La Feria de Oto?o, un at¨ªpico ciclo taurino en una temporada lastrada por la pandemia

Comienza este viernes en la plaza de Las Ventas la Feria de Oto?o, un ciclo at¨ªpico en esta extra?a temporada de la era poscovid. Seis corridas y tres novilladas durante tres fines de semana culminar¨¢n un largo tiempo de sequ¨ªa taurina en la capital, que comenz¨® en octubre de 2019 y se extendi¨® hasta el pasado 2 de mayo, cuando la Comunidad de Madrid organiz¨® un festival.

Estos festejos madrile?os coinciden en el tiempo con la Feria de San Miguel ¡ªdel 18 de septiembre al 3 de octubre¡ª en la Maestranza, tambi¨¦n cerrada durante dos a?os.

Madrid y Sevilla son la parte m¨¢s visible de la peor cornada que ha sufrido la tauromaquia en toda su historia. Ha habido festejos este a?o, (¡°Ha vuelto la actividad, pero no la normalidad¡±, repite Victorino Mart¨ªn, ganadero y presidente de la Fundaci¨®n Toro de Lidia), pero la fiesta no ha despertado de verdad hasta que la brisa del r¨ªo Guadalquivir no ha entrado por la Puerta del Pr¨ªncipe, y desde la calle de Alcal¨¢ se vislumbran los tendidos de Las Ventas.

Se dice que ha pasado lo peor; que el enfermo, tan achacoso por patolog¨ªas propias, ha salido de la UCI tras la aparatosa y da?ina voltereta de la pandemia. Pero a¨²n no se sabe cu¨¢nto durar¨¢ la rehabilitaci¨®n y si la recuperaci¨®n ser¨¢ total y definitiva.

De momento, en 2021 se volvieron a suspender los principales ciclos taurinos: las Fallas, la Feria de Abril, San Isidro, los Sanfermines, las Corridas Generales de Bilbao y, recientemente, se ha anunciado que tampoco se celebrar¨¢ la feria taurina del Pilar de Zaragoza.

Y lo peor no es eso. Lo m¨¢s grave es el da?o profundo que la pandemia ha asestado a la tauromaquia en el ¨¢nimo y en los bolsillos de todos sus integrantes: toreros, ganaderos, empresarios y aficionados.

As¨ª, el futuro es una inc¨®gnita. ?Volver¨¢n los toros a ser lo que eran en 2019, cuando ya sufr¨ªan los avatares de los muy serios problemas internos, los ataques de los antitaurinos, el avance acelerado de los animalistas y el abandono o el silencio pasivo del Gobierno central y muchas administraciones auton¨®micas, provinciales y locales?

Nadie lo sabe. Lo ¨²nico cierto es que la fiesta de los toros ha vuelto cuajada de achaques y disminuida por la limitaci¨®n de aforos y la crisis econ¨®mica.

Los primeros damnificados han sido y siguen siendo los ganaderos. Los datos son estremecedores, y dan una idea muy aproximada de los efectos del devastador tsunami que ha supuesto la pandemia. En 2020, se celebraron en Espa?a 99 festejos mayores (corridas, novilladas, rejoneo y festivales) frente a los 1.425 del a?o anterior, lo que supuso una bajada del 90%, y el n¨²mero de reses lidiadas pas¨® de 7.200 a 549, seg¨²n datos de la Uni¨®n de Criadores de Toros de Lidia (UCTL).

Si se tiene en cuenta que la crianza de un toro oscila entre los 4.500 y 5.000 euros y el precio de la carne no alcanza m¨¢s all¨¢ de un euro por kilo, las p¨¦rdidas econ¨®micas se presumen muy abultadas.

El presidente de la UCTL, Antonio Ba?uelos, no ha dudado en calificar la situaci¨®n de ¡°ruinosa¡±, si bien aclara que los ganaderos deben equilibrar la oferta a la demanda, ¡°y es el momento de reducir la caba?a brava¡±.

Esta situaci¨®n ha supuesto una dur¨ªsima sacudida para las 347 ganader¨ªas de la UCTL, las m¨¢s reconocidas del mercado, y las 750 restantes, integradas en otras cuatro organizaciones diferentes.

Ba?uelos se lamentaba recientemente de que ¡°hoy, no se paga ning¨²n toro por costo real de su crianza¡±, y algunos ganaderos se ha quejado en este peri¨®dico de los precios que les hab¨ªan ofrecido por una corrida: desde 9.000 hasta los 6.000 euros, lo que da una idea del problema real del sector, que en su mayor¨ªa ha optado por enviar los toros al matadero.

Los toreros

Otro sector muy afectado es el de los toreros, muchos de los cuales no han vuelto a vestir el traje de oro o plata desde el inicio de la pandemia; y los que han tenido la oportunidad de hacer el pase¨ªllo han debido aceptar condiciones econ¨®micas desconocidas hasta el momento.

La limitaci¨®n de los aforos de las plazas, impuesta por la situaci¨®n sanitaria, ha mermado los ingresos por taquilla, y, en consecuencia, los emolumentos de los toreros. En l¨ªneas generales, todos han debido reducir sus salarios un 50%, y muchos de ellos deben conformarse con los m¨ªnimos que establece el convenio nacional taurino; y a¨²n quedan algunos, que no son pocos, que torean gratis o corren con sus propios gastos.

Jos¨¦ Pedro Prados El Fundi, presidente de la Uni¨®n de Toreros, aseguraba hace unos d¨ªas en este peri¨®dico que la limitaci¨®n de aforos est¨¢ afectando ¡°much¨ªsimo al cach¨¦ de los toreros¡±. ¡°Las figuras deben rebajar sus pretensiones, y los que m¨¢s torean es porque se ajustan a las circunstancias, y eso es lo que hay¡±, a?ad¨ªa.

Los empresarios, por su parte, est¨¢n convencidos de que este no es un momento para ganar, sino para no perder y garantizar el futuro.

En estas circunstancias, las empresas de Sevilla y Madrid han abierto sus puertas convencidas de que la crisis econ¨®mica y el recelo que a¨²n provoca la pandemia dificultar¨¢n que se acabe el papel en las taquillas a pesar de que La Maestranza pone a la venta el 60% del aforo, y el 50% en Las Ventas. Se da la circunstancia de que en ambas comunidades est¨¢ permitido el 75%, que las empresas no pueden aplicar al estar distribuidas las entradas sobre el aforo autorizado en el momento de su puesta a la venta.

As¨ª, hoy comienza la Feria de Oto?o y continua la de San Miguel, aunque el tiempo dir¨¢ si las aguas vuelven a su cauce en 2022 o se cumplen los negativos augurios de Ram¨®n Valencia, empresario de La Maestranza: ¡°La Feria de Abril del pr¨®ximo a?o deber¨¢ quedar reducida a poco m¨¢s de una semana de toros¡±, dec¨ªa en una reciente reuni¨®n con medios de comunicaci¨®n; y a?ad¨ªa que ¡°esto [el negocio taurino] tiene que ir a menos porque tantas corridas no se sostienen econ¨®micamente¡±.

Lo que no dice Valencia ni ANOET, la patronal que agrupa a los organizadores de festejos, es qu¨¦ medidas van a poner en marcha para evitar la huida de los aficionados de las colas de las taquillas.

Todo hace pensar que cuando la pandemia sea historia, permanecer¨¢n los muchos y graves problemas que aquejan a la fiesta de los toros y ponen en peligro la recuperaci¨®n y el futuro.