva York, se ve opacada por una disputa legal con la empresa que vende los derechos
La adaptaci¨®n teatral de Matar a un ruise?or?del c¨¦lebre dramaturgo Aaron Sorkin ha robado la atenci¨®n de la industria cultural por dos factores: romper el r¨¦cord de taquilla en Broadway y liderar una disputa legal que obliga a los teatros peque?os a no presentar sus respectivas versiones de la obra. M¨¢s de 25 producciones listas para montar este a?o la pieza teatral basada en la novela de Harper Lee han recibido una advertencia del productor de Broadway y Hollywood Scott Rudin, quien defiende tener los derechos exclusivos del material. Al menos 12 salas a lo largo del pa¨ªs ya han cancelado las funciones previstas y se espera que la cifra contin¨²e escalando. Las compa?¨ªas, menores en tama?o y presupuesto, no se pueden permitir ir a tribunales contra un monstruo de las artes esc¨¦nicas.
Los teatros peque?os han sido v¨ªctimas de un l¨ªo legal que desconoc¨ªan hasta el 20 de febrero. La Dramatic Publishing Co., empresa que vende los derechos de ciertas obras, les traspas¨® hace meses los cr¨¦ditos de Matar a un ruise?or, en la versi¨®n del dramaturgo Christopher Sergel. Lo que argumentan los abogados de Rudin es que ahora que existe la nueva adaptaci¨®n de Sorkin?¡ªel cerebro detr¨¢s de ¨¦xitos televisivos como El ala oeste de la Casa Blanca o The Newsroom¡ª, ya no se puede montar la versi¨®n de Sergel.
"No nos gusta pedirle a nadie que cancele la producci¨®n de una obra en cualquier lugar, pero los montajes en cuesti¨®n que est¨¢n autorizados por la Dramatic Publishing Co. infringen los derechos que Harper Lee nos ha otorgado directamente", dijo Rudin a trav¨¦s de un comunicado. El documento firmado por Lee y Rudin, seg¨²n The New York Times, establece que mientras la obra se presente como una gran producci¨®n en Nueva York, no se puede montar a menos de 40 kil¨®metros en ciudades con m¨¢s de 150.000 habitantes.
Un teatro con capacidad para 170 personas en Dayton, Ohio, ten¨ªa previsto estrenar la obra el 8 de marzo. Tras semanas de preparaci¨®n, y con 11.000 d¨®lares recaudados por venta de entradas anticipadas, recibieron la carta de Rudin. "Creemos que tenemos argumentos que presentar, pero no podemos permitirnos acudir a los tribunales para hacerlo", dijo este lunes en un comunicado Matthew Lindsay, presidente de la junta del teatro Dayton Playhouse. Lo mismo ha ocurrido con producciones en Buffalo, Dayton, Marblehead, Oklahoma City, Braintree, Buda, Austin, Azusa y Salt Lake City.
La indignaci¨®n por la medida de Rudin que perjudica directamente a los teatros peque?os es generalizada. La pregunta que m¨¢s se repite entre los afectados consultados por los medios locales es: ¡°?En qu¨¦ le perjudica a Rudin que nosotros hagamos nuestra obra?¡±. Las salas menores, muchas de ellas respaldadas por organizaciones sin fines de lucro, apoyadas han hecho un llamamiento a boicotear la versi¨®n de Sorkin, que pronto saldr¨¢ de gira por el pa¨ªs. Chris Peterson, escribi¨® en su blog OnStage: ¡°Una cosa ser¨ªa que un teatro estuviera robando conscientemente la licencia creativa, pero esto es algo completamente distinto. Esto est¨¢ mal¡±.
El Gran Teatro de Salt Lake City, que pag¨® casi 6.000 d¨®lares a Dramatic Publishing Co. por los derechos, ten¨ªa previsto presentar la funci¨®n gratis a cerca de 2.500 ni?os. El productor de la obra m¨¢s taquillera de la historia de Broadway les rob¨® ese regalo. "Prohibir a otros a interpretar esta obra va en contra de todo lo que trata la novela en primer lugar", public¨® Peterson, aludiendo que la gran obra escrita por Lee en 1960 retrat¨® la lucha por los derechos civiles a trav¨¦s de la historia de un juicio a un hombre inocente.
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