El ¨¦xito del Montalbano televisivo que ¡®cena¡¯ con los italianos
La serie sobre las novelas de Camilleri lleva 20 a?os emiti¨¦ndose en Italia y ha influido en la vida cotidiana del pa¨ªs
El placer de las visitas suele resultar molesto cuando transforman la sorpresa en reincidencia. Pero el comisario Montalbano, un hombre elegante y discreto, se sent¨® a cenar en la mesa de cientos de miles de familias italianas durante dos d¨¦cadas sin que nadie pusiera mala cara. La serie de la obra m¨¢s famosa de Andrea Camilleri, producida y emitida en la Rai desde 1999, un producto televisivo que este a?o ha afrontado su decimotercera temporada, es la m¨¢s influyente y longeva en antena de Italia. Su abrumador ¨¦xito la ha convertido tambi¨¦n en la m¨¢s seguida de la historia del pa¨ªs, un fen¨®meno social y televisivo que permiti¨® a la productora venderla a 60 pa¨ªses y propagar la leyenda del famoso inspector por todo el mundo. En algunos lugares, como el Reino Unido, incluso se ha colado entre los 20 programas m¨¢s vistos.
Camilleri, un hombre de una humildad y sencillez ins¨®litas entre los autores que alcanzan el consenso comercial y cr¨ªtico, nunca logr¨® descifrar o aceptar el ¨¦xito de sus novelas ni de la serie, ambientada en la ciudad imaginaria de Vigat¨¤, pero rodada en parte en pueblos sicilianos de la provincia de Ragusa como Scicli (ah¨ª est¨¢ la famosa farmacia). Las ventas millonarias de la saga y los royalties de su versi¨®n televisiva le permitieron, entre otras cosas, dedicarse sin presi¨®n comercial a una de sus grandes pasiones: la novela hist¨®rica. "Es un chantaje asqueroso", bromeaba el escritor al explicar por qu¨¦ le perseguir¨ªa hasta el ¨²ltimo d¨ªa de vida su personaje.
El comisario Montalbano, por cuyos cap¨ªtulos ha desfilado temas de actualidad como la corrupci¨®n o el problema de la migraci¨®n, es tan famoso en Italia que incluso puede contribuir a ganar unas elecciones primarias. El reci¨¦n elegido secretario general del PD, Nicola Zingaretti, un hombre sin excesivo carisma ni magnetismo, es el hermano del protagonista de la serie (Luca Zingaretti). Adem¨¢s del apellido, guardan un parecido asombroso y muchos el pasado marzo, cuando se impuso a sus rivales internos en los comicios socialdem¨®cratas, creyeron apreciar un empuj¨®n extra a su carrera de la mano del comisario: en Ragusa, tierras montalbanescas, Zingaretti se llev¨® el 90% de los votos.
La influencia de la serie, sin embargo, tambi¨¦n ten¨ªa impacto sobre el propio Camilleri y su manera de afrontar el trabajo diario (en los ¨²ltimos tiempos ten¨ªa que dictar a causa de su ceguera). El autor siempre dec¨ªa que corr¨ªa el riesgo de que las im¨¢genes y las tramas del producto televisivo modificasen su manera de enfocar los libros, su acercamiento original a las nuevas historias. El autor ten¨ªa una excelente relaci¨®n con el protagonista de la serie, que le ha dedicado una larga y sentida despedida en sus redes sociales. ¡°Te echar¨¦ de menos, sobre todo, porque en estos a?os en los que he cruzado mi vida con la del comisario has sido un amigo. He tenido la sensaci¨®n de que bastaba un trazo de tu l¨¢piz para cambiar mi vida. He vivido junto a ti lo que hab¨ªas creado. He aprendido mucho, el respeto por las personas, por todas ellas por s¨ª mismas, y por las m¨¢s d¨¦biles. [¡] Adi¨®s, maestro, amigo que la tierra te sea leve. Tuyo, Luca¡±.
Babelia
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