Un tribunal real para juzgar a Hamlet
Magistrados y letrados en activo participan en una obra de teatro inmersivo sobre el sistema judicial. Los Teatros del Canal de Madrid dedican una retrospectiva a su creador, Roger Bernat
Javier Carazo Rubio, magistrado de un juzgado de lo Social de Madrid, presidir¨¢ esta noche el juicio m¨¢s raro de su vida. En el banquillo se sienta Hamlet, pr¨ªncipe de Dinamarca, acusado de asesinar a su t¨ªo Claudio, seg¨²n el relato de los hechos que Shakespeare imagin¨® en su magistral tragedia. El acusado y los testigos, al ser ficticios, ser¨¢n representados por actores. Todo lo dem¨¢s seguir¨¢ las normas del sistema judicial espa?ol: sumario, testigos, pruebas periciales, alegatos de los letrados... Defender¨¢ al acusado el penalista Andreas Chalaris frente a la fiscal Mar¨ªa Valencia. Intervendr¨¢n tambi¨¦n una forense y un agente judicial. Al final, el juez elegir¨¢ al azar a nueve personas entre el p¨²blico asistente para que deliberen sobre lo que han escuchado y emitan un veredicto.
El proceso se repetir¨¢ ma?ana con nombres diferentes: Ignacio Gonz¨¢lez Vega, portavoz de Juezas y Jueces para la Democracia; el abogado Marcos Garc¨ªa Montes y la fiscal Olga Mu?oz Mota. Es posible que el veredicto sea distinto en cada sesi¨®n. Depender¨¢, sobre todo, de la pericia de los profesionales que intervengan. De eso trata precisamente este experimento: al saber el p¨²blico que los hechos son ficticios, lo que pasa a primer plano es la propia vista, la mec¨¢nica de la que se ha dotado una sociedad para juzgar a una persona y decidir si es culpable o inocente. Desde 2011 se han celebrado 160 sesiones del montaje en 13 pa¨ªses. Hamlet ha sido condenado y absuelto en igual proporci¨®n, una estad¨ªstica que da que pensar tanto sobre los entresijos jur¨ªdicos como respecto a los sociol¨®gicos.
Sin int¨¦rpretes
El dramaturgo y director Roger Bernat es el creador de esta singular propuesta teatral, titulada Please, continue (Hamlet), que hoy abre en los Teatros del Canal de Madrid una retrospectiva de cuatro piezas del creador barcelon¨¦s que podr¨¢n verse hasta el domingo. Pionero y referente del teatro inmersivo en Espa?a, con gran proyecci¨®n en la escena internacional de vanguardia, los trabajos de Bernat no suelen tener int¨¦rpretes, sino que es el p¨²blico el que ejecuta la acci¨®n siguiendo las instrucciones que va recibiendo a lo largo de la funci¨®n. ¡°Esto no quiere decir que obliguemos a los espectadores a salir a un escenario a interpretar nada. Les invitamos m¨¢s bien a participar en un dispositivo que se pone en marcha de forma colectiva, como la propia sociedad, y de paso a reflexionar sobre su papel como ciudadanos activos dentro de ese grupo¡±, explica el dramaturgo.
Se entiende mejor repasando las cuatro piezas de la retrospectiva. En Please, continue (Hamlet), los espectadores act¨²an como jurado. Aunque solo nueve deciden el veredicto, todos deben asumir esa responsabilidad, pues hasta el final se desconoce a los elegidos. ¡°De esta manera el p¨²blico se siente comprometido con lo que ocurre. El teatro nos permite representarnos como colectivo y tomar conciencia de nuestra responsabilidad en ese colectivo¡±, comenta Bernat.
Numax-Fagor, plus se presenta como ¡°una m¨¢quina de resucitar palabras¡±. El p¨²blico debe reproducir cada frase que dijeron los trabajadores de las f¨¢bricas de electrodom¨¦sticos Numax y Fagor en sus asambleas antes de ser despedidos en 1979 y 2013, respectivamente. El punto de partida es el m¨ªtico documental de Joaqu¨ªn Jord¨¤, Numax presenta..., que recogi¨® la experiencia de la cooperativa que fundaron los empleados entre 1977 y 1979 para intentar reflotarla. Fracasaron.
Bernat advierte: ¡°Esto no es un ejercicio de nostalgia asamblearia. Recordemos que la pel¨ªcula de Jord¨¤ result¨® en su momento insoportable para el sindicalismo porque mostraba el fracaso de aquel intento de colectivizaci¨®n¡±. Y recuerda que m¨¢s de tres d¨¦cadas despu¨¦s de aquella experiencia ocurri¨® algo similar en Fagor. ¡°Pero nadie se reconoce en las palabras de su antecesor. Los de Fagor no se reconocen en las palabras de los de Numax; los de Numax no se reconocen en las palabras de los de Fagor. Ni siquiera se reconocen en sus propias palabras de hace 35 a?os. Pero esas palabras siguen resonando hoy poderosamente cuando el p¨²blico las enuncia¡±, resume el dramaturgo.
No se registran conversaciones de inter¨¦s parte de las escuchas policiales a las esposas de tres yihadistas ceut¨ªes que se inmolaron en 2012 en Siria. Al p¨²blico se le ofrecen tres opciones: conocer la historia seg¨²n la narraci¨®n de los documentos policiales y judiciales, construir su relato a trav¨¦s de las conversaciones telef¨®nicas de las mujeres o escuchar la transcripci¨®n de las comunicaciones de los yihadistas con sus familiares y compa?eros. Las tres versiones se emiten de forma simult¨¢nea por tres canales y el espectador puede cambiar de una a otra en sus auriculares.
En la ¨²ltima pieza, La consagraci¨®n de la primavera, los espectadores reciben instrucciones para reproducir la coreograf¨ªa creada por Pina Bausch en 1975 sobre la legendaria composici¨®n de Stravinsky.
Todos somos int¨¦rpretes
Roger Bernat es uno de los pioneros del teatro de inmersi¨®n en Espa?a. El director define sus trabajos como dispositivos que se activan con la participaci¨®n del p¨²blico. Irrumpi¨® en los noventa en la escena alternativa espa?ola con espect¨¢culos de agitaci¨®n pol¨ªtica, pero poco a poco fue derivando hacia la investigaci¨®n de nuevas maneras y formatos teatrales. En 2008 acu?¨® el nombre actual de su compa?¨ªa, FFF, siglas de The Friendly Face of Fascism (La cara amable del fascismo). Sus principios art¨ªsticos est¨¢n recogidos en un manifiesto titulado Para una est¨¦tica de los dispositivos, que firma a medias junto a su colaborador habitual Roberto Fratini. Su primer postulado dice as¨ª: "FFF comparte con su ¨¦poca la vocaci¨®n de mantener a la poblaci¨®n permanentemente movilizada. En la sociedad del espect¨¢culo, todos somos int¨¦rpretes".
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