Los viajeros del tiempo se convierten en refugiados

Pocos hechos han tenido un impacto pol¨ªtico tan grande en Europa en las ¨²ltimas d¨¦cadas como la crisis de los refugiados, que mostr¨®, a la vez, lo peor y lo mejor de las sociedades contempor¨¢neas, la solidaridad de la mayor¨ªa frente al rechazo lleno de prejuicios de una minor¨ªa. Como consecuencia directa de la guerra de Siria, millones de personas se lanzaron en 2015 a las carreteras europeas en busca de un lugar seguro. Muchos murieron intentando llegar durante su traves¨ªa mar¨ªtima. El racismo se parapet¨® detr¨¢s de la idea de diferencia, como si la presencia masiva de musulmanes pudiese afectar los valores europeos cuando, en realidad, la principal diferencia cultural resid¨ªa en que ven¨ªan de un pa¨ªs en guerra y sometido a una dictadura asesina, circunstancias no siempre f¨¢ciles de entender desde la seguridad que otorga la paz. Aquel debate colectivo, todav¨ªa no cerrado (basta con escuchar a los responsables de Vox y de otros partidos ultraderechistas), ha encontrado una ingeniosa y reveladora respuesta en la serie Beforeigners, una producci¨®n noruega de seis cap¨ªtulos que emite actualmente HBO.

?Qu¨¦ ocurrir¨ªa si la entrada masiva de refugiados se produjese dentro del propio pa¨ªs pero desde una distancia remota, si las diferencias culturales no fuesen geogr¨¢ficas sino temporales? Beforeigners arranca cuando, sin mayor explicaci¨®n, comienzan a aparecer en el presente personas que provienen de otras ¨¦pocas, desde habitantes de la prehistoria hasta guerreros vikingos del Medievo ¨Cque trabajan como repartidores en bici¡ªo burgueses del siglo XIX. Los refugiados del pasado emergen en el mar, respirando a duras penas, en una imagen cargada de simbolismo.

Sus creadores son Anne Bjornstad y Eilif Skodvin, responsables de Lilyhammer, una divertida serie de Netflix sobre un mafioso estadounidense que recala en un peque?o pueblo noruego. La serie se articula en torno a un relato policiaco: un inspector del presente, Lars (Nicolai Cleve Broch), trabaja con una polic¨ªa vikinga, Alfhildr (Krista Kosonen, que interpreta al mejor personaje de la serie, un aut¨¦ntico hallazgo), para resolver un asesinato relacionado con los desplazamientos temporales.

Paradojas temporales

La serie juega con todas las paradojas que plantean los viajes en el tiempo; pero el hecho de que se trate de un movimiento masivo ¨Cel presente se llena literalmente de refugiados temporales¨C proporciona una alta densidad pol¨ªtica al asunto (con pintadas contra los visitantes de otras ¨¦pocas incluidas). Al igual que ocurre con la espa?ola El Ministerio del Tiempo, los viajes no se sustentan en efectos especiales y en grandes presupuestos, sino en un ingenio afilado, ¨¢giles toques de humor y una cuidadosa investigaci¨®n.

¡°Todo el universo que creamos es una alegor¨ªa de la crisis de los refugiados y los problemas que plantean las migraciones¡±, explic¨® Bjornstad a la revista Variety. ¡°Como migrante tienes tu propio lenguaje y tu propia identidad y cre¨ªmos que era muy importante que esto quedase reflejado en los personajes¡±. El n¨®rdico antiguo, por ejemplo, est¨¢ muy documentado en las sagas vikingas, pero tuvieron que recurrir a ling¨¹istas para recrear la forma de pronunciarlo, al igual que el acento de los personajes prehist¨®ricos. En cuanto al siglo XIX, como explic¨® uno de los expertos, intentaron que los personajes ¡°no hablasen como escribe Ibsen¡±.

Beforeigners es un c¨®ctel imposible que, sin embargo, funciona y se ha convertido en una de las sorpresas de la temporada. Su mayor logro es utilizar los viajes en el tiempo para ponernos ante un espejo tan realista que al final olvidamos la parte fant¨¢stica de la historia y nos quedamos solo con una sociedad que respira intolerancia ante lo que no conoce y otra que busca una salida solidaria ante unos desplazamientos que nadie puede frenar porque, al final, la historia de la humanidad es el relato de un gran viaje en todos los tiempos y en todos los espacios.