¡®Cu¨¦ntame¡¯: Las Alc¨¢ntara como espejo para las mujeres
Miles de espectadoras han crecido con las integrantes de la familia de 'Cu¨¦ntame', que vuelve a La 1
¡°Eso de la igualdad no es ning¨²n rollo, es un derecho¡±. As¨ª evidenciaba Mercedes Fern¨¢ndez (Ana Duato) su despertar feminista en la ¨²ltima temporada de la serie de la que es protagonista Cu¨¦ntame c¨®mo pas¨®. Y aunque siempre hab¨ªa predicado el feminismo sin saberlo, era la primera vez que lo verbalizaba delante de su marido Antonio Alc¨¢ntara (Imanol Arias), un machista del d¨ªa a d¨ªa que pensaba que el sitio de una mujer es la cocina. Era 1988 y comenzaba una tercera ola feminista, liderada mayoritariamente por las generaciones de sus hijas In¨¦s (Irene Visedo) y Mar¨ªa (Carmen Climent); una onda que supuso una bomba tanto para las j¨®venes de los noventa como para las amas de casa, que empezaron a demandar una vida propia fuera del hogar y el seno familiar.
Merche, que empez¨® como ama de casa abnegada y acab¨® licenciada en la universidad y convertida en empresaria, ha sido durante 17 a?os un espejo para las mujeres de una generaci¨®n milenial que estaba en los albores de la adolescencia cuando arranc¨® la serie en 2001 y que ya son m¨¢s que adultas cuando, este mi¨¦rcoles, se estrene su vig¨¦sima temporada (22.30, La 1).
¡°La de Merche es la historia de las que crecieron en el franquismo, intentando compatibilizar lo que la sociedad les hab¨ªa ense?ando y lo que ahora pod¨ªan hacer. Por eso, cuando Merche sufre una enfermedad, se enfrenta a la infidelidad de su marido, da sus pasos en el mundo laboral o sufre situaciones de acoso sus reacciones son complejas. No es un personaje que se construye como s¨ªmbolo, sino como un homenaje a nuestras madres¡±.
La matriarca -Merche de Beauvoir, como la llaman en broma sus fans- ha luchado contra sus propios demonios de misoginia interiorizada y padecido un machismo que a¨²n hoy campa a sus anchas por Espa?a. Su hija mayor, In¨¦s, emigr¨® a Londres y Argentina, persigui¨® su sue?o de ser actriz, pas¨® por la c¨¢rcel y mantuvo una relaci¨®n con una mujer. Todo bajo la desaprobaci¨®n de la familia. Siempre en busca de algo m¨¢s, In¨¦s ocup¨® el lugar de una hermana mayor que exploraba su lugar en un mundo hostil.
Con Mar¨ªa, que lleg¨® en la sexta temporada, emitida en 2004, el viaje cobr¨® otra dimensi¨®n. Todos los arcos argumentales de hermandad revolucionaria cerraban un c¨ªrculo con la rebelde Mar¨ªa, que viv¨ªa su ¨¦poca m¨¢s convulsa en un entorno que sent¨ªa viejo y herm¨¦tico. Se manifest¨® y recibi¨® un balazo en las revueltas estudiantiles de 1987, se enamor¨® perdidamente de un chico mucho mayor que ella y se sinti¨® encerrada en medio del progreso y la modernidad. Herminia, Merche o In¨¦s han recordado, en el prime time de casi dos d¨¦cadas, que una mujer deb¨ªa valerse por s¨ª misma aunque ellas no hubieran podido hacerlo.
¡°Creo que, a una generaci¨®n m¨¢s joven, Cu¨¦ntame le permite entender los sacrificios y renuncias de las mujeres de la familia, y es uno de los elementos que convierten a la serie en algo tan imprescindible para la cultura audiovisual espa?ola¡±, a?ade Cascajosa.
Todas las mujeres de San Genaro han vivido sus propios trances: el c¨¢ncer de mama de Merche, los desamores de Nieves, el aprendizaje al conocer a una mujer trans por primera vez, la uni¨®n de todas contra el marido maltratador de la vecina, Amparo¡ Incluso la abuela Herminia, que ha ido abandonando prejuicios por rodearse de mujeres que quer¨ªan volarlos, ha redescubierto sus propias necesidades y se ha adaptado al nuevo modelo social, aunque sea con el ce?o un poco fruncido, como cuando escucha la palabra divorcio. Las mujeres de Cu¨¦ntame c¨®mo pas¨® han avanzado mientras lo hac¨ªan las ni?as al otro lado del televisor, imparables.
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