Un reconocimiento al cine independiente y de mujeres
El cine de los m¨¢rgenes se ha vuelto, como todo lo peque?o, cercano y minoritario, central
De cuando en cuando a la Academia le gusta apuntarse el tanto de descubrir un nuevo talento y as¨ª sentirse rejuvenecer con savia nueva; ocurri¨®, por ejemplo, con Tesis, en 1997, o con El Bola, en 2001. Pero el triunfo de anoche en M¨¢laga de Las ni?as, la ¨®pera prima de Pilar Palomero, va m¨¢s all¨¢. Son varios los factores que convierten el Goya a Las ni?as en un acontecimiento de enorme carga simb¨®lica dentro de la industria espa?ola. Este Goya reconoce una pel¨ªcula dirigida por una primeriza, creada por un equipo de mujeres y sobre unas adolescentes de un colegio de monjas en 1992, y a la vez encumbra a la producci¨®n y distribuci¨®n independiente que estos meses no solo le ha robado el protagonismo a las grandes producciones, sino que ha sido crucial para mantener vivas las salas de cine.
Todo esto podr¨ªa deberse al avance del relevo generacional dentro de la Academia, pero tambi¨¦n a una incontestable evidencia: el cine de los m¨¢rgenes se ha vuelto, como todo lo peque?o, cercano y minoritario, central. La gala de la videollamada comenzaba como un evento de Apple, con Antonio Banderas ante una pantalla gigante dividida en centenares de caras, esa pantalla partida que se ha convertido en la met¨¢fora visual de la pandemia y que de alguna manera tambi¨¦n remite a la estrategia de montaje de otra de las pel¨ªculas de la noche, El a?o del descubrimiento, premiada en ese apartado (montaje) y en el de mejor documental. La pel¨ªcula de Luis L¨®pez Carrasco y la de Pilar Palomero est¨¢n unidas por un nexo: proceden del desencanto al espejismo de modernidad que supusieron los a?os noventa y concretamente los fastos de 1992 en Sevilla y Barcelona.
Los Goya est¨¢n bien vivos
Los Goya 2021 fueron extra?os, como no pod¨ªa ser de otra forma. El ambiente era c¨¢lido, incluso emotivo, pero faltaba calor. Fue parad¨®jico: mientras en el escenario se hac¨ªa un homenaje a Berlanga con el Americanos de Bienvenido, Mister Marshall, por la pantalla desfilaba un buen n¨²mero de estrellas de Hollywood dando su apoyo al cine espa?ol.
Este reivindic¨® el papel de las mujeres a trav¨¦s de Las ni?as, Ane y Akelarre, que se repartieron la mayor¨ªa de los galardones art¨ªsticos y t¨¦cnicos m¨¢s importantes de la noche, y tambi¨¦n lo hizo con el Goya de honor para ?ngela Molina. Una fuerza de la naturaleza que con su voz y elegancia ¨²nica record¨® la importancia que en su trayectoria ha tenido el amor, su padre y disfrutar la vida y que demostr¨®, una vez m¨¢s, por qu¨¦ es una mujer libre y una actriz inimitable.
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