Meditar ¡®online¡¯ frente a un ¡®monet¡¯

Ignacio Mateos (Zaragoza, 1986) estudi¨® un m¨¢ster de arte en el Sotheby?s Institute of Art de Nueva York financiado por una beca de LaCaixa. El proyecto final del m¨¢ster fue Artpath, un curso online y presencial que permite meditar a trav¨¦s de la contemplaci¨®n de obras de arte y que ya comercializa en Estados Unidos. El siguiente paso, por tanto, es natural: exportar Artpath a Espa?a y firmar acuerdos con instituciones y empresas que fomenten la meditaci¨®n propuesta por Mateos entre sus empleados.

¡°Mi m¨¦todo est¨¢ basado en la contemplaci¨®n, no en la concentraci¨®n¡±, explica el fundador de Artpath, ¡°se enfoca al exterior: vas meditando a trav¨¦s de la est¨¦tica, es un sistema basado de alguna forma en los mandalas tibetanos¡±. Por algo m¨¢s de 30 d¨®lares, el curso avanza a trav¨¦s de una serie de cap¨ªtulos que duran 15 minutos. Cada sesi¨®n cuenta con una voz acompa?ada con m¨²sica que gu¨ªa al usuario por el cuadro y solo es posible reproducir un cap¨ªtulo cada d¨ªa. ¡°Es el tiempo ¨®ptimo de meditaci¨®n: 15 minutos cada d¨ªa, el cerebro necesita tiempo para asimilar la informaci¨®n¡±.

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El curso, adem¨¢s, une una selecci¨®n de cuadros muy espec¨ªfica con un tema concreto que permite el desarrollo de la postura, la respiraci¨®n y los diferentes elementos que intervienen durante la meditaci¨®n. Por ejemplo, uno de los lienzos preferidos de Mateos es un cuadro de Claude Monet que representa diferentes tipos de luz en diferentes momentos del d¨ªa, La catedral de Chartres. "He descubierto que los cuadros que mejor funcionan son los que tienen un componente figurativo pero luego te vas de lo figurativo a lo abstracto¡±, cuenta el becario de La Caixa.

A lo largo de los diferentes niveles, la voz que gu¨ªa al espectador desarrolla conceptos como la aceptaci¨®n de la imperfecci¨®n o el wabi-sabi, un tipo de filosof¨ªa japonesa que se basa en aceptar la imperfecci¨®n inspir¨¢ndose en la simpleza de la naturaleza. En este sentido, la experiencia de Ignacio Mateos durante sus 33 a?os de vida re¨²ne el ejercicio de yoga, taichi y varias t¨¦cnicas de meditaci¨®n. Ha sido miembro del templo budista Zen de Nueva York y tambi¨¦n se ha interesado por los ejercicios espirituales de San Ignacio de Loyola, la versi¨®n cat¨®lica de los ejercicios de meditaci¨®n. "He hecho una mezcla en la que sintetizo los elementos en com¨²n que tienen todas estas escuelas de meditaci¨®n y lo he trasladado al arte".

El resultado de la mezcla tiene mucha influencia de diferentes religiones. ¡°Todas las religiones tienen puntos en com¨²n: formas de obtener respuestas acerca de la vida y tambi¨¦n formas de dar paz. Lo que me interesa de la religi¨®n es el car¨¢cter ritual y meditativo y los ejercicios que todas las religiones comparten: postura sim¨¦trica, posici¨®n erguida, ni super relajado ni en tensi¨®n¡­ Todas buscan el equilibrio mediante un rito o una entonaci¨®n en voz alta, como puede ser un mantra o cantos¡±.

El proceso de meditaci¨®n ideado por Mateos integra "de una forma benigna" tecnolog¨ªa y arte: ¡°A veces vemos la tecnolog¨ªa como una amenaza: van a venir los drones y nos van a matar. La tecnolog¨ªa bien usada es favorable para el arte y para la sociedad¡±, opina el empresario, "yo creo que muchos de los montajes que se hacen en Instagram son obras de arte". El meditador entiende Artpath como una forma de higiene digital, de utlizar un ordenador, una tecnolog¨ªa, de una forma beneficiosa que adem¨¢s tiene ventajas f¨ªsicas: "El arte libera dopamina y baja los niveles de cortisol. Es el mejor profesor para la vida".