Carlos ?lvarez: ¡°Quedan pocos divos en la ¨®pera. Por suerte¡±

La poderosa voz de bar¨ªtono de Carlos ?lvarez (M¨¢laga, 54 a?os) le ha llevado a interpretar a grandes malvados: Don Giovanni, Rigoletto, Yago, Scarpia¡­ es el destino de las tesituras graves. Por eso resulta casi morboso imaginarlo en el papel que estrena este mi¨¦rcoles en el Teatro Real de Madrid, que no es un malo, ni siquiera un hombre, sino una mujer: la descacharrante mamma ?gata, protagonista de la divertida obra de Donizetti Las conveniencias e inconveniencias teatrales, que parodia sin piedad las env...

La poderosa voz de bar¨ªtono de Carlos ?lvarez (M¨¢laga, 54 a?os) le ha llevado a interpretar a grandes malvados: Don Giovanni, Rigoletto, Yago, Scarpia¡­ es el destino de las tesituras graves. Por eso resulta casi morboso imaginarlo en el papel que estrena este mi¨¦rcoles en el Teatro Real de Madrid, que no es un malo, ni siquiera un hombre, sino una mujer: la descacharrante mamma ?gata, protagonista de la divertida obra de Donizetti Las conveniencias e inconveniencias teatrales, que parodia sin piedad las envidias y los egos del mundo de la ¨®pera a trav¨¦s de las peripecias de una decadente troupe de la que forma parte la hija de ?gata, cuya carrera ella ¡ªes decir, ¨¦l¡ª protege y promociona como feroz ¡°madre de la artista¡±. El montaje no lleva el t¨ªtulo original de Donizetti, sino el de una c¨¦lebre puesta en escena de 1969 dirigida por el director alem¨¢n Helmut K?utner, Viva la mamma.

El cantante se declara feliz por poder salirse en esta ocasi¨®n de sus m¨¢rgenes habituales. ¡°Es un reto maravilloso. Sobre todo porque la propuesta de Pelly [el director de escena] no trata a los personajes como estereotipos grotescos. La hilaridad de esta ¨®pera no est¨¢ ah¨ª, sino en las situaciones. Como una sitcom (comedia). Mi mamma no es un estereotipo exagerado, es una matriarca napolitana a la que Donizetti simplemente imagin¨® con voz de bar¨ªtono para subrayar su car¨¢cter fiero¡ª comenta ?lvarez antes de entrar a un ensayo en el Real¡ª. El personaje presenta adem¨¢s un segundo reto, en este caso vocal, cuando en un momento de la obra ?gata, que canta fatal, debe sustituir a un miembro de la compa?¨ªa. Es un delirio cuando tengo que destrozar el aria de Desd¨¦mona en el Otello de Rossini. ?Es muy dif¨ªcil cantar mal!¡±.

?lvarez se alternar¨¢ en el papel con Luis Cansino en 11 funciones previstas hasta el 13 de junio, con puesta en escena de Laurent Pelly y direcci¨®n musical de Evelino Pid¨° y Jos¨¦ Miguel P¨¦rez Sierra. En el reparto est¨¢ tambi¨¦n el tenor Xavier Anduaga (San Sebasti¨¢n, 26 a?os), flamante ganador del premio al mejor cantante joven del mundo en los prestigiosos International Opera Awards, en los que adem¨¢s ?lvarez qued¨® finalista como mejor cantante frente a Javier Camarena.

La pregunta del mill¨®n: ?son tan insufribles las gentes de la ¨®pera como las pinta Donizetti en esta obra? ?lvarez r¨ªe. ¡°?Nooo! Ahora ya no. Estos personajes son del mundo de la ¨®pera antigua. Afortunadamente, eso ha cambiado mucho. Los montajes son muy complejos y no podr¨ªan salir adelante si no fu¨¦ramos todos conscientes de que esto es un trabajo en equipo. No hay lugar ah¨ª para los caprichos. Y si se permiten en alg¨²n momento, el responsable no es solo el que lo pide, tambi¨¦n el que lo da¡±, responde. Entonces, ?el divo de ¨®pera ha muerto? ¡°Bueno, alguno queda. Pero pocos, por suerte¡±. Charlando con ¨¦l en la cafeter¨ªa del Real, parece claro que no es su caso: en los teatros donde trabaja deja rastro de su car¨¢cter cercano, su sentido del humor y su buena conversaci¨®n.

