H. P. Lovecraft: horror c¨®smico, pulpos... y poes¨ªa
La editorial Pre-Textos publica la poes¨ªa del maestro de la fantas¨ªa oscura
Hay un escritor denostado por los c¨ªrculos acad¨¦micos y, sin embargo, aupado constantemente a los altares de la cultura popular. Un creador de dioses primigenios, criaturas informes que arrastran a la locura a quienes las contemplan y seres interdimensionales capaces de colonizar la imaginaci¨®n de los lectores. Por no hablar del (impronunciable) Cthulhu, coruscante mezcla de pulpo y drag¨®n que, sumido en un profundo letargo en el fondo del Pac¨ªfico, espera su despertar. Hablamos de Howard Phillips Lovecraft (Providence, EE UU, 1890-1937), amo y se?or del horror c¨®smico, del que Pre-Textos, una de las editoriales de poes¨ªa en espa?ol m¨¢s importantes, se atreve a publicar Un tenue ¨¦ter indeterminado, un compendio de su poes¨ªa, un g¨¦nero al que no se le suele asociar.
¡°Se le tiene encasillado como algo para adolescentes¡±, se?ala Juan Andr¨¦s Garc¨ªa Rom¨¢n, traductor y prologuista del libro de Pre-Textos, que contesta por tel¨¦fono desde Aquisgr¨¢n, donde imparte clases. ¡°No se le dedica suficiente atenci¨®n, porque, en general, el mundo acad¨¦mico es muy serio. Especialmente en Espa?a¡±. Un ejemplo de c¨®mo la cr¨ªtica cl¨¢sica ha denostado a Lovecraft lo tenemos en Jorge Luis Borges. Lector exquisito, el argentino no pudo escapar de su influencia y dedic¨®, elegantemente, su cuento There Are More Things ¡°a la memoria de Howard P. Lovecraft¡±. Menos elegantemente, en el ep¨ªlogo del libro de cuentos que lo contiene, dice: ¡°El destino que, seg¨²n es fama, es inescrutable, no me dej¨® en paz hasta que perpetr¨¦ un cuento p¨®stumo de Lovecraft, escritor que siempre he juzgado un parodista involuntario de Poe. Acab¨¦ por ceder; el lamentable fruto se titula There Are More Things¡±.
En algo dio en el clavo Borges, y es que Poe, Edgar Allan Poe, pasa por ser la m¨¢s decisiva influencia que tuvo Lovecraft en vida. A su influjo debemos el texto m¨¢s amplio de Lovecraft: En las monta?as de la locura (1931), claro homenaje a Las aventuras de Arthur Gordon Pym, ¨²nica novela de Poe (1838). Adem¨¢s, de Poe tambi¨¦n adquiri¨® la forma de trabajar: casi siempre relatos breves (68 de Poe por 80 de Lovecraft), una novela y, claro, poemas. Garc¨ªa Rom¨¢n contextualiza tambi¨¦n la importancia de la poes¨ªa de Lovecraft: ¡°No digo que sea un gran poeta, pero s¨ª es alguien interesante¡±, cuenta. ¡°Su poes¨ªa es un poco anacr¨®nica. El escrib¨ªa, no ya como Poe, sino como los cl¨¢sicos del S.VXII. Pero su trabajo tiene fuerza y, claro, a nivel biogr¨¢fico hay mucho inter¨¦s. Siempre volvemos a la figura de alguien que, al final, intent¨® toda la vida ser poeta¡±. Cada a?o, en el l¨¢nguido y oto?al resplandor / los p¨¢jaros se lanzan sobre un oc¨¦ano yermo; / qu¨¦ ch¨¢chara levantan, con qu¨¦ festiva urgencia / ponen rumbo a una tierra que hay grabada en su entra?a, leemos en Nostalgia, uno de los poemas preferidos de Garc¨ªa Rom¨¢n, que este a?o publicar¨¢, tambi¨¦n con Pre-Textos, una antolog¨ªa de su propia obra.
Por mucho que se le discutan m¨¦ritos literarios, el caso es que se le rescata. ¡°S¨ª, pero desde la cultura popular¡±, especifica Garc¨ªa Rom¨¢n. En ese terreno, el de la cultura popular, s¨ª que la presencia del de Providence es constante. Desde su disc¨ªpulo Sthephen King a Guillermo del Toro (que no ha podido a¨²n lograr su obsesi¨®n de adaptar En las monta?as de la locura, pero cuya oscarizada La forma del agua es puro folclore lovecraftiano), pasando por la propia serie Chern¨®bil (que encara la amenaza radiactiva con los mecanismos ac¨²sticos, sugerentes y claustrof¨®bicos del horror c¨®smico lovecraftiano), la sombra del creador de los Mitos de Cthulhu es inabarcable. Creadores de c¨®mic como Allam Moore y grupos como Metallica o Iron Maiden tambi¨¦n se han rendido a su influjo. Y para ver su vigencia en la juventud de hoy, basta con darse una vuelta por Youtube.
?Y a qu¨¦ se debe esa presencia constante en la cultura popular? ¡°Pues a que sus relatos son muy efectivos¡±, cuenta Garc¨ªa Rom¨¢n, que casi entre risas deja una frase para la posteridad: ¡°Es que una cosa es una frase y otra cosa es un pulpo¡±. Y es que la imagen de un pulpo tiene algo, claro, de lo que no se puede escapar con facilidad. ¡°Aun as¨ª, es palpable que sus relatos no son redondos. Era alguien que experimentaba constantemente. Para entendernos, no es Poe. Sinceramente, algunos intentos no le salen, y a veces hasta da un poco de verg¨¹enza ajena leer tal o cual descripci¨®n¡±.
Tenemos entonces un escritor con imaginaci¨®n y rigor, pero que no acaba de dar en el clavo. Entonces, ?d¨®nde est¨¢ el inter¨¦s que despierta H. P. Lovecraft? ¡°Pues la clave est¨¢ en que a veces s¨ª le sale¡±, tercia Garc¨ªa Rom¨¢n, que cita como relatos que s¨ª le salieron El color venido del espacio, La sombra sobre Ishmouth o El Horror de Dunwich. ¡°Ah¨ª el invento le funciona, y es inolvidable. En ellos encaja perfectamente la tesis central de su obra: que el hombre es un residuo en el cosmos, que hay fuerzas m¨¢s potentes que ¨¦l y que, en el fondo, pinta m¨¢s bien poco¡±. Una tesis, destaca Garc¨ªa Rom¨¢n, que en tiempos de conciencia clim¨¢tica y amenazas v¨ªricas cobra m¨¢s fuerza que nunca.
Profeta de la insignificancia humana, como es llamado en el pr¨®logo del libro, Garc¨ªa Rom¨¢n da por ¨²ltimo una de las claves tonales de la poes¨ªa lovecraftiana: ¡°Los poemas muestran un autor de madurez. Menos pesimista¡±. En suma: ¡°Si lovecraft entreabri¨® una puerta a la esperanza, lo hizo desde sus versos¡±. Que no se entere Cthulhu.
Busca online 'Un tenue ¨¦ter indeterminado'
Autor: H. P. Lovecraft
Traductor:?Juan Andr¨¦s Garc¨ªa Rom¨¢n.
Editorial: Pre-Textos, 2019.
Formato: tapa blanda?(118 p¨¢ginas).
Consigue el libro en tu librer¨ªa m¨¢s cercana
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.