El d¨ªa del libro en M¨¦xico redescubre a la escritora In¨¦s Arredondo
Editores y libreros celebran el nacimiento de Sor Juan In¨¦s con una selecci¨®n de la gran cuentista mexicana del siglo XX
La escritora In¨¦s Arredondo estar¨¢ este martes en las librer¨ªas de M¨¦xico porque sus cuentos han sido los elegidos para regalar a los clientes en el D¨ªa Nacional del Libro. Desde 2008 no se seleccionaba el nombre de una mujer para conmemorar con lecturas el nacimiento de sor Juana In¨¦s de la Cruz, un 12 de noviembre. En 40 a?os, desde que los libreros y editores celebran este d¨ªa, solo cuatro mujeres, consagradas, han tenido acceso a este club: Lourdes Franco, Rosario Castellanos, Elena Poniatowska y la propia Juana In¨¦s, cuya prosa inaugur¨® en 1980 esta tradici¨®n. Para el escritor Jorge Volpi, que prologa este libro, In¨¦s Arredondo es ¡°acaso la mayor cuentista hombre o mujer del siglo XX mexicano¡± y ha sido injustamente opacada en una generaci¨®n en la que apenas destacaban los nombres de sus compa?eros.
In¨¦s Arredondo naci¨® en Culiac¨¢n (Sinaloa) en 1928 y estudio en Ciudad de M¨¦xico Letras Hisp¨¢nicas. Perteneci¨® a la Generaci¨®n Casa del Lago, un grupo de intelectuales que fundaron la edad de oro de las letras mexicanas: Octavio Paz, Carlos Fuentes, Fernando Ben¨ªtez y Tom¨¢s Segovia, con el que se cas¨® y tuvo cuatro hijos (uno malogrado) y con el que mantuvo una p¨¦sima experiencia matrimonial debido a las infidelidades del poeta espa?ol exiliado. A esa lista se sumaron Sergio Pitol, Carlos Monsiv¨¢is, Salvador Elizondo, Jos¨¦ Emilio Pacheco o Juan Garc¨ªa Ponce. ¡°N¨®tese que todos los nombres son indefectiblemente masculinos: las mafias tienden a articularse bajo esta l¨®gica machista, reservando si acaso un lugar marginal a las mujeres¡±, escribe Volpi en su pr¨®logo.
Pero In¨¦s Arredondo merece estar en ese parnaso. Su escritura, ¡°que apenas encuentra parang¨®n¡± en las letras mexicanas ¡°fragua un universo ¨²nico y aut¨®nomo capaces por s¨ª solos de desestabilizar cualquier literatura¡±, sigue Volpi. El peque?o libro en el que se re¨²nen algunos de los m¨¢s grandes cuentos de Arredondo, como La se?al, Opus 123, R¨ªo Subterr¨¢neo o La sunamita.
La gran cuentista mexicana es este a?o la autora que se regala gracias a la cesi¨®n de derechos y la labor desinteresada de todos los que han participado en la edici¨®n de este libro, del que se han impreso 50.000 ejemplares. Entre ellos el editor Joaqu¨ªn D¨ªez-Canedo Flores, quien cierra los relatos con una peque?a biograf¨ªa de Arredondo. ¡°Sus cuentos tienen mucho oficio, no hay un examen psicol¨®gico de los personajes, pero s¨ª un retrato moral y de costumbres de la sociedad mexicana. Ella era una mujer de provincias y eso se refleja en su obra¡±, dice el editor. ¡°La pobre In¨¦s sufri¨® mucho con su matrimonio, viv¨ªa mal, sin dinero, se separ¨®; y finalmente tuvo unos terribles problemas de columna que la llevaron al quir¨®fano varias veces. Su segundo matrimonio fue con su m¨¦dico¡±, dice D¨ªez-Canedo Flores. R¨ªo Subterr¨¢no lo public¨® en su d¨ªa la editorial Joaqu¨ªn Mortiz, que ¨¦l ha dirigido. Y en la actualidad, el Fondo de Cultura Econ¨®mica tiene reunidos todos los cuentos de la autora con un exhaustivo pr¨®logo de Beatriz Espejo.
En solo unas cuantas l¨ªneas, dice Espejo en dicho texto, se hallan "las frases necesarias,el precipicio del pensamiento y el empe?o de que hurguemos dentro de nosotros mismos y enfrentemos pasiones soterradas, la ambig¨¹edad sentimental, las anomal¨ªas... [...] Reclama y encuentra la complicidad de los lectores para comprender enigmas y reacciones que al principio nos dejan perplejos". Cuando Espejo se entrevist¨® con ella, la escritora le confes¨®: "No creo en el feminismo, no existe para m¨ª. A m¨ª me gustar¨ªa estar entre los cuentistas, pero sin distingo de sexo, simplemente con los cuentistas".
Pero Espejo sostiene que en la obra de la culiacanense siempre hay esa "visi¨®n femenina" que hoy tiene ¨¦xito en las librer¨ªas y gracias a la cual se est¨¢n desempolvando grandes nombres de la literatura que quedaron a la sombra. Pocos ignoran en M¨¦xico la poes¨ªa de su primer marido, Tom¨¢s Segovia, pero el nombre de In¨¦s Arredondo est¨¢ vac¨ªo para muchos. "Escribi¨® Mariana, uno de los cuentos? m¨¢s feministas que se han escrito en nuestra literatura", prosigue la tambi¨¦n escritora Beatriz Espejo en el citado pr¨®logo.
In¨¦s Arredondo muri¨® en Ciudad de M¨¦xico hace 30 a?os. En la edici¨®n de obsequio de los libreros y editores sus cuentos podr¨ªan este a?o haber compartido las p¨¢ginas con los de otras autoras, pero alguien sugiri¨® que era merecedora de un volumen solo para ella. El mismo espacio propio del que han gozado los dem¨¢s en estos 40 a?os de celebraci¨®n del libro en M¨¦xico. A las mujeres les sigue costando encontrar un cuarto propio, un libro sin compa?¨ªa.
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