Si bien hace una d¨¦cada atraves¨® un par¨®n profesional muy duro por una displasia en las cuerdas vocales, despu¨¦s de tres operaciones y mucho esfuerzo de rehabilitaci¨®n ha recuperado en los ¨²ltimos a?os su lugar en la ¨¦lite de la l¨ªrica. No ha parado ni siquiera este a?o de pandemia. En noviembre arranc¨® un bis en el Teatro de la Zarzuela durante una funci¨®n de La del manojo de rosas, en una reposici¨®n de la emblem¨¢tica producci¨®n dirigida por Emilio Sagi hace 30 a?os que supuso adem¨¢s el debut de ?lvarez en ese escenario. En marzo y abril interpret¨® al Yago del Otello de Verdi bajo la batuta de Gustavo Dudamel en el Liceu de Barcelona. Y para septiembre encarnar¨¢ a Rigoletto para abrir la nueva temporada del Covent Garden.

Pero antes de aterrizar en el Covent Garden le queda otro reto por delante en el Real: inmediatamente despu¨¦s de mamma ?gata interpretar¨¢ en este escenario al Scarpia de Tosca. ¡°Una transici¨®n loca, s¨ª. Del jolgorio de la mamma a otro de esos malos que he interpretado tanto a lo largo de mi carrera. Pero con mucho gusto, ?eh! Me obligan continuamente a mirar dentro de m¨ª en busca de esa parte m¨¢s oscura. Es un ejercicio de autoan¨¢lisis maravilloso. Procuro no juzgarlos, claro, de otro modo no podr¨ªa hacerlos¡±, explica.

?Y no le cansa repetir tantas veces esos mismos personajes en producciones distintas? ¡°En absoluto. Cada montaje de ¨®pera es distinto, siempre empiezas de nuevo. Adem¨¢s, aunque sean todos unos cabrones, son poli¨¦dricos y muy distintos. Don Giovanni es un malo simpaticote. Rigoletto y Yago son malos circunstanciales. Y Scarpia¡­ es fant¨¢stico¡±, dice pensando ya en el siguiente trabajo, que estrenar¨¢ el 4 de julio bajo las ¨®rdenes de Paco Azor¨ªn y la direcci¨®n musical de Nicola Luisotti.

Volviendo a las gentes de la ¨®pera, ?qu¨¦ opina del anunciado regreso de Pl¨¢cido Domingo a los escenarios espa?oles [el 9 de junio actuar¨¢ en el Auditorio Nacional de Madrid y el 18 de agosto en el festival Starlite de Marbella] despu¨¦s de las acusaciones de acoso sexual que paralizaron su carrera hace dos a?os? ?lvarez parece haber reflexionado bastante sobre el asunto: ¡°M¨¢s all¨¢ de que ¨¦ticamente pueda ser reprobable, el problema de Pl¨¢cido es que no ha tenido un juicio legal, sino un juicio en la plaza p¨²blica. Y este no ofrece posibilidad de redenci¨®n porque no termina nunca, mientras que una sentencia judicial al menos pone un punto y final a un proceso. Y adem¨¢s mientras esta llega, cualquier persona tiene la posibilidad de seguir con su vida y su trabajo. Claro que trat¨¢ndose de una figura p¨²blica, es dif¨ªcil desligar la actividad profesional de la privada. Esa es la pena en el caso de Pl¨¢cido: que en su juicio se ha mezclado lo personal con lo profesional¡±.

Las conveniencias e inconveniencias teatrales, perteneciente al primer periodo de la carrera de Gaetano Donizetti, se estren¨® en N¨¢poles en 1827, pero luego fue olvidada durante mucho tiempo hasta que fue redescubierta en los a?os sesenta. Concebida por el compositor para burlarse de los c¨¢nones de la ¨®pera seria, la trama es un fabuloso enredo en el que no falta ninguno de los estamentos del g¨¦nero: divos y divas, compositores, libretistas, directores de escena, empresarios y hasta el p¨²blico. El montaje que se estrena este mi¨¦rcoles es una coproducci¨®n del Teatro Real con la ?pera Nacional de Lyon y el Gran Teatro de Ginebra, donde ya fue presentada en 2017 y 2018, respectivamente, con la misma puesta en escena de Laurent Pelly pero con otros int¨¦rpretes. En el coliseo madrile?o se alternar¨¢ un doble reparto en el que destacan Carlos ?lvarez y Luis Cansino (mamma ?gata), Nino Machaidze y Sabina Pu¨¦rtolas (Daria, la prima donna), Xabier Anduaga y Alejandro del Cerro (Guglielmo, el primer tenor), Borja Quiza y Gabriel Berm¨²dez (Procolo, el marido de Daria) y Sylvia Schwartz y Francesca Sassu (Luigia, la seconda donna).

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