Una ¡®traviata¡¯ sin abrazos para reabrir el Teatro Real
El coliseo madrile?o ha invertido 340.000 euros en medidas de seguridad para reanudar sus funciones el 1 de julio
El 23 de febrero de 2020 qued¨® grabado como una fecha nefasta en la memoria del director de orquesta Nicola Luisotti. Estaba en su camerino de la Scala de Mil¨¢n prepar¨¢ndose para dirigir Il trovatore cuando lleg¨® una orden del Gobierno italiano que obligaba a cancelar la funci¨®n y cerrar el teatro para frenar la expansi¨®n del coronavirus. El p¨²blico estaba ya entrando al patio de butacas y se form¨® un gran alboroto. ¡°Fue una de las tardes m¨¢s tristes de mi vida. Era el primer gran teatro de ¨®pera del mundo que cerraba. As¨ª que participar ahora en el primer estreno despu¨¦s de la pandemia es un regalo inmenso. De la mayor pena a la mayor alegr¨ªa¡±, recordaba emocionado el maestro el jueves pasado en un breve discurso que improvis¨® para los m¨²sicos del Teatro Real de Madrid.
Era el primer ensayo de La traviata, la ¨®pera de Verdi con la que el teatro madrile?o reabrir¨¢ sus puertas al p¨²blico el 1 de julio despu¨¦s de cuatro meses de cierre, por lo que muchos trabajadores del coliseo se colaron en la sala de la orquesta para presenciar ese peque?o momento hist¨®rico. Cuando Luisotti levant¨® la batuta y se escucharon los primeros compases de la popular¨ªsima obertura de la obra, pocos pudieron contener las l¨¢grimas mientras tarareaban la melod¨ªa. Nunca antes hab¨ªa habido un silencio tan prolongado en ese lugar.
Tanta fue la emoci¨®n que desat¨® en la sala de ensayo la historia de Luisotti, que el maestro volvi¨® a contarla este lunes con el mismo entusiasmo durante la presentaci¨®n de la producci¨®n a la prensa. No ser¨¢ La traviata que originalmente se hab¨ªa programado para estas fechas, la c¨¦lebre puesta en escena que Willy Decker estren¨® en Salzburgo en 2005, sino una versi¨®n de concierto semiescenificada en la que no habr¨¢ contacto entre los cantantes, que mantendr¨¢n siempre una distancia de seguridad de dos metros. ¡°La m¨²sica llenar¨¢ esa distancia. Y no se producir¨¢ el esperado abrazo de los amantes en la ¨²ltima escena, pero teniendo en cuenta que la protagonista muere de tuberculosis, la ausencia de ese abrazo en este momento que vivimos quiz¨¢ sea precisamente m¨¢s emocionante. Ahora sabemos lo que significa no poder abrazar a un ser querido enfermo¡±, explic¨® Leo Castaldi, que fue el director asistente de La traviata de Decker y al que se ha encargado ahora esta semiescenificaci¨®n.
Castaldi no ha querido limitarse a ¡°coreografiar¡± los movimientos de los int¨¦rpretes, sino que ha intentado crear un concepto esc¨¦nico partiendo de las propias medidas de seguridad. ¡°He pensado en los protocolos no como algo restrictivo, sino como un ingrediente m¨¢s de la puesta en escena. He ideado un escenario reticular, dividido en cuadr¨ªculas de dos metros para cada miembro del coro [habr¨¢ 51] y algo m¨¢s grandes para los solistas¡±, explic¨®.
A falta de escenograf¨ªa, todo el protagonismo recaer¨¢ en la m¨²sica y las voces de los cuatro repartos distintos que interpretar¨¢n las 27 funciones previstas entre el 1 y el 29 de julio. Se alternar¨¢n cinco traviatas (Marina Rebeka, Ruth Iniesta, Ekaterina Bakanova, Lana Kos y Lisette Oropesa) y cuatro alfredos (Michael Fabiano, Ivan Magr¨¬, Matthew Polenzani e Ismael Jordi). ¡°La m¨²sica nos ha ayudado a soportar el aislamiento. Ahora nos ayudar¨¢ tambi¨¦n a vencer el miedo a volver a estar juntos¡±, proclam¨® Luisotti, que tambi¨¦n se alternar¨¢ en la direcci¨®n musical con el maestro Luis M¨¦ndez Ch¨¢vez.
Ese es el empe?o en el que de hecho lleva embarcado el Teatro Real desde el pasado 11 de mayo, cuando la direcci¨®n del coliseo organiz¨® el primer grupo de trabajo para adecuar el edificio a la ¡°nueva normalidad¡± y animar al p¨²blico a volver sin temor a los patios de butacas. ¡°Podemos y debemos abrir el camino a los dem¨¢s¡±, dijo el director art¨ªstico del coliseo, Joan Matabosch.
El acondicionamiento ha supuesto una inversi¨®n de 340.000 euros. Entre otras cosas, se han instalado alfombrillas desinfectantes y controles de temperatura en los accesos, aparatos de luz ultravioleta para desinfectar los trajes cada d¨ªa en los camerinos, ocho nuevos aseos, ¨¢reas de restauraci¨®n en todas las plantas, lectores de entradas sin contacto y sistemas de lectura digital de programas de manos en cada butaca. El teatro reabrir¨¢ el 1 de julio con el 50% del aforo (869 localidades) y estudia ampliarlo al 75% el 6 de julio.
Tambi¨¦n se ha estudiado mucho la ubicaci¨®n de la orquesta. El foso del Teatro Real se agranda o se achica seg¨²n el n¨²mero de m¨²sicos que requiera cada obra. En condiciones normales, La traviata necesitar¨ªa la m¨¢s peque?a, pero se utilizar¨¢ la m¨¢s grande (140 metros cuadrados) para mantener una distancia de metro y medio entre los 56 m¨²sicos que tocar¨¢n, todos con mascarilla y atril propio. Se han instalado paneles de metacrilato delante del director y de los instrumentistas de viento.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.