Se env¨ªan libros a domicilio hasta que el ¡®stock¡¯ aguante

El cierre de las tiendas de sectores no esenciales y el confinamiento de personas por los efectos del coronavirus se prorrogar¨¢, pero pertrecharse con libros adquiridos online y entregados en casa seguir¨¢ siendo posible. Al menos, hasta finales de mayo y mientras haya stocks en los almacenes de grandes distribuidores, seg¨²n prev¨¦n fuentes del sector.

El resquicio que ha hallado el libro para sobrevivir en tiempos de restricciones comerciales, pese a no ser declarado producto de primera necesidad como gustar¨ªa en el sector, est¨¢ en un ya famoso en el mundillo editorial punto 25 del anexo de servicios esenciales que el Gobierno dictamin¨® el 29 de marzo. Permitirse en ese apartado el comercio electr¨®nico, telef¨®nico y por correspondencia conlleva asociado el servicio log¨ªstico y de transporte que lo haga posible.

Seg¨²n c¨¢lculos de la Agrupaci¨®n de Distribuidores de Libros y Ediciones (Adile), dos terceras partes del sector han suspendido su actividad ante la imposibilidad de servir a las librer¨ªas f¨ªsicas, su principal fuente de ingresos: es la decisi¨®n de notables firmas del sector como UDL y Les Punxes. Un 30% de las empresas, sin embargo, mantienen servicios m¨ªnimos ¡°para los pedidos online, mayormente de empresas con ese canal muy potente, como Amazon, FNAC, Casa del Libro o El Corte Ingl¨¦s, y de los que ya son proveedores habituales; pero, s¨®lo pueden servir libros identificados como compras por internet¡±, aclara un portavoz de Adile. Las estimaciones son que en Espa?a hay algo m¨¢s de 200 librer¨ªas que venden ahora libros online.

¡°Pensamos que tendr¨ªamos menos demanda, pero es que el electr¨®nico es el ¨²nico canal que queda ahora para los libros¡±, apunta Daniel Oropesa, director general de Logista Libros, participada al 50% por Planeta, de la que reparte sus sellos. Desde el confinamiento, sirven para e-commerce ¡°unos 6.000 libros diarios¡±, un 40% m¨¢s, en buena parte para Casa del Libro, hiperactiva en esa vertiente.

¡°En nuestro caso, hemos multiplicado por tres¡±, asegura un portavoz de la gallega Arnoia, distribuidora particular en tanto las plataformas digitales trabajan a trav¨¦s de ella. En Libelista, red de venta digital de 112 librer¨ªas independientes de Espa?a, han doblado actividad y si bien ofrecen guardar el libro en la librer¨ªa de proximidad hasta que amaine o llevarlo a casa, esa posibilidad ahora ¡°es la escogida mayormente¡±. Desde Amazon admiten que sus ventas ¡°han aumentado estas semanas¡±, aunque no ofrecen cifras, informa Tomasso Koch.

La actividad genera que las inevitables reducciones de personal sean relativas en esos departamentos. As¨ª, si bien solo es un 15% de las 320 personas de la plantilla, son 45 las movilizadas en Logista Libros, mientras que en Arnoia la reducci¨®n en el ¨¢rea de pedidos y almac¨¦n ha sido s¨®lo de un 25%; en Libelista, incluso, se han incrementado: de tres a cuatro.

La aplicaci¨®n de medidas de seguridad (¡°por prevenci¨®n, en un pasillo no dejamos que haya dos personas¡±, ilustra Oropesa) y el menor personal habr¨ªa repercutido en ligeros retrasos en las entregas: 48 horas m¨¢s en Libelista o el descenso de ¡°un 96% al 85%¡± en el cumplimiento de pedidos en 24 horas en Logista Libros.

En cualquier caso, los n¨²meros no acaban de cuadrar. ¡°Normalmente, se gestionan m¨¢s de 150 pedidos diarios y desde lo del coronavirus se hacen tres o cuatro¡±, cifran en Adile la media. ¡°Las ventas por e-commerce son un 15-20%; no compensa, pero no puedes cortar el servicio en las plataformas digitales: si dejas de estar, para tu posicionamiento tiene un coste muy alto¡±, avisan en Arnoia. ¡°El 85% del negocio viene de la librer¨ªa f¨ªsica y el 15%, del online, que hemos aumentado, pero no compensa¡±, dice Blanca Asuero, directora de m¨¢rketing de Casa del Libro, con 48 tiendas en Espa?a, que afrontan un ERTE que afecta a 564 trabajadores.

Directo al domicilio

Por ahora, con tres empresas de mensajer¨ªa que cumplen los requisitos de seguridad (¡°como marca no nos interesa otra cosa¡±) pueden abastecer de cualquier t¨ªtulo, ¡°tenemos un stock de fondo sano, para dos meses y, como dinamizadores culturales, proponemos sobre lo que tenemos¡±. Pero la semana pasada detect¨® los primeros problemas con t¨ªtulos de editoriales peque?as. Y es que, con el confinamiento, los distribuidores no pueden reabastecerse en las editoriales, si bien todos los consultados se mueven con grandes reservas y entre las 200.000 y las 300.000 referencias. ¡°Pero cuando se acabe lo que tengamos de un t¨ªtulo, se acaba¡±, admiten.

Para mitigar eso, Penguin Random House Grupo Editorial, que hasta ahora ten¨ªa su distribuidora cerrada, repartir¨¢ aquellos pedidos de libros de sus 43 sellos que los compradores est¨¦n haciendo estos d¨ªas a las librer¨ªas, los tengan ¨¦stas o no entre sus anaqueles. En su pol¨ªtica de apoyo a las librer¨ªas, tambi¨¦n destinar¨¢ el 10% de las ventas que realiza desde ayer desde su portal megustaleer.com a cupones de descuento para cuando las tiendas reabran.

¡°Hay stock, y aguantaremos, en general, incluso un tir¨®n por el D¨ªa del Libro, pero los m¨¢rgenes en el servicio digital no son grandes; si esto se alarga, ir m¨¢s all¨¢ de mayo no es rentable¡±, concluye Oropesa como reflexi¨®n de un sector que conf¨ªa en que la semana pr¨®xima se vuelva a la situaci¨®n anterior al 30 de marzo, tras revertirse el decreto que paralizaba toda actividad no esencial. As¨ª, podr¨ªan servir pedidos a los ¡°poqu¨ªsimos¡± puntos que sigan vendiendo libros, no solo las de e-commerce. ¡°Ser¨¢ una actividad m¨ªnima, en todo caso¡±, admite.