Los nuevos disfraces de las tribus urbanas

Miguel Trillo, uno de los fot¨®grafos espa?oles m¨¢s internacionales por su empe?o en retratar la juventud y diseccionar los c¨®digos de las tribus urbanas, se dej¨® cautivar por Asia en su primer viaje a Manila en 2001. Entonces naci¨® un idilio con esas subculturas mucho m¨¢s osadas en sus atuendos que las de La Movida madrile?a que empez¨® a retratar a finales de los a?os setenta. J¨®venes asi¨¢ticos que no solo encarnan a sus h¨¦roes salidos de los c¨®mics manga, sino que se convierten ellos mismos en esos personajes de ficci¨®n. El romance de Trillo (Jimena de la Frontera, C¨¢diz, 67 a?os) a¨²n perdura y el resultado se muestra en la sala At¨ªn Aya de Sevilla bajo el t¨ªtulo Ficciones. Son 140 fotograf¨ªas a color tomadas en 23 ciudades, entre ellas Kuala Lumpur, Bangkok, Hong-Kong, Yakarta, Se¨²l, Singapur, Pek¨ªn, Saig¨®n, Taip¨¦i y Tokio; adem¨¢s de otras nueve europeas (cinco de ellas espa?olas) y cuatro americanas. Las instant¨¢neas, realizadas entre 2007 y 2019 (cuando la pandemia le impidi¨® seguir viajando), pueden verse en Sevilla por primera vez hasta el 12 de septiembre. Despu¨¦s viajar¨¢n al Centro de Arte Alcobendas (Madrid).

Fotogaler¨ªa: Las tribus globales de Miguel Trillo

Enfundadas en pl¨¢stico, al igual que se presentan a la venta los c¨®mics, pueden verse lolitas, emos o g¨®ticos a los que Trillo ha fotografiado en los m¨¢s importantes salones de manga y anime que se celebran en el mundo. A estas subculturas urbanas les une el fen¨®meno cosplay (contracci¨®n de la expresi¨®n inglesa costume play, jugar a disfrazarse) y nada tienen que ver con los mods, rockers, heavies, punkies o pijos que Trillo fotografiaba en Madrid en su fanzine Rockoc¨® (1980-1985).

¡°En cierto modo, sigo vinculado a las historias¡±, dice este profesor de Literatura que comenz¨® como interino en 1978 y ha seguido dando clases hasta su jubilaci¨®n, ¡°lo que ocurre es que en la nueva literatura juvenil todo es imagen virtual. Lo suyo son los c¨®mics y los videojuegos¡±, aclara Trillo, quien reconoce que no le gusta que lo fotograf¨ªen. ¡°La fotograf¨ªa es un regalo de la c¨¢psula del tiempo. Una vez, en uno de estos salones en Estocolmo me hicieron un avatar y es la imagen que uso en Instagram y en mi Facebook porque no envejece. Es como cuando de chico jugaba con los indios de pl¨¢stico, siempre ten¨ªan el mismo aspecto¡±, comenta el fot¨®grafo por tel¨¦fono desde Madrid, ciudad a la que se mud¨® en 2017 despu¨¦s de residir 23 a?os en Barcelona. Su ¨²ltimo libro, titulado La primera movida, es uno de los seleccionados entre las 10 mejores publicaciones del a?o en el festival de fotograf¨ªa franc¨¦s Encuentros de Arl¨¦s, que comenz¨® a principios de julio.

¡°Los j¨®venes que retrato viven en una continua fiesta de cumplea?os, donde reivindican el cuerpo y la diversi¨®n. Todo es color e imaginaci¨®n. Est¨¢n viviendo a?os de riesgo vital, pero sus balas son de confeti¡±, contin¨²a Trillo. Sema D¡¯Acosta, comisario de Ficciones, reflexiona sobre este nuevo trabajo de Trillo, completamente diferente a lo que pudo verse en 2009 en el Centro Andaluz de Arte Contempor¨¢neo. ¡°Antes las referencias para cualquier chaval eran su barrio, sus amigos, el instituto. Era un ambiente local que con la introducci¨®n de las redes sociales ha cambiado completamente y se ha producido una homogeneizaci¨®n de la cultura y las referencias, la famosa globalizaci¨®n. Los h¨¦roes dejan de ser personas reales para convertirse en personajes de manga o en superh¨¦roes, algo que se da m¨¢s en Am¨¦rica. La plaza del barrio ha sido sustituida por un ¨¢gora virtual dominada por las redes sociales¡±, asegura D¡¯Acosta, comisario tambi¨¦n de Tr¨ªplex. Luis Gordillo, Miki Leal, Rub¨¦n Guerrero, que est¨¢ abierta en el Espacio Santa Clara hasta finales de septiembre.