?D¨®nde est¨¢ el Marvel de Netflix?
Camino de los tres a?os de su primera gran compra, Netflix a¨²n sigue escondiendo sus cartas de su propio universo superheroico
De todas las historias que circulan de Netflix y el pulso que le est¨¢ echando a todas las industrias en su kamikaze apuesta por el contenido cultural, mi favorita surge de una entrevista de Hollywood Reporter Ryan Murphy, pope de la televisi¨®n, despu¨¦s de su fichaje en exclusiva por Netflix por la astron¨®mica cifra de 269 millones de euros. A la pregunta clave, ?por qu¨¦?, explicaba Murphy una curiosa an¨¦cdota.?
"Queremos que veas qu¨¦ significas para nosotros", le dijo Ted Sarandos, el mago entre bambalinas del milagro Netflix, a Murphy. A esa enigm¨¢tica frase siguieron dos horas de reuni¨®n en la que un grupo de analistas abrum¨® a Murphy con un an¨¢lisis de los 117 millones de personas (ahora ya, 167) expuestos a sus series a trav¨¦s de la plataforma. Tras el bombardeo, Murphy solo ten¨ªa una sensaci¨®n en el cuerpo: "Me fui de la reuni¨®n con el sentimiento de haber contemplado el futuro".
El otro gran beneficiado, y antes incluso que Murphy, de ese futuro, fue Mark Millar. Escoc¨¦s, uno m¨¢s de esa generaci¨®n inagotable de brit¨¢nicos que surgieron del Juez Dredd de 2000 A.D. y que luego conquistaron las grandes, Marvel y DC, Mark Millar (50 a?os) pronto demostr¨® un hambre de autor¨ªa similar a la de genios como Alan Moore o Neil Gaiman y se deslig¨® de los grandes personajes para crear su propio Marvel: el Millarworld. De ah¨ª surgieron pelotazos cinematogr¨¢ficos como Kick-Ass, Wanted o la m¨¢s reciente serie de filmes Kingsman.
Millarworld Netflix
T¨ªtulos:
- The Magic Order 1-6#
- Prodigy 1-6#
- Space Bandits 1-6#
- Sharkey, the Bounty Hunter 1-6#
- American Jesus: The New Messiah 1-3#
- Chrononauts: Future Shock 1-4#
Editorial en Espa?a: Panini
P¨¢ginas: 168
Precio por volumen: 17,10 €
Disponibles:
Pero hab¨ªa mucho, mucho m¨¢s. Y Netflix, all¨¢ por agosto de 2017, anunciaba el pelotazo. Nunca se ha hecho p¨²blica la cantidad, pero Millar hab¨ªa vendido literalmente su mundo, todo su universo creativo, a la compa?¨ªa de Reed Hastings. A partir de entonces, silencio... Un par de salvas ¡ªel 8 de diciembre de 2018 Millar anuncia que las primeras series en llegar a Netflix ser¨¢n Jupiter Legacy y American Jesus y el 11 de marzo de 2019 que Supercrooks se adaptar¨¢ en formato anime¡ª y poco m¨¢s. El mismo silencio que envuelve, de momento, lo que est¨¢n planeando Shonda Rhimes ¡ªhubo un primer escarceo de las 8 series que prepara y de momento solo un anuncio con fecha, Bridgertown¡ª, el propio Ryan Murphy ¡ªde momento, solo su Hollywood para mayo, que suena fascinante¡ª o los creadores de Juego de Tronos, David Benioff y David Weiss.
?A qu¨¦ juega Netflix, entonces, a fichar y luego olvidarse? ?Y d¨®nde est¨¢ su prometido Marvel, el primero de toda esta org¨ªa desbocada de fichajes en exclusiva?
El caso es que el fan de tebeos juega con ventaja. Especialmente, si sigue las novedades allende los mares. En estas mismas p¨¢ginas, ya rese?¨¦ el primer tebeo del Millarworld bajo la batuta de Netflix: The Magic Order. Resumiendo: me fascin¨®. Desde entonces he seguido muy atento todos los lanzamientos de nuevos tebeos dentro de esta nueva fase del Millarworld. Y, ?saben qu¨¦? Me han fascinado. Tanto por el contenido como por el continente.?
Les hablo primero de lo segundo. ?C¨®mo presenta el Millaworld sus tebeos en la fase Netflix? Pues, de momento, en todos los casos, en el formato favorito de la compa?¨ªa: miniseries. Exactamente ¡ªsalvo en el caso de la secuela de American Jesus y el especial de Chrononauts¡ª miniseries de seis n¨²meros de 26 p¨¢ginas que exigen poco compromiso del lector pero que est¨¢n llenas de posibilidades. Podr¨ªan ser seis o podr¨ªan ser 600 episodios; usted elige. En todos ellos, adem¨¢s, se presentaba la p¨¢gina bajo este p¨¢rrafo, dejando clar¨ªsimo al lector de tebeo que Netflix piensa en el Millarworld como en su Marvel. Todos los c¨®mics en el punto de mira de la compa?¨ªa para futuras series y pel¨ªculas.
Pero es en el contenido donde alguien como yo, y supongo que muchos, encontramos lo verdaderamente emocionante. La verdad es que es el contenido lo que separa al Marvel de Netflix de lo que puede ofrecer el Marvel de Disney. Dentro del Marvel de Disney, uno sabe que hay l¨ªmites, transgresiones tem¨¢ticas, que jam¨¢s se traspasar¨¢n. En el Marvel de Netflix no queda pecado o trasgresi¨®n por explorar. Tiene todo el sentido, porque Millar siempre ha tenido como mayor virtud (tambi¨¦n, como suele suceder, a su vez su tal¨®n de Aquiles) una capacidad infinita para provocar.
Para que se hagan una idea, en esta primera hornada de c¨®mics tenemos un Nuevo Testamento cuya Jes¨²s es negra, adolescente y fugada de una secta religiosa creada para protegerla; combatir¨¢ al Anticristo cuando la serie llegue a Netflix. Tenemos tambi¨¦n unas Thelma & Louise de un futuro completamente Andy Warhol, donde cigalas de tama?o planetario se conciben como centros de ocio, que ejecutan un sanguinario #Metoo sobre los machos que les arruinaron la vida. Tenemos uno de esos machos, un cazarrecompensas que viaja por el espacio en un carrito de los helados (sic), al cargo de un cr¨ªo verdoso tan entusiasta como pesado. Tenemos a un c¨®ctel entre James Bond y Lex Luthor, un afroamericano que encabeza la serie Prodigy y que es el hombre "m¨¢s listo del mundo", viviendo aventuras contra un grupo de satanistas blancos que cazan ni?os por deporte. Y tenemos esa saga, entre El Padrino y Harry Potter, de famiglias de magos combatiendo en Chicago.
En fin, que sobran c¨®cteles molotov en ese Marvel de Netflix. Porque esta compa?¨ªa, que ha provocado terremotos en Hollywood como no se recuerden, parece tener claro que el espacio a ocupar si uno quiere enfrentarse a Marvel es llegar ad¨®nde ella jam¨¢s se permitir¨¢ llegar. ??xito o fracaso? Pues, est¨¢ por ver. Pero, para el fan del buen tebeo, y del imaginario, las streaming wars son, y seguir¨¢n siendo si el coronavirus nos lo permite, el Santo Grial del entretenimiento. Y, no lo duden, aunque Netflix calle, en silencio maquina.
Babelia
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