Andr¨¦s Lima: ¡°Shock II¡¯ partir¨¢ del coronavirus¡±
El director prepara la segunda parte de su obra basada en en el libro de Naomi Klein
Andr¨¦s Lima hace recuento: ¡°En las dos ¨²ltimas temporadas se nos dispar¨® el trabajo. Propuestas propias, encargos¡ Moby Dick, Sue?o, El chico de la ¨²ltima fila, La vuelta de Nora, Shock, Prostituci¨®n¡ A mitad de la gira de Prostituci¨®n lleg¨® el bicho. ¡°De Prostituci¨®n se ha ca¨ªdo toda la gira hasta oto?o. Y en oto?o parece que conservamos los bolos que hab¨ªa, aunque el otro d¨ªa me dijeron que hasta diciembre no abrir¨¢n los teatros p¨²blicos de la comunidad. Vivimos un tiempo en el que siempre hay que empezar las frases con el ¡®parece".
As¨ª pues, parece que si no hay contraorden, Shock volver¨¢ porque estaba fijada para finales de abril del 2021. ¡°Matizo¡±, a?ade, ¡°que las programaciones de la temporada 20-21 ya estaban planificadas en la mayor¨ªa de los teatros p¨²blicos. Han hecho un esfuerzo grande para replantear las obras a partir de septiembre, pero con mucha cautela: el equivalente de nuestro ¡®parece¡¯ es ¡®nos gustar¨ªa que fuese as¨ª". Andr¨¦s Lima pertenece a ese l¨²cido grupo de teatreros que combinan el entusiasmo con la duda, aunque esa duda no le impide tratar de ir hacia delante.
¡°Soy entusiasta, pero a cada d¨ªa que pasa el encierro noto mayor inquietud. Tambi¨¦n habr¨¢ que ver, al salir de la pandemia, cu¨¢nta gente se puede reunir en un teatro, porque eso va a tener algo de acto de creencia ciudadana: confiar en poder ir a un espacio con todas las medidas de seguridad en orden, arriesgarnos a recuperar el contacto, el encuentro, porque es vital¡±. Y una frase que me encanta, por lo que tiene de empuje, de ¨¢nimo: ¡°Pero queremos hacer Shock y Shock II. Y estamos trabajando en ello¡±.
Ah¨ª es nada. Lima busca contar con los mismos int¨¦rpretes ¨C Ernesto Alterio, Ram¨®n Barea, Natalia Hern¨¢ndez, Mar¨ªa Morales, Paco Ochoa y Juan Vinuesa ¨C ¡°encarnando a la mitad del siglo XX¡±, dice, entre la risa y la seriedad, ¡°y a lo mejor entra un actor o una actriz m¨¢s. Durante el coronavirus estamos haciendo muchas reuniones online con intercambio de trabajo para montar la nueva dramaturgia de Shock II, que cubre, como indica el t¨ªtulo, la segunda parte del libro de Naomi Klein, La doctrina del shock, en que est¨¢n inspirados los montajes¡±. El libro, a?ade, ¡°viene muy a colaci¨®n, porque siempre que nos enfrentamos al futuro conviene analizar lo sucedido en el pasado. El libro empezaba despu¨¦s de la Segunda Guerra Mundial, con los primeros experimentos que se hicieron con electroshocks en Estados Unidos y Canad¨¢ para uso militar. Las grandes corporaciones, con Milton Friedman a la cabeza, reivindican el neoliberalismo, y llegan los primeros experimentos de la ¡°doctrina del shock¡± apoyados por el poder, en este caso por Nixon, que respaldan a los militares de Chile y Argentina, y se extienden por todo el cono sur¡±. Lima quer¨ªa reflejar toda esa ¨¦poca, ¡°que acaba con la visita de Margaret Thatcher a Pinochet en su encierro londinense¡±.
El nuevo montaje, subraya, ¡°partir¨¢ del coronavirus: re¨²ne las condiciones perfectas. Es tan mundial que parece no venir de nadie, de ninguna parte. China y Estados Unidos se acusaron entre s¨ª, pero da lo mismo que est¨¦ provocado o a qui¨¦n beneficia: el gran shock est¨¢ servido, y es lo suficientemente fuerte como para que cambie el rumbo mundial. Hasta ahora, el gran conflicto del siglo XXI ha sido la guerra de Irak: todos los esfuerzos del neoliberalismo desembocaron en ella, y la forma en que qued¨® la zona fue muy representativa del capitalismo del desastre¡±.
La segunda parte del montaje retroceder¨¢ hacia la revoluci¨®n conservadora, encabezada por Thatcher y Reagan. Pasamos por los a?os 80, Tiananmen, la ca¨ªda del muro de Berl¨ªn, la guerra de Irak y los conflictos de Oriente Pr¨®ximo. ¡°Me parece que es una historia clave para reflejar paso a paso la doctrina del capitalismo del desastre. Y uno de mis referentes, tanto en estructura como en intenci¨®n, es Los persas, de Esquilo¡±. Otra de sus propuestas, me dice, es ¡°retomar de nuevo la calle, que en la transici¨®n fue un escenario capital. Me gustar¨ªa remontar al aire libre Prostituci¨®n: creo que es una obra did¨¢ctica. Hacer un teatro accesible y popular. Volviendo a lo que dec¨ªa antes, el encuentro postcorona virus se puede dar y ser¨¢ f¨ªsico. Una amiga de Barcelona me ha planteado la necesidad de hacer una especie de servicios de urgencia esc¨¦nicos: de eso saben mucho Payasos sin Fronteras. Pero tambi¨¦n est¨¢ empezando a mostrarse en clave virtual, en pantallas. Pienso que las plataformas de televisi¨®n pueden ser una de las v¨ªas para que fluya el arte dram¨¢tico. Importa el encuentro entre las almas. No soy creyente en las almas, pero s¨ª en el esp¨ªritu¡±. Y aplaudo esta otra frase de Andr¨¦s Lima: ¡°El teatro puede ser importante para afrontar la vida con alegr¨ªa y sin perder el sentido cr¨ªtico¡±.
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