Buenos Aires, teatro a cielo abierto

El teatro puede sorprender esta semana a quienes paseen por la capital argentina desde el balc¨®n de un museo, en la parada del subterr¨¢neo, en lo alto de una torre o por el parque. El Festival Internacional de Buenos Aires (FIBA) ha redoblado la apuesta de 2019 para convertir la ciudad en un escenario a cielo abierto en pleno verano austral. Participan m¨¢s de 2.800 artistas en 530 espect¨¢culos en un centenar de sedes lo largo de diez d¨ªas.

"El a?o pasado el ¨¦xito fue tan enorme que se tom¨® la decisi¨®n de volverlo anual. El objetivo es salir a tomar la ciudad como escenario y ofrecer propuestas en el espacio p¨²blico", cuenta Federico Iraz¨¢bal, el director art¨ªstico del FIBA. "Tenemos una nueva secci¨®n que es teatro de frontera en la que tomamos tres obras de Dennis Smith ¡ªNegra, Boyscout y Los abrazos huecos¡ª, para sacarlas de las salas y montarlas en otros espacios: los bosques de Palermo, un Starbucks y un local de reparto de mensajer¨ªa", contin¨²a. Juan Coulasso invit¨® a una caminata por el cementerio de Chacarita en Una obra m¨¢s real que la del mundo, y con Barroco en Barracas. Las novias del templo escondido se intervino el Complejo Hist¨®rico Santa Felicitas, con direcci¨®n de Andrea Castelli.

La edici¨®n 2020 qued¨® inaugurada el pasado jueves con El p¨²blico, una obra de Mariano Pensotti que invita a preguntarse qui¨¦nes son las personas que van a ver espect¨¢culos teatrales y en qu¨¦ medida la experiencia afecta sus vidas. El p¨²blico incluye una pel¨ªcula en la que los espectadores ficticios son algunos de los int¨¦rpretes m¨¢s reconocidos de la cartelera independiente argentina, como Susana Pamp¨ªn, Pilar Gamboa, Diego Vel¨¢zquez, Lorena Vega y Juan Minuj¨ªn, entre otros. Y transforma a los espectadores reales en protagonistas: los obliga a dejar la sala de teatro y salir a observar la ciudad mientras rememoran la crisis de 2001, momento clave de la historia reciente de Argentina en el que est¨¢ ambientada la obra. Minutos despu¨¦s, el festival continuaba por el barrio hist¨®rico de San Telmo, con una fiesta callejera encabezada por el grupo de ritmos caribe?os y boleros Los Amados.

El auge del feminismo y las teor¨ªas de g¨¦nero en los ¨²ltimos a?os han saltado de los libros a los escenarios para convertirse en el coraz¨®n de este FIBA. La aplaudida Petr¨®leo, la ¨²ltima obra de la compa?¨ªa Piel de Lava, sigue en cartelera mientras se le suman por unos d¨ªas espect¨¢culos llegados desde el exterior. MDSLX, de los italianos Mjotus, es un himno lis¨¦rgico a la mezcla de g¨¦neros a partir de la exploraci¨®n identitaria de una persona intersex. Bajo la direcci¨®n de la uruguaya Marianella Morena Naturaleza trans expone los testimonios de tres transexuales pobres nacidas en un pueblo fronterizo del norte de Uruguay en el que, al cruzar una calle, se llega a Brasil. Desde Colombia llega Yo (no) estoy loca, de Fabio Rubiano Orjuela, un unipersonal que bebe de la tradicional descalificaci¨®n de las voces femeninas que no acatan imposiciones sociales.

Teatro y ambiente ha sido otro de los ejes de este a?o, con el que reflexionar sobre las consecuencias de los festivales en el cambio clim¨¢tico y la contaminaci¨®n planetaria. El franc¨¦s J¨¦r?me Bel, creador de Gala, incluy¨® este a?o Buenos Aires en los montajes que desarrolla por distintas ciudades con directores residentes para evitar tomar aviones. En Teatro y accesibilidad destac¨® la escocesa Claire Cunningham, con su obra de danza apoyada en muletas Give me a reason to live, a la que acompa?¨® con una conferencia y un taller.

El festival porte?o cerrar¨¢ este s¨¢bado con una marat¨®n de artes esc¨¦nicas en el Abasto, uno de los barrios m¨¢s teatrales de Buenos Aires. Salas, bares, peluqueri?as, museos, casonas, espacios culturales y balcones sera?n escenario de una noche llena de mu?sica, artes visuales, danza, teatro y performances.