Jennifer Lopez y Shakira hacen una exhibici¨®n de poder latino ante 100 millones de estadounidenses

Fueron 14 minutos de ¡°puro furor¡±, seg¨²n la cr¨ªtica de Variety. ¡°Uno de los espect¨¢culos con m¨¢s energ¨ªa y m¨¢s entretenidos de la Super Bowl en a?os¡±, escribi¨® The Hollywood Reporter. ¡°El glorioso sonido pol¨ªglota de Am¨¦rica en 2020¡±, dec¨ªa el cr¨ªtico de Los Angeles Times. ¡°Grandioso¡±, dec¨ªa Rolling Stone. El arrollador espect¨¢culo de Jennifer Lopez y Shakira este domingo en la Super Bowl ha generado mayor impacto en la opini¨®n p¨²blica de Estados Unidos que la victoria de los Kansas City Chiefs sobre los San Francisco 49ers. Por primera vez, dos artistas latinas tuvieron el escenario del acontecimiento televisivo del a?o para ellas solas. Lo que vieron 102 millones de norteamericanos no fue una rareza de minor¨ªas, sino una acertada representaci¨®n de la realidad de su propio pa¨ªs, en un momento adem¨¢s de especial necesidad para los latinos.

Con el paso de las horas, la calificaci¨®n art¨ªstica (Shakira y Lopez se repartieron el tiempo a partes iguales e hicieron un popurr¨ª de sus canciones m¨¢s conocidas) comenz¨® a dar paso a otro tipo de detalles. El ¨¦xito de Lopez Let¡¯s get loud (hagamos ruido, en traducci¨®n libre) lo comenz¨® a cantar su hija Emme, de 11 a?os. Shakira tocaba la bater¨ªa. Entonces Lopez apareci¨® con una capa que ten¨ªa las banderas de Puerto Rico y EE UU y grit¨®, ¡°?latinos!¡±. La canci¨®n ya ten¨ªa otro significado en ese momento. Por si alguien no lo estaba pillando, Emme empez¨® a cantar Born in the USA, de Bruce Springsteen.

Las personas de herencia hispana en Estados Unidos suman 50 millones de personas y est¨¢n alcanzando sus mayores hitos en el momento de mayor reacci¨®n del Estados Unidos conservador contra esta comunidad. La elecci¨®n de Donald Trump como presidente es quiz¨¢ la mayor expresi¨®n de desprecio hacia los hijos y nietos de inmigrantes latinoamericanos en d¨¦cadas. Trump no ha dejado de hacer evidente esa tensi¨®n cada d¨ªa de su presidencia. Al mismo tiempo, la m¨²sica en espa?ol triunfa entre los j¨®venes, los directores mexicanos arrasan en los Oscar y la estrella pol¨ªtica del momento es una joven congresista de la misma cultura neoyorican que Jennifer Lopez.

Ese Let¡¯s get loud que queda para la historia de la televisi¨®n llega adem¨¢s en plena campa?a de movilizaci¨®n del voto latino para las elecciones de noviembre. Los n¨²meros dicen desde hace a?os que los latinos son un grupo de votantes que por s¨ª solo puede decidir elecciones. Abandonados por los republicanos en un tema muy sensible como la inmigraci¨®n, que afecta a sus familias y amigos, los votantes latinos favorecen a los dem¨®cratas. Sin embargo, la falta de movilizaci¨®n es una fuente constante de frustraci¨®n de los estrategas pol¨ªticos. Este es el a?o en el que eso tiene que cambiar.

Actuaci¨®n de JLo y Shakira en la Super Bowl

¡°Que dos latinas hagan esto en este pa¨ªs y en este momento, nos da mucho poder¡±, dec¨ªa Lopez en una rueda de prensa de presentaci¨®n del show. ¡°Estoy muy orgullosa de ayudar a establecer ese mensaje y hacerlo avanzar¡±. Shakira a?adi¨® que ¡°es un momento muy importante para la comunidad latina en este pa¨ªs¡±. ¡°Creo que la Super Bowl es un evento muy americano, lo m¨¢s americano que hay. Es un gusto ver que va a ser un recordatorio de la herencia de este pa¨ªs, que es una herencia de diversidad¡±, dijo Shakira. ¡°Este show va a tener una connotaci¨®n social bastante importante¡±, dijo la colombiana.

