La belleza de las peque?as cosas tubulares de Fernand L¨¦ger
Una muestra re¨²ne en el IVAM un centenar de obras del pintor cubista, siempre preocupado por un arte social que llegara a todo el mundo
Hijo de un criador de ganado, Fernand L¨¦ger lleg¨® a Par¨ªs de su Normand¨ªa natal y se qued¨® deslumbrado por las masas de gente, por la publicidad, por la velocidad de las cosas, por el mundo moderno. Corr¨ªan los primeros a?os del siglo XX. Empez¨® a cursar arquitectura pero la dej¨® por la pintura, atra¨ªdo por el postimpresionismo que a¨²n daba sus ¨²ltimas pinceladas en la entonces capital del mundo del arte. Su visita a la famosa exposici¨®n de 1907 de Paul C¨¦zanne en la que abogaba por las formas c¨®nicas y cil¨ªndricas le hizo replantearse su arte, como a tantos otros creadores de las vanguardias hist¨®ricas.
A partir de entonces y tambi¨¦n bajo la influencia de Picasso y Braque, L¨¦ger (1881-1955) desarroll¨® un cubismo muy personal de gran colorido y de una tem¨¢tica muy personal, las m¨¢quinas, obsesi¨®n que compart¨ªa con los futuristas italianos. Pero sus hombres y mujeres tubulares y sus m¨¢quinas antropo-m¨®rficas estaban dotadas de una mirada humanista que nunca abandon¨®. Ni cuando luch¨® en las trincheras y sufri¨® los desastres de la Primera Guerra Mundial, los soldados rob¨®ticos que luego pint¨® estaban desprovistos de empat¨ªa.
No en vano, L¨¦ger fue un pintor de lo social, siempre preocupado por reflejar lo colectivo, el trabajo colaborativo, con cierto optimismo. ¡°Quiere apelar y atraer a la gente normal y corriente. Gente fabricando coches, alba?iles trabajando. Quiere primar al sujeto, a la colaboraci¨®n entre las personas y por eso este es un buen cuadro para esta breve introducci¨®n de su obra¡±, explic¨® ayer Darren Pih, cocomisario, junto a Laura Bruni, de la exposici¨®n Fernand L¨¦ger y la vida moderna, que se inaugura hoy en el Institut Valenci¨¤ d¡¯Art Modern (IVAM).
Con un gesto con la cabeza se?al¨® a su espalda el lienzo ?tude pour Les Constructeurs: l¡¯equipe au repos, de 1950, en el que se representa un grupo de alba?iles. ¡°Vemos trabajadores de la construcci¨®n, vemos cuerpos humanos, aunque tambi¨¦n la existencia de otros elementos, metales, maderas, cosas org¨¢nicas, plantas, tierra. Jugaba con lo biom¨®rfico para reflejar la simbiosis entre el ser humano y las m¨¢quinas, quer¨ªa transmitir ese menaje comunista de que la uni¨®n hace la fuerza¡±, a?ade el comisario. La exposici¨®n, compuesta por un centenar de obras, est¨¢ organizada por el IVAM y la Tate Liverpool, donde ya se ha visto, y es uno de los platos fuertes de la programaci¨®n del museo valenciano para el 30? aniversario de su apertura.
L¨¦ger fue un comunista de carn¨¦ tard¨ªo. Se afili¨® en 1945, cuando volvi¨® de EE UU donde se hab¨ªa trasladado durante la Segunda Guerra Mundial y comenzaba la Guerra Fr¨ªa. Pero su militancia era conocida, como pone de manifiesto la socarrona y cr¨ªtica novela La maleta, del escritor ruso exiliado Sergu¨¦i Dovl¨¢tov, en la que su ¨¢lter ego se enfunda una antigua chaqueta ra¨ªda del genio cubista franc¨¦s que tal vez pase desapercibida a la nomenclatura sovi¨¦tica.
¡°En Francia ya ten¨ªa esa ideolog¨ªa y ese af¨¢n por hacer un arte para el pueblo, accesible y significativo. Cre¨ªa que en objetos sencillos y cotidianos podemos encontrar la belleza, quer¨ªa que la gente normal la apreciara porque hay belleza en todo¡±, agrega Darren Pih sobre un artista que parece anticipar algunas de las l¨ªneas del pop art posterior, con su uso de los colores planos y primarios, su fijaci¨®n por la publicidad y por su obra figurativa sobre todo a partir de los a?os 30.
¡°Lo que me gusta de la obra de L¨¦ger es que, aunque veamos formas abstractas, es muy reconocible, con elementos de maquinaria, de tipograf¨ªa. Se enlaza muy bien con el trabajo de Braque, Picasso, con el futurismo y el cubismo. Es abstracto pero reconocible¡±, apunt¨® el comisario.
El director del IVAM, Jos¨¦ Miguel G. Cort¨¦s, destac¨® que la muestra, integrada por medio centenar de pinturas, adem¨¢s de dibujos, grabados, textiles, pel¨ªculas y fotograf¨ªas, es la m¨¢s importante organizado en Espa?a desde hace dos d¨¦cadas. Las obras proceden de numerosos museos y colecciones nacionales e internacionales. Se puede ver en el museo valenciano hasta el 15 de septiembre.
Un fotomural para ense?ar y un filme m¨ªtico con Man Ray
En un permiso durante la Primera Guerra Mundial, Fernand L¨¦ger fue con su amigo el poeta Guillaume Apollinaire al cine y descubri¨® en 1916 a Charles Chaplin. Sobre todo se qued¨® fascinado por el potencial art¨ªstico del cine. En 1924 particip¨® en la pel¨ªcula El ballet mec¨¢nico, considerada una joya del cine experimental, junto al director Dudley Murphy y al polifac¨¦tico artista Man Ray. El filme incluye muchos elementos pict¨®ricos de la obra de L¨¦ger y se proyecta en la muestra del IVAM. En esta tambi¨¦n se reproduce el gran fotomural Felicidad esencial, nuevos placeres, que el pintor franc¨¦s realiz¨® con la arquitecta Charlotte Perriand para la Exposici¨®n Universal de Par¨ªs, de 1937, donde se dio a conocer el Guernica, de Picasso. El mural ten¨ªa un prop¨®sito did¨¢ctico y persegu¨ªa mejorar la educaci¨®n est¨¦tica de la gente.
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