Foster a?ade una segunda galer¨ªa a su ampliaci¨®n del Bellas Artes de Bilbao
El arquitecto brit¨¢nico presenta su proyecto definitivo, que a?ade 2.000 metros cuadrados sobre el plan inicial con el que gan¨® el concurso en julio pasado
Norman Foster ya dej¨® su huella en el subsuelo de Bilbao, y ahora tambi¨¦n en la superficie. El arquitecto brit¨¢nico, que hace casi tres d¨¦cadas mejor¨® la movilidad de la ciudad con su proyecto del metro, present¨® ayer su proyecto definitivo para ampliar el Museo de Bellas Artes, cuyo concurso gan¨® en julio con un plan titulado Agravitas y firmado con el estudio del proyectista vasco Luis Mar¨ªa Uriarte.
La nueva propuesta implica una ganancia de 2.000 metros cuadrados sobre la primera, al dise?ar una segunda galer¨ªa en el sombrero con el que Foster cubrir¨¢ los dos edificios de la pinacoteca: el antiguo, de 1945, cuya entrada original queda restituida con la ampliaci¨®n, y el nuevo, de 1970. Esa inesperada superficie ganada al primer proyecto permitir¨¢ la reubicaci¨®n de espacios de oficinas (actualmente en el s¨®tano) y del ¨¢rea de educaci¨®n y evitar¨¢ la construcci¨®n de un edificio anexo. Agravitas tambi¨¦n apuesta por ensanchar el parque de Do?a Casilda, que abraza al Bellas Artes, hasta la plaza Euskadi, en la que actualmente hay una rotonda de copioso tr¨¢fico, que fluye a los pies de la emblem¨¢tica Torre Iberdrola.
El nuevo sombrero del Bellas Artes ha ganado una planta de menor altura desde que el proyecto inicial se adjudicara el concurso en julio. Ahora tendr¨¢ dos niveles acristalados con un aspecto claro que ¡°utilizar¨¢ para las partes visibles una piedra blanquecina, o composite, o cristal blanco o quiz¨¢s un vidrio trasl¨²cido para capturar la luz del norte¡±, explic¨® ayer Foster. El premio Pritzker 1999, autor del Reichstag en Berl¨ªn, el gran patio del British Museum de Londres o el Museo de Bellas Artes de Boston, explic¨® que entre la parte m¨¢s alta del actual museo y la parte expositiva prevista inicialmente en la ampliaci¨®n, habr¨¢ un nuevo nivel que permitir¨¢ subir las oficinas y los servicios de la parte administrativa.
Con ese traslado la instituci¨®n podr¨¢ utilizar el espacio liberado en el s¨®tano, unos mil metros cuadrados, como almac¨¦n para el dep¨®sito de obras, sin tener que buscar o construir otro edificio en otro lugar de la ciudad. ¡°Todo el conjunto quedar¨¢ m¨¢s integrado, hacia dentro y hacia fuera¡±, describi¨® Foster. Las reformas permitir¨¢n al museo bilba¨ªno ganar casi 5.000 metros cuadrados para exposiciones.
El director de la instituci¨®n, Miguel Zugaza, cree que la ampliaci¨®n va a reforzar la identidad de un museo que cumple 111 a?os, y va a darle un aspecto futurista con esa nueva plataforma, que aterrizar¨¢ sobre la estructura original en 2023.
El proyecto adem¨¢s ahonda en criterios de sostenibilidad al incorporar placas solares y sistemas de captaci¨®n de la luz natural. Uriarte y el prestigioso arquitecto brit¨¢nico, al que tambi¨¦n se encarg¨® la ampliaci¨®n del Museo del Prado, resultaron ganadores de entre una selecci¨®n final en la que tambi¨¦n figuraban los arquitectos japoneses Sanaa, premios Pritzker 2010, y los profesionales espa?oles Nieto y Sobejano, o Rafael Moneo.
Foster comenz¨® su explicaci¨®n en Bilbao poniendo el foco en una de las obras del museo que le sirvi¨® de inspiraci¨®n, El puente de Burce?a, de Aurelio Arteta. Explic¨® que esa obra, como la ampliaci¨®n del museo, en el fondo proponen lo mismo: comprender el pasado como puente para poder construir el futuro.
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