Los Goya se acuerdan de Mario Casas

Es muy dif¨ªcil pillar en un renuncio a Mario Casas. En las entrevistas no trae el discurso aprendido: titubea, vuelve sobre sus palabras, reflexiona... Pero jam¨¢s dice algo de m¨¢s. La industria le quiere: mete a gente en las salas, es disciplinado y trabajador, meticuloso (Alberto Rodr¨ªguez, que le dirigi¨® en Grupo 7, bromea recordando que lleg¨® a rehuirle al salir de los ensayos para descansar de sus preguntas) y buen tipo (su principal rival en los Goya, Javier C¨¢mara, dice: ¡°Adoro a Mario¡±). Y sin embargo, su candidatura a mejor actor en los Goya por No matar¨¢s es la primera de su carrera, algo que llama poderosamente la atenci¨®n, menos a Casas (A Coru?a, 34 a?os). ?Nunca sinti¨® que se le escapaba una nominaci¨®n? ¡°No [radical]. Cada uno tiene su camino, y se ha dado este a?o. Entiendo que mis compa?eros valoran esta vez en No matar¨¢s y en El practicante la variedad de trabajos. Mira, yo me lo planteo de otra forma: ?cada temporada te peleas con los m¨¢s grandes! Yo ya no soy revelaci¨®n [carcajada]. ?A qui¨¦n quitas de Banderas, Tosar, Bardem, C¨¢mara, Guti¨¦rrez, De la Torre...? Ellos tienen un peso y una sabidur¨ªa¡±.

Casas ha estado confinado como todo el mundo, pero en 2020 ha estrenado tres pel¨ªculas, algo que muy pocos int¨¦rpretes han logrado. ¡°Al final son pel¨ªculas que se hacen antes y que por diversas circunstancias ¡ªentre ellas, que dos se estrenaron en Netflix [Hogar y El practicante]¡ª coinciden en su lanzamiento¡±, reflexiona. ¡°Yo trabajo para entretener al p¨²blico, por eso luchamos por que llegara a las salas No matar¨¢s. Y lo de estrenar en plataformas, pues igual: era importante entretener a la gente encerrada en sus casas. No olvido que este es un trabajo de equipo, de muchos, para que disfruten otros muchos¡±. Tambi¨¦n son guiones muy distintos: una constante de la carrera del actor, desde que en 2010 protagonizara Carne de ne¨®n, es la b¨²squeda de retos interpretativos. ¡°Reconozco que no quiero quedarme estancado en cosas c¨®modas o que ya he hecho. Si no, me aburro. Necesito meterme siempre en arenas movedizas, me voy haciendo mayor y puedo construir personajes m¨¢s complejos, como el de El practicante. A veces la apuesta sale peor; sin embargo, disfruto del proceso¡±.

Rodr¨ªguez le dio el primer papel de padre de familia en Grupo 7 (2012). ¡°Es un t¨ªo entregado como ni te imaginas. Incansable. La pel¨ªcula se levant¨® en parte porque rebaj¨® su sueldo¡±, asegura el director. ¡°Yo no ten¨ªa nada claro contratarle, por los dichosos prejuicios, y en la primera reuni¨®n se acabaron las dudas¡±. Aquel rodaje adem¨¢s fue en los tiempos en que a Casas le persegu¨ªan docenas de fot¨®grafos y fans. ¡°Le segu¨ªan en cuanto pisaba la calle. Hubo un d¨ªa de rodaje con tantas seguidoras que vimos peligrar la filmaci¨®n. Alguien de producci¨®n se acerc¨® a una de ellas, le explic¨® el riesgo, y al d¨ªa siguiente hab¨ªa carteles donde se le¨ªa: ¡®Si quer¨¦is a Mario, tenemos que irnos¡¯. En fin, tiene un potencial y una variedad... F¨ªjate en lo que le ha sacado, por ejemplo, ?lex de la Iglesia, y que protagoniza el cine de Oriol Paulo, porque fuera tambi¨¦n vende¡±.

