¡°La cocina siempre me ha parecido un reino de misterios¡±
Vicente Molina Foix se estrena como autor de audiolibro con 'Las hermanas Gourmet', una intriga sobre el arte de contar historias
Vicente Molina Foix (Elche, 73 a?os) no ha o¨ªdo jam¨¢s un audiolibro, porque, dice, ¡°soy de la vieja guardia¡±, y prefiere leer, pero no dud¨® un segundo cuando le propusieron escribir una novela seriada ¡ªel equivalente a una serie de televisi¨®n que solo se pudiese escuchar¡ªque acabar¨ªa convirti¨¦ndose en un ejemplar f¨ªsico, pero que primero se estrenar¨ªa en la plataforma Storytel. Aprovech¨® la oportunidad para escapar de la narrativa documental de sus ¨²ltimos trabajos ¡ªdesde El abrecartas todo lo que escribe part¨ªa de lo real y ten¨ªa cierta intenci¨®n de capturar un momento, por m¨¢s que deformado por la ficci¨®n¡ª y jugar ¡°con viejas recetas¡± reelaboradas para la ocasi¨®n por el chef en que se erigi¨® ¨¦l mismo. As¨ª nacieron Las hermanas Gourmet.
¡°Las hermanas Gourmet son cuatro. Y son cocineras. Tienen un restaurante excelent¨ªsimo, al que acuden a comer personalidades de todo el mundo. ?Peregrinan para comer all¨ª! Sus platos tienen un ingrediente secreto que los hace ¨²nicos, pero las ¨²nicas en realidad son ellas. Y las historias que cuentan¡±, dice el escritor, que ha dado rienda suelta a su pasi¨®n por la f¨¢bula en una novela que es como una mu?eca rusa. ¡°Hay historias dentro de historias¡±, y estas adoptan todo tipo de formas, incluido cierto coqueteo con el fant¨¢stico ¡ªno en vano, hay una casa encantada¡ª, que tiene mucho que ver con eso de las viejas recetas reelaboradas. ¡°La cocinera es en realidad el narrador, el contador de historias, porque los platos tambi¨¦n pueden ser historias¡±, asegura. El texto est¨¢ narrado en el audiolibro por una voz femenina.
Es la primera vez que escribo desde el punto de vista de una mujer y que m¨¢s que una narradora omnisciente es una narradora ir¨®nica
Es decir, Molina Foix equipara al escritor con el cocinero, y a la novela con el plato al que este est¨¢ dando forma. Los ingredientes son las historias, y los personajes que contiene. ¡°De lo que m¨¢s orgulloso estoy es de la voz de la narradora. Es la primera vez que escribo desde el punto de vista de una mujer y que m¨¢s que una narradora omnisciente es una narradora ir¨®nica. Podr¨ªa decirse que sin ella, la novela no existir¨ªa, que compuse su voz para que me contara la historia¡±, argumenta el escritor, que nunca se pone a escribir si antes no tiene el t¨ªtulo de la novela en cuesti¨®n. ¡°Ese podr¨ªa ser uno de los secretos de mi escritura¡±, bromea, porque, dice, la historia es una historia de secretos y ¡°la cocina siempre me ha parecido un reino de misterios¡±.
¡°Nunca he sido buen cocinero, aunque confieso que el confinamiento me ha obligado a cocinar, y he descubierto que todo plato tiene siempre un secreto. Porque pueden darte la receta, pero siempre hay algo que el cocinero a?ade y que lo hace especial. Por ejemplo, una amiga hace una sopa de pescado buen¨ªsima que no ser¨ªa la misma sin el eneldo que le a?ade¡±, explica. Fascinado por esa idea, la de c¨®mo el secreto puede acabar convirti¨¦ndose en el centro de la trama ¡ªsi la analog¨ªa entre el plato y la novela lo permite¡ª, meti¨® en la vida de esas cuatro hermanas a Max, un apuesto forastero que ha llegado al restaurante con una misi¨®n, ¡°de la que no se puede hablar para evitar spoilers¡±.
La pandemia empez¨® para m¨ª cuando recib¨ª la primera cancelaci¨®n de una presentaci¨®n. De repente, despu¨¦s de aquello, todo empez¨® a desaparecer
?Y ha cambiado el formato la escritura de Molina Foix? ¡°No, en absoluto. Mi escritura es la misma. S¨ª que he tenido en cuenta un par de consejos para que pudiese leerse, y escucharse, como una historia oral, pero no es nada que yo no habr¨ªa escrito. La prueba est¨¢ en que se publicar¨¢ como novela tal cual. Pero lo interesante es que ser¨¢ una cosa muy distinta. Ser¨¢ a la vez dos libros, y eso me da morbo, y todo lo que da morbo es bueno¡±, dice, y al tel¨¦fono suena feliz, aunque echa de menos demasiadas cosas en esta nueva normalidad. El cine, para empezar. Pero tambi¨¦n todo aquello que forma parte de la literatura y que no tiene que ver con estar encerrado escribiendo.
¡°La pandemia empez¨® para m¨ª cuando recib¨ª la primera cancelaci¨®n de una presentaci¨®n. Era un libro de cartas de Salinas que me apetec¨ªa much¨ªsimo. De repente, despu¨¦s de aquello, todo empez¨® a desaparecer¡±, dice. Y a¨²n no ha reaparecido, al menos, no en la manera en que le gustar¨ªa. ?Y alg¨²n otro secreto de cocina de escritura, ya que la novela juega con esa idea? ¡°Dos. El primero es que, desde hace 40 a?os, escribo con ruido de fondo. No un ruido cualquiera, m¨²sica mala, del mont¨®n, radiof¨®rmula. Es una man¨ªa que me viene de mi ¨¦poca en Londres, cuando empec¨¦ a escribir. Y el segundo es no acabar el d¨ªa rematando la faena, dejar lo que est¨¢s haciendo a punto de caramelo, para querer seguir al d¨ªa siguiente¡±.
Babelia
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