El espect¨¢culo estaba producido por Roc Nation, la compa?¨ªa del magnate del rap Jay-Z. La liga NFL acudi¨® a Jay-Z despu¨¦s de las cr¨ªticas por contratar a Maroon 5, un grupo de puro pop blanco, para la Super Bowl del a?o pasado en Atlanta, donde bulle un nuevo hip hop. El encargo era que la empresa de Jay-Z ayudara a la NFL a estar m¨¢s en sinton¨ªa con la realidad estadounidense. B¨¢sicamente, a darse cuenta de cosas como que el hip hop es la m¨²sica mainstream de Estados Unidos hace a?os. En una entrevista con The New York Times, el ejecutivo de Roc Nation Juan Perez dec¨ªa: ¡°Alguien tiene que dar una patada a la puerta y recibir el primer tiro. Nosotros somos esa empresa¡±.

Si para un show en Atlanta habr¨ªa sido conveniente llevar estrellas del hip hop, para el de Miami (70% de poblaci¨®n de herencia hispana), Jay-Z busc¨® a dos superestrellas latinas. Jay Z le hab¨ªa pedido personalmente a Gloria Estefan que saliera tambi¨¦n en la actuaci¨®n, seg¨²n revel¨® ella misma en una entrevista con ET. La cantante, verdadero s¨ªmbolo de la ¨¦lite latina de Miami adem¨¢s de mentora de Shakira, rechaz¨® la oferta porque supone mucho estr¨¦s y meses de preparaci¨®n. ¡°Lo he hecho dos veces. Creo que las dos mujeres que lo van a hacer son perfectas para representar a Miami¡±. Estefan fue la primera latina en actuar en la Super Bowl, en 1992 y 1999.

El primer choque de la m¨²sica popular estadounidense hecha por latinos con la cultura anglosajona en televisi¨®n se puede datar en octubre de 1968. Un joven portorrique?o ciego con una voz descomunal llamado Jos¨¦ Feliciano fue invitado a cantar el himno nacional en el quinto partido de las Series Mundiales de b¨¦isbol en Detroit. Feliciano con su guitarra interpret¨® la que se considera la primera versi¨®n libre del himno, sin el aire marcial que se le daba normalmente, cantada delante del gran p¨²blico.

¡°Hab¨ªa veteranos tirando zapatos contra la televisi¨®n, me quer¨ªan deportar¡±, contaba Feliciano en el documental The Latin Explosion: A New America (HBO, 2015). Despu¨¦s de aquello, asegura Feliciano, fue vetado en las radios y su carrera se puso cuesta arriba. Detroit invit¨® de nuevo a Feliciano a tocar el himno en 2010, y le pidi¨® que lo hiciera exactamente igual, en su estilo latin-folk, en recuerdo de aquel hito televisivo. El pa¨ªs era otro completamente distinto.

Aquel documental trataba de reflejar c¨®mo la cultura latina, principalmente a trav¨¦s de la m¨²sica, hab¨ªa pasado de tener destellos en la cultura general norteamericana de vez en cuando (la versi¨®n de La bamba de Los Lobos en los ochenta, Conga de Miami Sound Machine en los noventa, Macarena de Los del R¨ªo, La Vida Loca de Ricky Martin), a convertirse en una parte central de esa cultura, con artistas que compiten en las listas y en las radiof¨®rmulas con sus propios ritmos, sin imitar al pop estadounidense, y cantando en espa?ol.

El fen¨®meno ha explotado en los ¨²ltimos cinco a?os con la m¨²sica urbana de Puerto Rico y Colombia, que se ha fundido con el hip hop y hoy es la m¨²sica mainstream bailable de Estados Unidos. Junto con L¨®pez y Shakira aparecieron en el escenario de la Super Bowl los dos principales representantes de ese g¨¦nero en este momento: el portorrique?o Bad Bunny y el colombiano J Balvin. Lo que se vio en el escenario no era una curiosidad latina, eran cuatro de los artistas m¨¢s conocidos en los institutos de Estados Unidos. Los ex¨®ticos no eran ellos. Los raros son los norteamericanos a los que a¨²n les parezca que el del domingo era un espect¨¢culo de minor¨ªas.