Trailer de 'El practicante'

Entre esos riesgos tambi¨¦n estuvo encarnar a Francisco Boix, el preso espa?ol retratista del sufrimiento en los campos de concentraci¨®n, en El fot¨®grafo de Mauthausen (2018), de Mar Targarona. La directora lo define con cuatro palabras: ¡°Fant¨¢stico, fant¨¢stico, fant¨¢stico, fant¨¢stico¡±. Y rememora: ¡°Fue hiperresponsable, profesional... Y eso que pas¨® hambre y fr¨ªo en el rodaje, que fue dur¨ªsimo, sin cenas ni hermanamientos. La Academia llega tarde a este reconocimiento. Nos llena los cines, es estupendo... Espa?a es un pa¨ªs de suicidas¡±. Casas, sobre estos distintos papeles, reflexiona: ¡°Pienso mucho en el p¨²blico, por eso trabajo mucho. Como espectador, quiero que los actores que admiro me sorprendan. As¨ª que, a su vez, quiero sorprender a los espectadores. Que noten mi esfuerzo, mi cambio, mi trabajo. Yo me dejo la vida en cada pel¨ªcula. Cada personaje me afecta, con los a?os siento que mi personalidad ha sido forjada en parte por los papeles que he interpretado¡±. Y confiesa a qui¨¦n venera: ¡°Tengo devoci¨®n por Bardem, est¨¢ entre los cinco mejores del mundo, es una bestia. No me compares con ¨¦l, que me voy a casa, me meto en la cama y me escondo. Las comparaciones son un recurso f¨¢cil, y tramposo: un d¨ªa est¨¢s arriba y al d¨ªa siguiente ya no trabajas, como en una monta?a rusa. El consejo que he recibido siempre de otros actores es: ¡®Trabaja, trabaja, trabaja¡±.

S¨¦quito familiar

Con los a?os, Casas ha construido un s¨¦quito que nace de su familia. Mario es el mayor de cinco hermanos, su hermana Sheila es desde hace cinco a?os su abogada y representante, su hermano Christian es su contable y ?scar sigue sus pasos interpretativos (hay un quinto m¨¢s peque?o). ¡°Son los que mejor me conocen¡±, cuenta, ¡°y me dicen las verdades; son mi amuleto, a ellos siempre les paso los guiones, y en ese c¨ªrculo de cinco, seis personas, hay gustos muy distintos, recibo opiniones muy diferentes¡±. ?l, mientras, se mantiene al margen del ruido: ¡°No siento mucho el escrutinio de la industria. Al final soy un tipo que vive en la monta?a, con su perro, y cuando no trabajo estoy muy fuera de todo eso¡±.

El fot¨®grafo de Mathausen. Tr¨¢iler

Sobre No matar¨¢s, explica: ¡°Si El practicante era un papel m¨¢s complejo, No matar¨¢s requer¨ªa otro trabajo, el de vivirlo in situ, el de estar metido constantemente en el personaje¡±. Su director, David Victori, habla de un actor muy implicado: ¡°Mario es un entregado a la obra, y en mi caso se coloc¨® en una situaci¨®n vulnerable, de una manera... anormal. El cine espa?ol le quiere; ahora bien, la Academia... Bueno, es una instituci¨®n compleja y sus decisiones, para bien o para mal, son colectivas. En realidad, no puedes culpar a nadie¡±.

En su futuro, m¨¢s all¨¢ de su peque?a aparici¨®n en la resurrecci¨®n de la serie Los hombres de Paco y del estreno en Netflix el 30 de abril de la miniserie El inocente, de Oriol Paulo, est¨¢ su salto a la direcci¨®n. ¡°Es uno de los pasos que quiero dar. Yo no me puedo estar quieto. Siempre estoy en movimiento, aprendiendo y creando. Y me fijo mucho en los directores. Creo que ya he adquirido una capacidad de trabajar con los actores, y me gustar¨ªa sumergirme en una pel¨ªcula como realizador para ahondar en ese lado, el de la colaboraci¨®n con los int¨¦rpretes¡±.

El gran chasco de su carrera

No hay una pel¨ªcula en la filmograf¨ªa de Mario Casas que le provoque sentimientos tan encontrados como La mula (2013), un drama sobre la Guerra Civil basado en la novela de Juan Eslava Gal¨¢n. "Fue un rodaje... tremendo. En realidad, mucho lo he olvidado o lo he querido olvidar. Es el mayor chasco en esta profesi¨®n, y pas¨® adem¨¢s cuando era joven. Tambi¨¦n sirvi¨® para aprender, desde luego. Estaba en una pel¨ªcula maravillosa, y de repente me la, mejor, nos la arrebataron". Casas se refiere a que a mitad de la filmaci¨®n, el director, el brit¨¢nico Michael Radford (El cartero y Pablo Neruda, El mercader de Venecia, 1984, abandon¨® su puesto porque la parte espa?ola no aport¨® el dinero pactado. Acab¨® la pel¨ªcula un realizador encapuchado. "Y curiosamente, mi personaje, aquel Juan Castro, es del que m¨¢s contento estoy. Si hubiera habido un making off se habr¨ªa visto que la realidad super¨® la ficci¨®n. Pas¨® de todo. Una pena".