Luis Gordillo, del gris al naranja

Luis Gordillo sali¨® de Sevilla en 1959, ten¨ªa 25 a?os y era "muy poco sevillano", ha confesado este lunes en el Espacio Santa Clara, el lugar que el Ayuntamiento de la ciudad ha destinado a mostrar la donaci¨®n realizada por el artista que ha marcado la modernidad en Espa?a. Un puente entre el informalismo y la nueva figuraci¨®n que mantiene s¨®lidos sus pilares y contin¨²a reinvent¨¢ndose.? "Yo no me sent¨ªa nada de aqu¨ª. Era m¨¢s de Par¨ªs, Londres o Nueva York. Para m¨ª Sevilla era gris-morado y no me interesaba nada. Ahora la veo muy luminosa, calentita incluso en invierno. Es de color naranja, rosita, los diminutivos tienen connotaciones cari?osas. He ido descubriendo la ciudad poco a poco a lo largo de los ¨²ltimos 15 a?os", asegura el artista, una especie de camale¨®n con propiedades a la inversa que, en lugar de apropiarse de los colores, los va depositando por cuanto toca.

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Gordillo mira con ternura obras que ten¨ªa por ¡°feroces¡±

El laberinto como para¨ªso encontrado

...Carmenm¨¢setc¨¦terAs..., la muestra en la que puede verse las 34 obras que ha donado a Sevilla junto a tres series cedidas por dos a?os y otras 21 prestadas solo para esta exposici¨®n, se inaugura este martes en una gran sala con artesonado mud¨¦jar del antiguo convento de Santa Clara, en la que podr¨¢ verse hasta el 13 de octubre.

"Este espacio no ser¨¢ monopolio m¨ªo, pretendo hacer cosas con gente joven, darle morbo art¨ªstico. Estar¨¢ abierto, habr¨¢ conferencias y exposiciones de otros artistas. Queremos que vaya creciendo, que no se quede en un espacio muerto. A¨²n tengo dudas sobre el nivel de vanguardia al que nos abriremos. No s¨¦ si nos pondremos muy extremos, con cosas que no las entienda ni Dios...", elucubra divertido el artista que, a sus 84 a?os, se considera "modernillo".

Luis Gordillo, el segundo de ocho hermanos, estudi¨® Derecho en Sevilla, pero la ciudad en la que ¨¦l creci¨® carec¨ªa de alicientes para un joven ¨¢vido de conocimiento. "Cuando yo viv¨ªa aqu¨ª la actividad cultural era muy ingenua y muy pacata. Por ejemplo, en Historia del Arte no se pasaba de Goya; aunque en mi casa era diferente. Hab¨ªa libros, discos y todos los hermanos estudi¨¢bamos solfeo y piano", recuerda el artista, con una larga lista de antol¨®gicas en los grandes museos espa?oles como el Macba (Barcelona, 1999), el IVAM (Valencia, 1993), el Reina Sof¨ªa (Madrid, 2007)? o el CAAC (Sevilla, 2016).

"Para m¨ª la Semana Santa era un rollo de beatones. ?Hay que ser burro para pensar eso!, una idea que, en lugar de vanguardistas, es de tontos", reconoce el artista, que viaj¨® por primera vez a Par¨ªs en 1958, donde se empap¨® de informalismo y abstracci¨®n, y desde entonces no ha parado de crecer. Un a?o despu¨¦s, Gordillo abandona para siempre su ciudad y aunque ha mantenido un contacto continuo desde entonces, la decisi¨®n de crear la Fundaci¨®n Luis Gordillo surgi¨® el pasado a?o, en recuerdo de su hermano el historiador Jos¨¦ Manuel Rodr¨ªguez Gordillo, quien falleci¨® en 2015.

"La idea de la fundaci¨®n naci¨® gracias a Luis F. Mart¨ªnez-Montiel [doctor en Historia del Arte de la Universidad de Sevilla], una amistad que he heredado de mi hermano Jos¨¦ Manuel. Ha sido ¨¦l quien me ha animado y tambi¨¦n es el comisario de esta primera exposici¨®n. Tenemos muchos planes, entre ellos un acuerdo con la Universidad para catalogar mi obra, esas cosas que se hacen con los viejos maestros", dice socarr¨®n Gordillo quien mantiene intacto el gusto por el trabajo, incluso cuando este conlleva sufrimiento.

"Ahora mis cuadros se han hecho m¨¢s complicados, m¨¢s densos, y me exijo cada vez m¨¢s. Pero la verdad es que no me podr¨ªa separar nunca de ese sufrimiento. Algunos elegimos la complejidad porque somos un poco masoquistas", reconoce Gordillo. "Trabajo en muchos cuadros a la vez y cuando la cosa se pone dif¨ªcil y tengo que parar y cambiar de registro. Entonces hago dibujos, collages, obra sobre papel, fotomontajes... cosas divertidas y f¨¢ciles", explica Gordillo, siempre dispuesto a experimentar y que, desde hace m¨¢s de una d¨¦cada, utiliza tambi¨¦n el ordenador para sus creaciones. "Hay obras que son totalmente digitales, para m¨ª es como un juego. Cada d¨ªa voy m¨¢s por ese lado porque me divierte mucho. La pintura me da muchos dolores de cabeza", reconoce, aunque inmediatamente a?ade: "Pero yo soy un pintor. Nunca podr¨ªa dejar de pintar".

En ...Carmenm¨¢setc¨¦terAs..., titulada as¨ª por la obra Carmen. Biograf¨ªa de un mito (2012) de su hermano Jos¨¦ Manuel, que recibi¨® el premio Antonio Dom¨ªnguez Ortiz, re¨²ne trabajos desde 1979 hasta 2016. La donaci¨®n la componen las 31 obras de distintas t¨¦cnicas de la serie Carmen (2015) y el tr¨ªptico Payseyes 2 (2016). "Son distintas intervenciones sobre una base fotogr¨¢fica, el Reina Sof¨ªa tiene uno similar pero m¨¢s grande. El t¨ªtulo es una mezcla de paysage, paisaje en franc¨¦s, y eye, ojo en ingl¨¦s", apunta. Mientras que las cinco serigraf¨ªas de Instantes (2003) y las 12 litograf¨ªas de Celulario (1995) son una cesi¨®n por dos a?os. "Luego las cambiaremos por otras obras", apunta el artista; aunque Mart¨ªnez-Montiel conf¨ªa en que estas y otras pasen a engrosar la donaci¨®n.