Hans Rudolf Gerstenmaier, el coleccionista alem¨¢n que decidi¨® ser espa?ol
Conocido desde que decidiera donar 11 de sus cuadros al Museo del Prado, este apasionado del arte muere sin aclarar los planes sobre su colecci¨®n
Hans Rudolf Gerstenmaier (Hamburgo, 1934) ten¨ªa 28 a?os cuando decidi¨® que era el momento de dar un cambio radical a su vida y abandonar la monoton¨ªa de clase media trabajadora en la que viv¨ªa en su ciudad de origen. Con mil pesetas (seis euros) en el bolsillo, viaj¨® hasta el Madrid de 1962, en plena dictadura franquista, en la que, sin embargo, consigui¨® sentirse uno m¨¢s desde el primer momento siguiendo los consejos de su madre: no hables nunca de religi¨®n o de pol¨ªtica.
A trav¨¦s de la colonia alemana consigui¨® contactos con las grandes firmas automovil¨ªsticas de su pa¨ªs de origen (Mercedes, Volkswagen, BMW) y logr¨® crear en 1964 su propia empresa de suministros de recambios (Gerstenmaier S. A.) con la que lleg¨® a tener 150 empleados y 30 sucursales por el territorio espa?ol. Vendi¨® la compa?¨ªa en el a?o 2000 y desde entonces se pudo dedicar a las dos grandes pasiones de su vida: la jardiner¨ªa y el arte. El coleccionista ha fallecido en la madrugada de este s¨¢bado, seg¨²n han informado sus familiares.
Conocido entre sus muchos amigos como Rodolfo, hablaba un espa?ol marcadamente madrile?o, compr¨® sus primeras obras con 5.000 pesetas en un Madrid lleno de anticuarios. Aseguraba que nunca adquiri¨® nada para especular, sino para mirar y disfrutar. Su domicilio madrile?o en el distrito de Chamart¨ªn y su casa de El Boalo eran un aut¨¦ntico museo en el que conviv¨ªan pintoras de artistas flamencos y espa?oles.
Su colecci¨®n se hizo famosa en Espa?a cuando hace dos a?os decidi¨® donar al Museo del Prado 11 pinturas de los artistas m¨¢s importantes de finales del XIX y comienzos del XX: Joaqu¨ªn Sorolla, Aureliano de Beruete, Agust¨ªn de Riancho, Dar¨ªo de Regoyos, Juan de Echeverr¨ªa, Hermen Anglada-Camarasa, Eduardo Chicharro, Ignacio Zuloaga y Joaqu¨ªn Mir.
Sobre los planes que albergaba para una colecci¨®n que supera el centenar de obras, Gerstenmaier no lleg¨® a pronunciarse en p¨²blico. Lleg¨® realizar 75 exposiciones en Espa?a y en el extranjero. A cambio, siempre ped¨ªa que se le editara un cat¨¢logo. En una entrevista con este peri¨®dico cont¨® que hab¨ªa tenido diferentes ofertas para ubicar su colecci¨®n, pero que no quer¨ªa moverse fuera de Madrid.
?Pensaba en una nueva donaci¨®n al Museo del Prado? El mecenas sonri¨® entonces y contest¨®: ¡°Voy a cumplir 85 a?os y en Hamburgo no me quedan familiares directos. Tampoco desde all¨ª ha habido ninguna instituci¨®n interesada e insisto en que mi patria es Espa?a. De momento vamos a seguir con las exposiciones y los pr¨¦stamos. Mi ¨²ltima adquisici¨®n, una vista de la iglesia de San Gin¨¦s de Madrid de Mariano Fortuny viaja ahora a Venecia. Lo dem¨¢s ya iremos viendo¡±.
Babelia
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